El autor de atentados de Oslo recibió entrenamiento paramilitar en Bielorrusia

OSLO, Agencias
La Policía interroga de nuevo hoy al autor de los ataques, Anders Behring Breivik, quien dejó el pasado viernes 76 muertos en Noruega.
Este nuevo interrogatorio, a los cuatro días del primero, se realiza con el objetivo de aclarar algunos detalles como por qué llevaba un walkie-talkie al momento de su ataque y qué hay de cierto en su afirmación de que contaba con cómplices, indicó ayer Paal-Fredrik Hjort Kraby, un responsable de la investigación.

Mientras los expertos en terrorismo de la Unión Europea (UE) se reunieron con carácter de urgencia en Bruselas con sus homólogos noruegos para analizar los medios de los que disponen para prevenir ataques similares.

Atentados como los cometidos en Noruega, estimaron los expertos, son "difíciles, incluso imposibles de prevenir", ya que han sido cometidos por un extremista solitario, y van a obligar a la UE a vigilar todas las formas de radicalización.

"Hay que comprender lo que empuja a una persona que tiene ideas extremistas a pasar a la violencia. Necesitamos comprender el proceso, cualquiera que sea su ideología", declaró Tim Jones, consejero del coordinador de la lucha contra el terrorismo de la UE, Gilles de Kerchove

Behring Breivik confesó haber sido el autor de la masacre y dice que actuó solo. Sin embargo, la Policía noruega busca aún eventuales cómplices en el país y posibles ramificaciones en el extranjero.

"Dijimos siempre que no excluimos que otras personas estén implicadas e investigamos este punto", declaró un portavoz de la Policía de Oslo, Henning Holtaas.

"La teoría sobre eventuales complicidades se debilita con el tiempo", agregó, subrayando que no se encontró ningún indicio en apoyo a esta hipótesis en el lugar del drama.

El viernes pasado, Behrin Breivik, un extremista de derecha de 32 años, cometió un atentado con coche bomba contra la sede del Gobierno en Oslo, que dejó ocho muertos. Poco después, en la isla Utoya, a unos 40 km al oeste de la capital, en donde estaban reunidos unos 600 jóvenes de la juventud del Partido Laborista, en el poder, disparó sin piedad contra la multitud matando a otras 68 personas.

Según el procurador del Rey, la más alta instancia de la Fiscalía, el proceso contra Behrin Breivik no se llevará a cabo antes de 2012 a causa del carácter exigente de la investigación.

Para perpetrar su ataque en Utoya, Behring Breivik se disfrazó de policía. Según los testigos, llevaba un walkie-talkie, que podría ser parte del disfraz, pero también podría haber sido utilizado para comunicarse con eventuales cómplice.

Pero los investigadores se rehúsan a confirmar la existencia de ese walkie-talkie, aunque ya se encuentran en contacto con sus homólogos de Europa y los EEUU para determinar si hubo complicidad extranjera.

De acuerdo con su abogado, Geir Lippestad, el autor confeso de los ataques, que dijo que estaba "en una cruzada para salvar a Noruega y Europa occidental de una invasión musulmana", evocó una organización que incluía a otras dos células en Noruega y varias células en el extranjero. (AFP)

Alertas en Polonia

La policía polaca detuvo ayer a un joven de 20 años que almacenaba en su garaje fertilizantes químicos y detonadores con los que podía fabricar explosivos.

El joven polaco, residente en Muszyna, al sur del país, llamó la atención de las autoridades después de publicar varios videos en la red, en los que presumía de su pericia para elaborar artefactos explosivos con productos químicos convencionales, en un caso que recuerda al protagonizado por Anders Behring Breivik.

En el video, se muestra una detonación que el polaco realizó al parecer en un bosque. De ser cierto, podría ser condenado hasta unos 8 años de prisión.

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