ONU lanza una nueva comisión de investigación sobre la represión siria
Ginebra, EP
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha lanzado una nueva comisión de investigación sobre la represión de las manifestaciones antigubernamentales en Siria, incluidos posibles crímenes contra la humanidad, a pesar de las objeciones por países como Rusia, China y Cuba.
El órgano de 47 miembros adoptó fácilmente una resolución presentada por la Unión Europea y Estados Unidos por 33 votos a favor, cuatro en contra y nueve abstenciones. Libia, que formaba parte de este Consejo, fue suspendida del mismo tras comenzar la represión a las protestas contra el régimen de Muamar Gadafi y por tanto no tiene derecho a voto.
"La resolución ha sido adoptada", ha anunciado la embajadora uruguaya, Laura Dupuy Lasserre, que preside el Consejo, tras la votación. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha mantenido una reunión de emergencia para abordar la situación en Siria donde, según señaló ayer la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, han muerto ya 2.200 personas en la represión.
El Consejo ha condenado lo que ha calificado de "continuada, grave y sistemática violación de los Derechos Humanos por las autoridades sirias como ejecuciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza y asesinato y persecución de manifestantes y defensores de los Derechos Humanos".
Así las cosas, en el segundo y último día de la sesión de emergencia, el Consejo ha lanzado una investigación para aclarar los hechos "y, de ser posible, identificar a aquellos responsables con vistas a garantizar que los autores de violaciones, incluidas aquellas que puedan constituir crímenes contra la Humanidad, rinden cuentas".
El embajador sirio ante la ONU en Ginebra, Faysal Jabbaz Hamoui, rechazó la resolución, que consideró no es equilibrada. "Esto confirma una vez más que hay una determinación para condenar políticamente a Siria y pasar por alto cualquier propuesta de apertura y reforma que existe en este país", ha lamentado, en una declaración antes de la votación para pedir el rechazo de la resolución.
Las delegaciones de Rusia, China y Cuba tomaron la palabra para denunciar lo que calificaron de injerencia en los asuntos internos sirios y dijeron que votarían en contra del texto. Ecuador también votó en contra de la resolución.
