Masiva manifestación en Santiago por mejor educación pública
SANTIAGO, Agencias
Una multitudinaria marcha que convocó a estudiantes, profesores, padres, obreros y empleados públicos arrancó este jueves en Santiago, en demanda de una educación pública gratuita y de calidad en Chile, comprobó la AFP.
La manifestación se desarrolla dos semanas después de una primera gran protesta que congregó en las calles de Santiago a más de 70.000 personas, que exigieron un mayor aporte fiscal a la educación pública, que hoy alcanza al 4% del PIB chileno contra el 7% de países más desarrollados recomendado por la Unesco.
Estudiantes de educación superior, escolares, padres, obreros, profesores y empleados fiscales comenzaron a reunirse desde temprano en las cercanías de la Plaza Italia, para iniciar la marcha por la céntrica Alameda hasta el palacio presidencial de La Moneda y el Ministerio de Educación.
En el inicio, los manifestantes copaban varias cuadras de la Alameda y las primeras estimaciones de la policía cifraban en cerca de 50.000 los asistentes, que marchaban portando festivas banderas y pancartas.
La manifestación fue convocada por la Confederación de Estudiantes Universitarios, que lidera las protestas que se extienden ya por más de tres semanas en Santiago y que encuentran al presidente derechista Sebastián Piñera con la menor aprobación ciudadana desde que asumió el poder (36%).
La educación chilena tiene una alta tasa de segregación a consecuencia de las sucesivas políticas neoliberales aplicadas por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que traspasó la administración de las escuelas públicas a los municipios y fomentó la creación de universidades y colegios privados.
Una multitudinaria marcha que convocó a estudiantes, profesores, padres, obreros y empleados públicos arrancó este jueves en Santiago, en demanda de una educación pública gratuita y de calidad en Chile, comprobó la AFP.
La manifestación se desarrolla dos semanas después de una primera gran protesta que congregó en las calles de Santiago a más de 70.000 personas, que exigieron un mayor aporte fiscal a la educación pública, que hoy alcanza al 4% del PIB chileno contra el 7% de países más desarrollados recomendado por la Unesco.
Estudiantes de educación superior, escolares, padres, obreros, profesores y empleados fiscales comenzaron a reunirse desde temprano en las cercanías de la Plaza Italia, para iniciar la marcha por la céntrica Alameda hasta el palacio presidencial de La Moneda y el Ministerio de Educación.
En el inicio, los manifestantes copaban varias cuadras de la Alameda y las primeras estimaciones de la policía cifraban en cerca de 50.000 los asistentes, que marchaban portando festivas banderas y pancartas.
La manifestación fue convocada por la Confederación de Estudiantes Universitarios, que lidera las protestas que se extienden ya por más de tres semanas en Santiago y que encuentran al presidente derechista Sebastián Piñera con la menor aprobación ciudadana desde que asumió el poder (36%).
La educación chilena tiene una alta tasa de segregación a consecuencia de las sucesivas políticas neoliberales aplicadas por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que traspasó la administración de las escuelas públicas a los municipios y fomentó la creación de universidades y colegios privados.