La AFA reestructuró el campeonato sobre la base de un proyecto para salvar a River
Buenos Aires, Clarin
Cuando los dirigentes llegaron al predio de la AFA, antes del diluvio que sacudió a la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, la mayoría tenía una postura crítica respecto a la reestructuración del fútbol argentino. Sin embargo, a la hora de levantar la voz, ninguno de los 26 que estaban habilitado a emitir su voto dijo “no”. Sólo cuatro de ellos, el vicepresidente de Racing, Pablo Podestá; el presidente de Newell’s, Guillermo Llorente; el titular de All Boys, Roberto Bugallo; y el vice de Vélez, Julio Baldomar, se abstuvieron de entregar su opinión. Los 22 restantes, le dieron vía libre a un proyecto que, desde el año próximo, fusionará la Primera División con la B Nacional, eliminará los descensos de la máxima categoría por una temporada y duplicará los ingresos de los clubes por derechos de TV. Julio Grondona tiene el guiño del Gobierno nacional para doblar el contrato de Fútbol Para Todos, que sería de 1.200.000.000 de pesos en lugar de los 600.000.000 acordados cuando la AFA rescindió el vínculo con el Grupo Clarín y Torneos y Competencias.
La propuesta fue ideada por Daniel Vila, presidente de Independiente Rivadavia de Mendoza y principal opositor a Grondona, quien se la acercó a Daniel Passarella, presidente de River. El vice del club de Núñez, Diego Turnes, se la entregó al mandamás de la calle Viamonte. Pero no hubo tiempo de implementar el proyecto para salvar a River. Don Julio guardó los bosquejos y los presentó ayer por la tarde en la cumbre de Ezeiza, que reunió a 60 dirigentes de los clubes de Primera, B Nacional y el resto de las categorías. Y aunque había algunos representantes que se encargaron de despedazar el nuevo mapa del fútbol en la tertulia previa, ninguno se opuso a la evaluación de este plan que tiene varios cabos sueltos y recién será confirmado el 18 de octubre, día en que se desarrollará la Asamblea anual extraordinaria para una nueva reelección de Grondona al frente de la AFA.
“¿Cómo les explico a mis socios que por una firma mía lo hago subir a Central, que no hizo ningún mérito para estar en Primera?”, se quejó Llorente. Vélez, el club con mejor promedio de las últimas temporadas, tampoco estaba de acuerdo. Racing consideró que debía analizarlo con su Comisión Directiva. Y All Boys, a través de Bugallo, dijo que no le parecía “serio” tener que aprobar un proyecto que le dieron a conocer en ese mismo momento, lo que despertó algún reproche de los clubes del Ascenso, cuyos dirigentes saltaban en una pata por este nuevo escenario que los pone más cerca de la A y del dinero fuerte de la televisión.
Según pudo averiguar Clarín, Grondona apuró a los clubes para que tomaran una decisión respecto al proyecto. Por sí o por no. Y los que no quisieran jugarse por una postura, podían abstenerse. No quería perder tiempo el Jefe, que aspira a sostenerse en el sillón. Todos, obviamente, preguntaron por los ingresos. Don Julio no prometió nada, pero aseguró una mejora. De hecho, su vocero, Ernesto Cherquis Bialo anunció que se disolvía el contrato con Trisa, que aún conserva los derechos de TV de la B Nacional y la Selección Argentina, para negociar con el Estado la telelevisación de los partidos, que actualmente se emiten por la TV Pública, y el establecimiento de AFA TV, cuya señal deberá ser aprobada por el Gobierno.
Los lineamientos generales tienen un parecido al Metro ‘76. El campeonato para la temporada 2012/2013 estará compuesto por 38 equipos, divididos en dos zonas. Pero no habrá “fechas libres” para nadie, sino que se jugarán “interzonales” y que serán únicamente clásicos. Serán en total 20 partidos para cada equipo. Los mejores cinco clasificados de cada zona, accederán a la “Zona Campeonato”, que tendrá el título en juego. A esa posibilidad también se clasificarán los mejores 9 de una tabla general. Los 19 equipos restantes jugarán en la “Zona Competencia” y tendrán como principal objetivo la permanencia. Quien quede en la cima de la Zona Campeonato tras disputar 18 fechas (esta vez sí quedaría libre) será el campeón y accederá a la Libertadores. Junto al campeón clasificarán a la Copa del 2° al 4° (y el campeón de la Copa Argentina).
Como toda novedad, aún es complicado de entender la modalidad que se plantea y, además, faltan las modificaciones que pueden aportar los clubes para la reunión del 18 de octubre. Ese día, no casualmente, la Asamblea también debe elegir al presidente de la AFA. Tal vez el mismo que ahora les ofrece a los clubes un contrato por 1.200 millones de pesos.
Cuando los dirigentes llegaron al predio de la AFA, antes del diluvio que sacudió a la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, la mayoría tenía una postura crítica respecto a la reestructuración del fútbol argentino. Sin embargo, a la hora de levantar la voz, ninguno de los 26 que estaban habilitado a emitir su voto dijo “no”. Sólo cuatro de ellos, el vicepresidente de Racing, Pablo Podestá; el presidente de Newell’s, Guillermo Llorente; el titular de All Boys, Roberto Bugallo; y el vice de Vélez, Julio Baldomar, se abstuvieron de entregar su opinión. Los 22 restantes, le dieron vía libre a un proyecto que, desde el año próximo, fusionará la Primera División con la B Nacional, eliminará los descensos de la máxima categoría por una temporada y duplicará los ingresos de los clubes por derechos de TV. Julio Grondona tiene el guiño del Gobierno nacional para doblar el contrato de Fútbol Para Todos, que sería de 1.200.000.000 de pesos en lugar de los 600.000.000 acordados cuando la AFA rescindió el vínculo con el Grupo Clarín y Torneos y Competencias.
La propuesta fue ideada por Daniel Vila, presidente de Independiente Rivadavia de Mendoza y principal opositor a Grondona, quien se la acercó a Daniel Passarella, presidente de River. El vice del club de Núñez, Diego Turnes, se la entregó al mandamás de la calle Viamonte. Pero no hubo tiempo de implementar el proyecto para salvar a River. Don Julio guardó los bosquejos y los presentó ayer por la tarde en la cumbre de Ezeiza, que reunió a 60 dirigentes de los clubes de Primera, B Nacional y el resto de las categorías. Y aunque había algunos representantes que se encargaron de despedazar el nuevo mapa del fútbol en la tertulia previa, ninguno se opuso a la evaluación de este plan que tiene varios cabos sueltos y recién será confirmado el 18 de octubre, día en que se desarrollará la Asamblea anual extraordinaria para una nueva reelección de Grondona al frente de la AFA.
“¿Cómo les explico a mis socios que por una firma mía lo hago subir a Central, que no hizo ningún mérito para estar en Primera?”, se quejó Llorente. Vélez, el club con mejor promedio de las últimas temporadas, tampoco estaba de acuerdo. Racing consideró que debía analizarlo con su Comisión Directiva. Y All Boys, a través de Bugallo, dijo que no le parecía “serio” tener que aprobar un proyecto que le dieron a conocer en ese mismo momento, lo que despertó algún reproche de los clubes del Ascenso, cuyos dirigentes saltaban en una pata por este nuevo escenario que los pone más cerca de la A y del dinero fuerte de la televisión.
Según pudo averiguar Clarín, Grondona apuró a los clubes para que tomaran una decisión respecto al proyecto. Por sí o por no. Y los que no quisieran jugarse por una postura, podían abstenerse. No quería perder tiempo el Jefe, que aspira a sostenerse en el sillón. Todos, obviamente, preguntaron por los ingresos. Don Julio no prometió nada, pero aseguró una mejora. De hecho, su vocero, Ernesto Cherquis Bialo anunció que se disolvía el contrato con Trisa, que aún conserva los derechos de TV de la B Nacional y la Selección Argentina, para negociar con el Estado la telelevisación de los partidos, que actualmente se emiten por la TV Pública, y el establecimiento de AFA TV, cuya señal deberá ser aprobada por el Gobierno.
Los lineamientos generales tienen un parecido al Metro ‘76. El campeonato para la temporada 2012/2013 estará compuesto por 38 equipos, divididos en dos zonas. Pero no habrá “fechas libres” para nadie, sino que se jugarán “interzonales” y que serán únicamente clásicos. Serán en total 20 partidos para cada equipo. Los mejores cinco clasificados de cada zona, accederán a la “Zona Campeonato”, que tendrá el título en juego. A esa posibilidad también se clasificarán los mejores 9 de una tabla general. Los 19 equipos restantes jugarán en la “Zona Competencia” y tendrán como principal objetivo la permanencia. Quien quede en la cima de la Zona Campeonato tras disputar 18 fechas (esta vez sí quedaría libre) será el campeón y accederá a la Libertadores. Junto al campeón clasificarán a la Copa del 2° al 4° (y el campeón de la Copa Argentina).
Como toda novedad, aún es complicado de entender la modalidad que se plantea y, además, faltan las modificaciones que pueden aportar los clubes para la reunión del 18 de octubre. Ese día, no casualmente, la Asamblea también debe elegir al presidente de la AFA. Tal vez el mismo que ahora les ofrece a los clubes un contrato por 1.200 millones de pesos.