Aumenta a 10 el número de muertos por el tifón Nanmadol en Filipinas
Manila, EFE
Las autoridades de Filipinas elevaron hoy a diez el número de muertos por las inundaciones y los corrimientos de tierra causados por el tifón Nanmadol, que también ha provocado la evacuación de 7.000 personas en el norte del país.
Entre los fallecidos hay cinco niños de entre 4 y 13 años, víctimas ayer de los corrimientos de tierra en la provincia de Pangasinan y en el área montañosa de Baguio.
El resto de las víctimas murieron a causa de las riadas y los corrimientos de tierra, principalmente en las zonas montañosas, o a causa del temporal en el mar.
Según la Oficina de Defensa Civil, continúan desaparecidas por lo menos seis personas, la mayoría pescadores.
El tifón, que anegado al menos ocho puentes y una veintena de carreteras, ha afectado a alrededor de 50.000 personas, de las que 7.000 se encuentran en centros de evacuación.
Nanmadol, que entró en el archipiélago el pasado jueves con vientos de hasta 240 kilómetros por hora, se cierne sobre las islas Batanes, en el extremo norte del país, y se dirige hacia Taiwán, según el servicio meteorológico filipino.
El mes pasado, 72 personas murieron en Filipinas por la acción combinada de una tormenta tropical y un tifón, que además afectó a un millón de habitantes.
Entre 15 a 20 tifones afectan a este país asiático cada año durante la estación lluviosa, que por lo general comienza en mayo y concluye noviembre.
Los expertos de las agencias internacionales identifican el chabolismo como el principal factor del gran número de víctimas que causan en Filipinas los desastres naturales y que evidencian el mal estado de las infraestructuras.
Las autoridades de Filipinas elevaron hoy a diez el número de muertos por las inundaciones y los corrimientos de tierra causados por el tifón Nanmadol, que también ha provocado la evacuación de 7.000 personas en el norte del país.
Entre los fallecidos hay cinco niños de entre 4 y 13 años, víctimas ayer de los corrimientos de tierra en la provincia de Pangasinan y en el área montañosa de Baguio.
El resto de las víctimas murieron a causa de las riadas y los corrimientos de tierra, principalmente en las zonas montañosas, o a causa del temporal en el mar.
Según la Oficina de Defensa Civil, continúan desaparecidas por lo menos seis personas, la mayoría pescadores.
El tifón, que anegado al menos ocho puentes y una veintena de carreteras, ha afectado a alrededor de 50.000 personas, de las que 7.000 se encuentran en centros de evacuación.
Nanmadol, que entró en el archipiélago el pasado jueves con vientos de hasta 240 kilómetros por hora, se cierne sobre las islas Batanes, en el extremo norte del país, y se dirige hacia Taiwán, según el servicio meteorológico filipino.
El mes pasado, 72 personas murieron en Filipinas por la acción combinada de una tormenta tropical y un tifón, que además afectó a un millón de habitantes.
Entre 15 a 20 tifones afectan a este país asiático cada año durante la estación lluviosa, que por lo general comienza en mayo y concluye noviembre.
Los expertos de las agencias internacionales identifican el chabolismo como el principal factor del gran número de víctimas que causan en Filipinas los desastres naturales y que evidencian el mal estado de las infraestructuras.