Amy Winehouse, festival de drogas antes de morir

Londres, Agencias
Un cocktail de estupefacientes formado por cocaína, éxtasis y ketamina podrían haberle costado la vida a la cantante Amy Winehouse. Aunque se desconoce la causa exacta de su trágica muerte, el diario británico Sunday Mirror informa que la cantante fue vista comprando drogas en Camden horas antes de que la policía encontrase su cuerpo sin vida.
Entre las sustancias que compró había cocaína, heroína, éxtasis y ketamina, según revela la fuente. Se cree que la cantante mezcló las drogas con alcohol, sustancia a la que era adicta. Una combinación explosiva que se cree la condujo horas más tarde a la muerte.

"Amy parecía haberse pillado una buena el viernes", revela una fuente al diario británico The People. "Estuvo fuera por Camden la noche del viernes, pero quiso llevarse la fiesta a su apartamento. Ninguno de nosotros sabe quién estuvo con ella esa madrugada". Un testigo que trabajó en uno de los pubs de Camden confirmó al periódico esta información asegurando que vieron a Amy comprando cocaína de un camello bastante conocido en la zona.

La mezcla de alcohol y drogas pudo haber acabado con la vida de la cantante que además, según revelan sus familiares y amigos al periódico Sunday Mirror, sufría de un enfisema pulmonar, una tumefacción producida en el tejido pulmonar que causa dificultades a la hora de respirar. Hoy se realizará la autopsia que revelará la causa por la que Amy murió.

Sus familiares, amigos y fans lloran la muerte de Amy, aquella chica británica que revolucionó el mundo del soul con su genuina voz. Tras correrse la voz de su trágica muerte, sus seguidores y amigos han rendido tributo a la cantante recreando un pequeño santuario a la entrada de su casa. Flores, fotos, cigarrillos, velas, cartas... todo hace recordar a la cantante. "Demasiado frágil, demasiado bella, demasiado talentosa para este mundo".

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