Proyecto para cambiar torneo de fútbol local complica a Cristina
Buenos Aires, Agencias
"¡Noooo! ¡Noooo! ¡Noooo! ¡Estamos en la B! ¡Estamos en la B! ¡Noooo!". Ese fue el grito que inmortalizó al comerciante porteño Tano Pasman en YouTube, cuando el club de sus amores, River Plate, descendió por primera vez en su historia a la segunda división. Pero no pasó ni un mes para que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) intentara remediar esa situación con un polémico proyecto.
El organismo liderado desde hace 32 años por Julio Grondona propuso juntar a la primera y a la segunda división del fútbol en un solo torneo a partir de la temporada 2012/2013, lo que en la práctica significaba un rápido ascenso del equipo "millonario" y la protección para otros clubes grandes con riesgo de descender. Pero la iniciativa generó una ola de críticas, lo que obligó a volver a fojas cero. Y, lo que es peor, complicó al gobierno de Cristina Fernández, quien, según señaló la AFA, estuvo detrás de esta iniciativa, con la cual buscaba réditos políticos en un año electoral. Ante ello, según los medios argentinos, la misma Casa Rosada presionó para postergar el plan.
En un intento por despegar al gobierno de la polémica iniciativa, la AFA dijo ayer que no recibió "ningún tipo de requerimiento" para unificar los torneos. "El descenso de River no tuvo nada que ver", explicó Grondona, quien dijo que "si la asamblea no aprueba los cambios, seguiremos como hasta ahora". El jefe de la AFA confirmó que, pese a la presión de las hinchas, el borrador será tratado en octubre en asamblea.
"Si el descenso de River había dejado cojo al fútbol, un torneo con 38 equipos será un inmenso Frankenstein. Esto no es reestructuración futbolística, sino estar en campaña política en tiempos electorales", criticó el diario porteño La Nación. En efecto, el vocero de Grondona, Ernesto Cherquis Bialo, admitió antes que el proyecto era un pedido de la Casa Rosada.
"Hay una sociedad del Estado que pone dinero. Hay unos clubes que necesitan dinero. Y hay un Estado preocupado que pone la guita (dinero), y quiere que estén los mejores", explicó Cherquis Bialo. La producción de "Fútbol para Todos", que transmite los 10 encuentros que se disputan cada fecha del torneo de Primera A, se hizo cargo de las emisiones desde agosto de 2009 y depende del Estado argentino, que anualmente paga US$ 150 millones a la AFA. "Este quilombo se salvaba si se hubiese dado un acto antideportivo, si River no hubiese descendido", reconoció el vocero de Grondona.
En las redes sociales y foros de internet, miles de personas expresaron su rechazo al nuevo torneo. Unos 20 mil aficionados se convocaron por medio del Twitter para manifestarse el próximo 2 de agosto "contra el Apocalipsis del fútbol" y "contra la tiranía de Grondona". Una encuesta realizada por la edición online del diario local Clarín, entre 46.000 de sus lectores, mostró que el 89% desaprueba la fusión. Otros sondeos realizados por medios transandinos dieron resultados similares.
A nivel político, el rechazo a la iniciativa fue similar. La candidata presidencial por la Coalición Cívica, Elisa Carrió, criticó duramente la reforma del fútbol culpando al gobierno. "El kirchnerismo destruye todo lo que toca, ahora fueron por la pasión de los argentinos: el fútbol", dijo Carrió a Clarín.
"No les importa desviar miles de millones de pesos de todos los argentinos para que los administre Grondona 'a piacere'", aseveró la diputada opositora, en referencia a los US$ 300 millones que saldrían de las arcas fiscales para financiar la transmisión gratuita de los partidos, en el marco del programa "Fútbol para Todos".
"¡Noooo! ¡Noooo! ¡Noooo! ¡Estamos en la B! ¡Estamos en la B! ¡Noooo!". Ese fue el grito que inmortalizó al comerciante porteño Tano Pasman en YouTube, cuando el club de sus amores, River Plate, descendió por primera vez en su historia a la segunda división. Pero no pasó ni un mes para que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) intentara remediar esa situación con un polémico proyecto.
El organismo liderado desde hace 32 años por Julio Grondona propuso juntar a la primera y a la segunda división del fútbol en un solo torneo a partir de la temporada 2012/2013, lo que en la práctica significaba un rápido ascenso del equipo "millonario" y la protección para otros clubes grandes con riesgo de descender. Pero la iniciativa generó una ola de críticas, lo que obligó a volver a fojas cero. Y, lo que es peor, complicó al gobierno de Cristina Fernández, quien, según señaló la AFA, estuvo detrás de esta iniciativa, con la cual buscaba réditos políticos en un año electoral. Ante ello, según los medios argentinos, la misma Casa Rosada presionó para postergar el plan.
En un intento por despegar al gobierno de la polémica iniciativa, la AFA dijo ayer que no recibió "ningún tipo de requerimiento" para unificar los torneos. "El descenso de River no tuvo nada que ver", explicó Grondona, quien dijo que "si la asamblea no aprueba los cambios, seguiremos como hasta ahora". El jefe de la AFA confirmó que, pese a la presión de las hinchas, el borrador será tratado en octubre en asamblea.
"Si el descenso de River había dejado cojo al fútbol, un torneo con 38 equipos será un inmenso Frankenstein. Esto no es reestructuración futbolística, sino estar en campaña política en tiempos electorales", criticó el diario porteño La Nación. En efecto, el vocero de Grondona, Ernesto Cherquis Bialo, admitió antes que el proyecto era un pedido de la Casa Rosada.
"Hay una sociedad del Estado que pone dinero. Hay unos clubes que necesitan dinero. Y hay un Estado preocupado que pone la guita (dinero), y quiere que estén los mejores", explicó Cherquis Bialo. La producción de "Fútbol para Todos", que transmite los 10 encuentros que se disputan cada fecha del torneo de Primera A, se hizo cargo de las emisiones desde agosto de 2009 y depende del Estado argentino, que anualmente paga US$ 150 millones a la AFA. "Este quilombo se salvaba si se hubiese dado un acto antideportivo, si River no hubiese descendido", reconoció el vocero de Grondona.
En las redes sociales y foros de internet, miles de personas expresaron su rechazo al nuevo torneo. Unos 20 mil aficionados se convocaron por medio del Twitter para manifestarse el próximo 2 de agosto "contra el Apocalipsis del fútbol" y "contra la tiranía de Grondona". Una encuesta realizada por la edición online del diario local Clarín, entre 46.000 de sus lectores, mostró que el 89% desaprueba la fusión. Otros sondeos realizados por medios transandinos dieron resultados similares.
A nivel político, el rechazo a la iniciativa fue similar. La candidata presidencial por la Coalición Cívica, Elisa Carrió, criticó duramente la reforma del fútbol culpando al gobierno. "El kirchnerismo destruye todo lo que toca, ahora fueron por la pasión de los argentinos: el fútbol", dijo Carrió a Clarín.
"No les importa desviar miles de millones de pesos de todos los argentinos para que los administre Grondona 'a piacere'", aseveró la diputada opositora, en referencia a los US$ 300 millones que saldrían de las arcas fiscales para financiar la transmisión gratuita de los partidos, en el marco del programa "Fútbol para Todos".