Al Assad insiste en que no cesará su "persecución de terroristas" en el país
Beirut, EP
El presidente sirio, Bashar al Assad, ha dejado claro este martes al ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, con el que se ha reunido en Damasco, que su Gobierno no cesará en su lucha contra los grupos terroristas que operan en el país, a lo que ha responsabilizado hasta ahora de la muerte de civiles en las protestas que comenzaron en marzo.
Según informa la agencia oficial siria SANA, Al Assad ha dejado claro que "no será tolerante en su persecución de los grupos terroristas armados para proteger la estabilidad del país y la seguridad de los ciudadanos".
Asimismo, ha asegurado que "está determinado a completar los pasos actuales para una reforma exhaustiva" del país y le ha hecho saber que Siria está "abierta a cualquier ayuda que le ofrezcan países hermanos y amigos en este sentido".
Siempre según SANA, el presidente sirio ha aprovechado su encuentro con Davutoglu para informarle de los hechos ocurridos en algunas ciudades del país como consecuencia de los actos perpetrados por grupos terroristas armados contra la población civil y las fuerzas del orden.
Por su parte, el ministro de Exteriores turco ha indicado que no llevaba a Damasco el mensaje de nadie, incidiendo en que a Turquía simplemente le preocupa la seguridad y estabilidad del país vecino. "Al igual que Turquía considera que lo que ocurre en Siria es un asunto interno turco, Siria, también, tiene las mismas consideraciones respecto a cualquier cuestión a la que se enfrenta Turquía", ha señalado el ministro, según SANA.
Davutoglu ha subrayado que bajo la dirección de Al Assad, Siria se convertirá en un modelo en el mundo árabe una vez culminen las reformas anunciadas, al tiempo que ha destacado que la estabilidad en este país es clave para la región.
Según SANA, al encuentro han asistido el ministro de Exteriores sirio, Walid Moalem, la consejera política y de prensa del presidente, Bouthaina Shaaban, y el viceministro de Exteriores, Abdul-Fattah Ammoura, así como la delegación que acompañó a Davutoglu.
La agencia semioficial turca Anatolia ha informado de que Davutoglu ha mantenido un encuentro a solas con Al Assad durante dos horas y cuarto, al término del cual el ministro turco no ha querido hacer declaraciones. Según esta agencia, está previsto que el jefe de la diplomacia turca hable a su llegada a Ankara.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, había dejado claro que Turquía "no ve a Siria como un problema externo". "Siria es nuestro problema interno porque tenemos una frontera de 850 kilómetros con este país, tenemos lazos históricos y culturales, tenemos un parentesco", había agregado, subrayando que por todo ello Ankara no puede ser un mero espectador de lo que sucede en Siria.
El líder del principal partido opositor, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kiliçdaroglu, ha criticado la postura adoptada por Ankara respecto a la situación en Siria. "La política exterior no puede basarse en el romanticismo, somos vecinos de Siria (...) deberíamos tener una política más consistente", ha considerado, según recoge la prensa turca.
Si Siria fuera un asunto interno de Turquía, se ha preguntado, "¿qué hará entonces el Gobierno? ¿Realizará una operación militar?". No obstante, el líder opositor ha dicho que no se opone a la visita de Davutoglu a Damasco. "No tenemos ningún problema con ello, el problema es que Turquía ha estado mostrando un enfoque a favor de la intervención", ha señalado.
El presidente sirio, Bashar al Assad, ha dejado claro este martes al ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, con el que se ha reunido en Damasco, que su Gobierno no cesará en su lucha contra los grupos terroristas que operan en el país, a lo que ha responsabilizado hasta ahora de la muerte de civiles en las protestas que comenzaron en marzo.
Según informa la agencia oficial siria SANA, Al Assad ha dejado claro que "no será tolerante en su persecución de los grupos terroristas armados para proteger la estabilidad del país y la seguridad de los ciudadanos".
Asimismo, ha asegurado que "está determinado a completar los pasos actuales para una reforma exhaustiva" del país y le ha hecho saber que Siria está "abierta a cualquier ayuda que le ofrezcan países hermanos y amigos en este sentido".
Siempre según SANA, el presidente sirio ha aprovechado su encuentro con Davutoglu para informarle de los hechos ocurridos en algunas ciudades del país como consecuencia de los actos perpetrados por grupos terroristas armados contra la población civil y las fuerzas del orden.
Por su parte, el ministro de Exteriores turco ha indicado que no llevaba a Damasco el mensaje de nadie, incidiendo en que a Turquía simplemente le preocupa la seguridad y estabilidad del país vecino. "Al igual que Turquía considera que lo que ocurre en Siria es un asunto interno turco, Siria, también, tiene las mismas consideraciones respecto a cualquier cuestión a la que se enfrenta Turquía", ha señalado el ministro, según SANA.
Davutoglu ha subrayado que bajo la dirección de Al Assad, Siria se convertirá en un modelo en el mundo árabe una vez culminen las reformas anunciadas, al tiempo que ha destacado que la estabilidad en este país es clave para la región.
Según SANA, al encuentro han asistido el ministro de Exteriores sirio, Walid Moalem, la consejera política y de prensa del presidente, Bouthaina Shaaban, y el viceministro de Exteriores, Abdul-Fattah Ammoura, así como la delegación que acompañó a Davutoglu.
La agencia semioficial turca Anatolia ha informado de que Davutoglu ha mantenido un encuentro a solas con Al Assad durante dos horas y cuarto, al término del cual el ministro turco no ha querido hacer declaraciones. Según esta agencia, está previsto que el jefe de la diplomacia turca hable a su llegada a Ankara.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, había dejado claro que Turquía "no ve a Siria como un problema externo". "Siria es nuestro problema interno porque tenemos una frontera de 850 kilómetros con este país, tenemos lazos históricos y culturales, tenemos un parentesco", había agregado, subrayando que por todo ello Ankara no puede ser un mero espectador de lo que sucede en Siria.
El líder del principal partido opositor, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kiliçdaroglu, ha criticado la postura adoptada por Ankara respecto a la situación en Siria. "La política exterior no puede basarse en el romanticismo, somos vecinos de Siria (...) deberíamos tener una política más consistente", ha considerado, según recoge la prensa turca.
Si Siria fuera un asunto interno de Turquía, se ha preguntado, "¿qué hará entonces el Gobierno? ¿Realizará una operación militar?". No obstante, el líder opositor ha dicho que no se opone a la visita de Davutoglu a Damasco. "No tenemos ningún problema con ello, el problema es que Turquía ha estado mostrando un enfoque a favor de la intervención", ha señalado.