Hilario no se achica, fichará por Boca
Buenos Aires, Olé
El arco de Boca estará ocupado el próximo torneo por uno que conoce bien el peso de la camiseta de equipo grande. Racing, Independiente, River y San Lorenzo ya disfrutaron de Hilario Navarro. Hoy desembarcará en el Xeneize...
Se lo pelearon Racing y River en su momento. No le tembló el pulso a la hora de cruzarse de vereda en Avellaneda, y calzarse el buzo de Independiente. San Lorenzo lo tuvo después, y entre tantas idas y vueltas disfrutó halagos pero también sufrió partidos enteros en el banco de suplentes. Hilario Navarro será, a partir de hoy, el flamante refuerzo para el arco Boca.
El correntino ocupará un lugar esencial en la columna vertebral de Falcioni. Un puesto siempre observado y cuestionado, en el que últimamente pocos consiguen perdurar. Y el tipo sabe bien de qué se trata eso de pararse bajo los tres palos del arco de un grande.
Tras atravesar la etapa de formación en la Liga de su Corrientes natal, despegó las alas y voló con destino paraguayo. Allí lo esperaban Guaraní y Cerro Porteño, los dos primeros clubes testigos de su desarrollo como profesional. De la mano de Gustavo Costas, quien lo dirigía en Cerro, volvió a Argentina para ponerse la de Racing, no sin antes pasar fugazmente por Núñez: se entrenó sólo una semana en River y sin contrato firmado partió para la Academia.
Allí alcanzó la madurez como arquero. Con Campagnuolo lesionado, fue titular en el Apertura 07 y el Clausura 08, y su gran seguridad tentaron al vecino Independiente. Entre otras cosas, lo tildaron de 'traidor' y 'mercenario' por tomar la decisión a mitad de año, pero al tipo no le importó.
De un día para el otro pasó a ser pieza importante en el plantel del Rojo, más allá de que el gran presente de Assman en el 2009 le impidió jugar. Gabbarini empezaba a asomar también, y cansado de ser suplente emigró a San Lorenzo (sin arquero tras la lesión de Orión) a préstamo por un año. Luego volvió y la peleó, a pesar de una lesión en el pubis que lo afectó ese año, tras un choque con Galeano. Con Mohamed a cargo del equipo después se afianzó en el fondo, y no lo sacaron más.
Boca será el quinto equipo importante del fútbol argentino en el que Navarro defenderá el arco. A los 30 años, llega con cierta experiencia sobre los hombros, y un gran conocimiento en el tema. JC lo espera con los brazos abiertos...
El arco de Boca estará ocupado el próximo torneo por uno que conoce bien el peso de la camiseta de equipo grande. Racing, Independiente, River y San Lorenzo ya disfrutaron de Hilario Navarro. Hoy desembarcará en el Xeneize...
Se lo pelearon Racing y River en su momento. No le tembló el pulso a la hora de cruzarse de vereda en Avellaneda, y calzarse el buzo de Independiente. San Lorenzo lo tuvo después, y entre tantas idas y vueltas disfrutó halagos pero también sufrió partidos enteros en el banco de suplentes. Hilario Navarro será, a partir de hoy, el flamante refuerzo para el arco Boca.
El correntino ocupará un lugar esencial en la columna vertebral de Falcioni. Un puesto siempre observado y cuestionado, en el que últimamente pocos consiguen perdurar. Y el tipo sabe bien de qué se trata eso de pararse bajo los tres palos del arco de un grande.
Tras atravesar la etapa de formación en la Liga de su Corrientes natal, despegó las alas y voló con destino paraguayo. Allí lo esperaban Guaraní y Cerro Porteño, los dos primeros clubes testigos de su desarrollo como profesional. De la mano de Gustavo Costas, quien lo dirigía en Cerro, volvió a Argentina para ponerse la de Racing, no sin antes pasar fugazmente por Núñez: se entrenó sólo una semana en River y sin contrato firmado partió para la Academia.
Allí alcanzó la madurez como arquero. Con Campagnuolo lesionado, fue titular en el Apertura 07 y el Clausura 08, y su gran seguridad tentaron al vecino Independiente. Entre otras cosas, lo tildaron de 'traidor' y 'mercenario' por tomar la decisión a mitad de año, pero al tipo no le importó.
De un día para el otro pasó a ser pieza importante en el plantel del Rojo, más allá de que el gran presente de Assman en el 2009 le impidió jugar. Gabbarini empezaba a asomar también, y cansado de ser suplente emigró a San Lorenzo (sin arquero tras la lesión de Orión) a préstamo por un año. Luego volvió y la peleó, a pesar de una lesión en el pubis que lo afectó ese año, tras un choque con Galeano. Con Mohamed a cargo del equipo después se afianzó en el fondo, y no lo sacaron más.
Boca será el quinto equipo importante del fútbol argentino en el que Navarro defenderá el arco. A los 30 años, llega con cierta experiencia sobre los hombros, y un gran conocimiento en el tema. JC lo espera con los brazos abiertos...