Descenso de River Plate eclipsa a la Copa América
Buenos Aires, Agencias
A un día del comienzo de la Copa América, en Argentina se habla más del desastre que vive el descendido River Plate que de la preparación de la selección albiceleste, informó DPA.
El primer descenso a la segunda división del club más campeón de la historia del fútbol argentino es el tema recurrente de conversación en Buenos Aires y el resto del país, muy por delante del debut mañana ante Bolivia de Lionel Messi, Carlos Tevez, Javier Mascherano y las otras figuras de la albiceleste.
Los diarios, los noticieros de televisión y las radios han tomado durante las últimas jornadas el pulso de las calles y los bares, y le dedican mayor cantidad de tiempo y espacio a la crisis de River que a la Copa.
Y es que el club que forjó a figuras internacionales como José Manuel Moreno, Alfredo Di Stéfano y Enzo Francescoli cayó a la Primera B Nacional el domingo y desató una conmoción que excede lo deportivo.
Miles de argentinos lloraron en el estadio Monumental tras el empate 1-1 con Belgrano que selló la suerte deportiva de River. Psicólogos y sociólogos trataron de explicar por qué algunos simpatizantes reaccionaron tras el descenso como si se hubiese tratado de la muerte de algún familiar.
Además, tras el descenso se sucedieron graves incidentes dentro y fuera del estadio que podrían determinar la suspensión del Monumental durante 20 fechas. El estadio deberá ser reparado para albergar el 24 de julio la final del torneo.
Y cada jornada se suman capítulos nuevos a la historia del desastre riverplatense. El miércoles, los medios de comunicación tuvieron acceso a un video de seguridad en el que se ve a diez "barrabravas" (hinchas violentos) de River caminando por los pasillos internos del estadio en supuesta dirección hacia el vestuario del árbitro del partido, Sergio Pezzotta.
El mismo referí denunció tras el partido que en el entretiempo había sido amenazado por integrantes de la "barra brava", que entraron a su lugar de descanso y lo intimidaron para que señalara un penal a favor de River.
La posibilidad de que se desatasen incidentes en Buenos Aires figuraba dentro de las previsiones de los encargados de seguridad de la selección de Brasil. Neymar, Robinho, Ganso, Dani Alves y el resto de los futbolistas brasileños tenían día libre el domingo, pero los dirigentes les recomendaron que no visitaran la capital de Argentina, a 60 kilómetros de su lugar de concentración, Los Cardales.
Incluso los periodistas brasileños preguntaron a los jugadores de la selección pentacampeona del mundo su impresión acerca del descenso. "Estamos muy sorprendidos porque River es un club de gran calidad", dijo el defensor Thiago Silva. "Es un grande de Sudamérica", agregó André Santos.
Seguramente, a partir de mañana con el partido inaugural entre la selección local y Bolivia, la Copa América empiece a captar la atención de los argentinos, que llenarán la mayoría de los estadios.
Muchos esperan que la albiceleste mitigue con sus éxitos la depresión por la caída del equipo "millonario".
A un día del comienzo de la Copa América, en Argentina se habla más del desastre que vive el descendido River Plate que de la preparación de la selección albiceleste, informó DPA.
El primer descenso a la segunda división del club más campeón de la historia del fútbol argentino es el tema recurrente de conversación en Buenos Aires y el resto del país, muy por delante del debut mañana ante Bolivia de Lionel Messi, Carlos Tevez, Javier Mascherano y las otras figuras de la albiceleste.
Los diarios, los noticieros de televisión y las radios han tomado durante las últimas jornadas el pulso de las calles y los bares, y le dedican mayor cantidad de tiempo y espacio a la crisis de River que a la Copa.
Y es que el club que forjó a figuras internacionales como José Manuel Moreno, Alfredo Di Stéfano y Enzo Francescoli cayó a la Primera B Nacional el domingo y desató una conmoción que excede lo deportivo.
Miles de argentinos lloraron en el estadio Monumental tras el empate 1-1 con Belgrano que selló la suerte deportiva de River. Psicólogos y sociólogos trataron de explicar por qué algunos simpatizantes reaccionaron tras el descenso como si se hubiese tratado de la muerte de algún familiar.
Además, tras el descenso se sucedieron graves incidentes dentro y fuera del estadio que podrían determinar la suspensión del Monumental durante 20 fechas. El estadio deberá ser reparado para albergar el 24 de julio la final del torneo.
Y cada jornada se suman capítulos nuevos a la historia del desastre riverplatense. El miércoles, los medios de comunicación tuvieron acceso a un video de seguridad en el que se ve a diez "barrabravas" (hinchas violentos) de River caminando por los pasillos internos del estadio en supuesta dirección hacia el vestuario del árbitro del partido, Sergio Pezzotta.
El mismo referí denunció tras el partido que en el entretiempo había sido amenazado por integrantes de la "barra brava", que entraron a su lugar de descanso y lo intimidaron para que señalara un penal a favor de River.
La posibilidad de que se desatasen incidentes en Buenos Aires figuraba dentro de las previsiones de los encargados de seguridad de la selección de Brasil. Neymar, Robinho, Ganso, Dani Alves y el resto de los futbolistas brasileños tenían día libre el domingo, pero los dirigentes les recomendaron que no visitaran la capital de Argentina, a 60 kilómetros de su lugar de concentración, Los Cardales.
Incluso los periodistas brasileños preguntaron a los jugadores de la selección pentacampeona del mundo su impresión acerca del descenso. "Estamos muy sorprendidos porque River es un club de gran calidad", dijo el defensor Thiago Silva. "Es un grande de Sudamérica", agregó André Santos.
Seguramente, a partir de mañana con el partido inaugural entre la selección local y Bolivia, la Copa América empiece a captar la atención de los argentinos, que llenarán la mayoría de los estadios.
Muchos esperan que la albiceleste mitigue con sus éxitos la depresión por la caída del equipo "millonario".