Francia sufre su mayor revés en Afganistán en los últimos tres años

Kabul, Agencias
Francia sufrió este miércoles su mayor revés desde 2008 en Afganistán, tras la muerte de cinco militares en un atentado suicida al día siguiente de la visita relámpago del presidente francés, Nicolas Sarkozy, que aprovechó para confirmar la retirada de un millar de soldados a finales de 2012.

"Un terrorista activó una bomba en cercanías de los soldados franceses hiriendo (además) gravemente a cuatro soldados y a tres civiles afganos", indicó un comunicado del Elíseo, sede de la presidencia francesa. El atentado, reivindicado inmediatamente en Kabul por los talibanes, tuvo lugar en Joybar, en la provincia de la Kapisa, noroeste de la capital afgana.

"Pienso en nuestros hombres muertos en cumplimiento de su misión", afirmó el primer ministro francés, Francois Fillon. "Su causa es justa pues el Afganistán de 2012 ya no es el santuario del terrorismo internacional y ya no lo gobierna el fanatismo", añadió el jefe del Gobierno francés en la Asamblea Nacional (cámara Baja) antes de que los diputados observaran un minuto de silencio.

Con estas cinco muertes ascienden a 69 los soldados franceses que perdieron la vida en Afganistán desde el despliegue de las tropas de Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.

Este año está siendo el peor para las tropas franceses desplegadas en ese país asiático pues ya se elevan a 17 los militares muertos. Unos 4.000 militares franceses están desplegados en Afganistán como parte de una fuerza internacional de 130.000 efectivos, dos tercios de los cuales son estadounidenses.

"El jefe de Estado reafirma la determinación de Francia a seguir trabajando en el seno" de la ISAF "para restablecer la paz y la estabilidad" en Afganistán y "contribuir a su desarrollo", indicó el comunicado del Elíseo. El mayor revés de las tropas francesas en Afganistán tuvo lugar en agosto de 2008 en Uzbin durante una emboscada que causó la muerte de diez militares.

El atentado del miércoles supone una llamada de atención en el sentido de que el inicio de una retirada no significa el final de un conflicto y que los próximos meses pueden ser difíciles para el contingente francés.

Al menos 306 soldados de la OTAN, de los cuales 215 de estadounidenses, murieron en Afganistán desde principios de 2011 y 2.587 desde 2001, según el sitio internet independiente www.icasualties.org.

Durante la visita de Sarkozy a Afganistán el comandante de las tropas francesas, el general Emmanuel Maurin, explicó al jefe de Estado que la insurgencia es "móvil, agresiva e inteligente" y busca "la oportunidad para golpear a las fuerzas francesas".

En campaña para su reelección en 2012, el presidente francés confirmó durante su visita a la base de Tora, dos días antes de la fiesta nacional francesa, que "en 2014 todos los soldados franceses habrán partido" de Afganistán.

Pero no es el único en campaña. Uno de sus más posibles rivales, el socialista Francois Hollande, se comprometió a que "no haya ni un soldado francés más en Afganistán" a partir de mayo de 2013. En el mismo sentido se pronunció la líder de los socialistas franceses y precandidata a la presidencia, Martine Aubry, que pidió "una rápida retirada" de los soldados galos, sin esperar a finales de 2014.

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