Al menos 10 muertos por un ataque con bomba en Pakistán
Quetta, EP
Al menos diez personas han muerto y otras 20 han resultado heridas este miércoles por la explosión de una bomba que habría sido detonada por un terrorista suicida en un coche en Quetta, capital de la provincia paquistaní de Baluchistán, ubicada en el suroeste del país, según ha informado la Policía.
Entre los fallecidos figuran dos mujeres y dos niños. "Según los primeros datos, parece que ha sido un atentado con coche bomba perpetrado por un suicida, pero seguimos investigando", ha declarado el policía Hamid Shakeel a la agencia Reuters.
Unos diez vehículos se incendiaron a causa de la explosión, que también ha provocado daños en viviendas cercanas.
Otro policía, Ayaz Halder, ha dicho que se trata de un ataque por motivos religiosos y que se produjo en una zona habitada principalmente por hazaras, que practican el chiismo. La mayoría de los paquistaníes son musulmanes suníes, mientras que los chiíes representan entre el 15 y el 20 por ciento de la población.
De momento, nadie se ha atribuido la autoría del atentado, que coincide con la celebración de la festividad de Eid al Fitr, que marca el fin del Ramadán, el mes sagrado en el que los musulmanes ayunan.
Aunque por lo general en Pakistán los suníes y los chiíes conviven pacíficamente, milicianos de ambas comunidades han matado a miles de personas en ataques de represalia desde los años 80. Ambas ramas del islam se separaron en el siglo VII por la cuestión de la sucesión del profeta Mahoma.
Al menos diez personas han muerto y otras 20 han resultado heridas este miércoles por la explosión de una bomba que habría sido detonada por un terrorista suicida en un coche en Quetta, capital de la provincia paquistaní de Baluchistán, ubicada en el suroeste del país, según ha informado la Policía.
Entre los fallecidos figuran dos mujeres y dos niños. "Según los primeros datos, parece que ha sido un atentado con coche bomba perpetrado por un suicida, pero seguimos investigando", ha declarado el policía Hamid Shakeel a la agencia Reuters.
Unos diez vehículos se incendiaron a causa de la explosión, que también ha provocado daños en viviendas cercanas.
Otro policía, Ayaz Halder, ha dicho que se trata de un ataque por motivos religiosos y que se produjo en una zona habitada principalmente por hazaras, que practican el chiismo. La mayoría de los paquistaníes son musulmanes suníes, mientras que los chiíes representan entre el 15 y el 20 por ciento de la población.
De momento, nadie se ha atribuido la autoría del atentado, que coincide con la celebración de la festividad de Eid al Fitr, que marca el fin del Ramadán, el mes sagrado en el que los musulmanes ayunan.
Aunque por lo general en Pakistán los suníes y los chiíes conviven pacíficamente, milicianos de ambas comunidades han matado a miles de personas en ataques de represalia desde los años 80. Ambas ramas del islam se separaron en el siglo VII por la cuestión de la sucesión del profeta Mahoma.