Unión Africana busca consenso sobre Gadafi
Malabo, Agencias
Los jefes de estado de Africa pasaron el viernes tratando de alcanzar un consenso sobre qué hacer con el líder libio Moamar Gadafi, cuya caída sería fuente de nerviosismo para otros gobernantes autoritarios del continente.
Al salir para un receso de la sesión confidencial luego de horas de discusiones, el presidente de Mali, Amadu Toumani Turé, dijo que los líderes habían conseguido progresos. "Pero todavía no hemos acabado", señaló.
Denis Sassou-Nguesso, el presidente de la República del Congo y uno de cinco miembros del comité especial de la Unión Africana para Libia, dijo que el grupo encontrará una solución. Los líderes estaban reunidos en la capital de Guinea Ecuatorial para la cumbre de la UA, cuyo tema central de atención a la juventud ha sido eclipsado por la crisis en Libia.
Hace apenas varios meses se pensaba que Gadafi era uno de los dictadores más consolidados en el continente, con su régimen de 40 años aún sólido.
Entre los puntos importantes para los mandatarios reunidos aquí está qué hacer con Gadafi. Algunos miembros desean que renuncie, mientras que otros insisten en que el líder libio debe ser parte de la solución.
La caída de Gadafi pudiera tener un efecto considerable en el continente, envalentonando a poblaciones a sublevarse contra otros regímenes autocráticos, incluyendo el de esta diminuta nación de la costa occidental africana, donde los críticos del régimen son torturados y donde el dominio del partido gobernante es tal que los ciudadanos temen ser vistos leyendo el único diario de la oposición.
Se piensa que entre los partidarios de Gadafi está el mandatario de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, reelegido recientemente como presidente rotativo de la UA.
El comité especial para Libia ya ha propuesto un plan, el cual pide un cese al fuego seguido de negociaciones entre el régimen y los rebeldes para derivar en una autoridad de transición.
En un principio el comité se había pronunciado para que Gadafi fuese parte de las negociaciones, algo que los rebeldes rechazaron. El grupo anunció el domingo que Gadafi había aceptado no formar parte del diálogo, y en un comunicado el comité dijo que elogiaba esa decisión.
Los jefes de estado de Africa pasaron el viernes tratando de alcanzar un consenso sobre qué hacer con el líder libio Moamar Gadafi, cuya caída sería fuente de nerviosismo para otros gobernantes autoritarios del continente.
Al salir para un receso de la sesión confidencial luego de horas de discusiones, el presidente de Mali, Amadu Toumani Turé, dijo que los líderes habían conseguido progresos. "Pero todavía no hemos acabado", señaló.
Denis Sassou-Nguesso, el presidente de la República del Congo y uno de cinco miembros del comité especial de la Unión Africana para Libia, dijo que el grupo encontrará una solución. Los líderes estaban reunidos en la capital de Guinea Ecuatorial para la cumbre de la UA, cuyo tema central de atención a la juventud ha sido eclipsado por la crisis en Libia.
Hace apenas varios meses se pensaba que Gadafi era uno de los dictadores más consolidados en el continente, con su régimen de 40 años aún sólido.
Entre los puntos importantes para los mandatarios reunidos aquí está qué hacer con Gadafi. Algunos miembros desean que renuncie, mientras que otros insisten en que el líder libio debe ser parte de la solución.
La caída de Gadafi pudiera tener un efecto considerable en el continente, envalentonando a poblaciones a sublevarse contra otros regímenes autocráticos, incluyendo el de esta diminuta nación de la costa occidental africana, donde los críticos del régimen son torturados y donde el dominio del partido gobernante es tal que los ciudadanos temen ser vistos leyendo el único diario de la oposición.
Se piensa que entre los partidarios de Gadafi está el mandatario de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, reelegido recientemente como presidente rotativo de la UA.
El comité especial para Libia ya ha propuesto un plan, el cual pide un cese al fuego seguido de negociaciones entre el régimen y los rebeldes para derivar en una autoridad de transición.
En un principio el comité se había pronunciado para que Gadafi fuese parte de las negociaciones, algo que los rebeldes rechazaron. El grupo anunció el domingo que Gadafi había aceptado no formar parte del diálogo, y en un comunicado el comité dijo que elogiaba esa decisión.