Crisis financiera griega es tema central en cumbre de la UE
Bruselas, Agencias
Líderes de la Unión Europea se entremetieron el jueves en la política nacional griega al hacer un llamado al dirigente opositor Antonis Samaras para que respalde las medidas de reforma demandadas a cambio de más préstamos de rescate para Atenas.
Samaras se ha mostrado intransigente en su oposición a las medidas de austeridad antes de la votación en el parlamento griego programada para el 28 de junio, pese a que otros países europeos han dicho que sus préstamos —lo único que ha impedido que Grecia caiga en la moratoria de pagos de su deuda— dependen de los recortes.
"En el caso de Grecia, llamamos a la oposición a cumplir su responsabilidad histórica", dijo la canciller alemana Angela Merkel.
El primer ministro holandés Mark Rutte prometió respaldar a los políticos griegos que muestren unidad. "Una nación sin divisiones, dedicada y plenamente comprometida, no va a ser abandonada", dijo.
Muchos dijeron que la oposición griega no tenía otra opción.
El primer ministro sueco Fredrik Reinfeldt dijo que "es muy importante que ningún político griego le diga al pueblo griego que existe un atajo".
El pedido a un líder opositor nacional, algo raro en la política de la UE, subraya la emergencia que viven Grecia y los 17 países que emplean en euro.
Los gobiernos de las naciones que emplean el euro aplazaron previamente en la semana su decisión sobre nueva ayuda a Grecia hasta el 3 de julio, cuando sabrán si el parlamento en Atenas respalda los drásticos recortes presupuestarios, ventas de bienes gubernamentales y reformas económicas.
Si no recibe el próximo abono de 12.000 millones de euros (17.000 millones de dólares) de rescate, Grecia entrará en moratoria a mediados de julio.
La oposición griega ha amenazado con bloquear las medidas. Samaras ha apagado las esperanzas de lograr un consenso multipartidista sobre los recortes presupuestarios, aumentos de impuestos y reformas económicas diseñados para ahorrar 28.000 millones de euros del presupuesto griego en los próximos años.
Las actuales medidas "del gobierno socialista prescriben más impuestos en una economía en recesión sin precedentes", dijo. "Necesitamos medidas corregidas para asegurar que la economía crezca y poder pagar nuestra deuda".
La situación presagia una atmósfera en la cumbre de la UE iniciada el martes en Bruselas.
"Estamos ahora, de hecho, viviendo en días y semanas críticos" en la crisis financiera griega, dijo el comisionado de asuntos monetarios de la UE, Olli Rehn.
Alemania consideró que la UE está en un punto de inflexión.
"Por primera vez tengo la sensación de que pudiéramos correr el riesgo de no avanzar más, sino retroceder", dijo el ministro de Estado alemán Werner Hoyer.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, exhortará a los líderes del bloque a ayudar a Grecia a tener acceso a miles de millones de euros en fondos de desarrollo para crear empleos y hacer sus empresas más competitivas.
Líderes de la Unión Europea se entremetieron el jueves en la política nacional griega al hacer un llamado al dirigente opositor Antonis Samaras para que respalde las medidas de reforma demandadas a cambio de más préstamos de rescate para Atenas.
Samaras se ha mostrado intransigente en su oposición a las medidas de austeridad antes de la votación en el parlamento griego programada para el 28 de junio, pese a que otros países europeos han dicho que sus préstamos —lo único que ha impedido que Grecia caiga en la moratoria de pagos de su deuda— dependen de los recortes.
"En el caso de Grecia, llamamos a la oposición a cumplir su responsabilidad histórica", dijo la canciller alemana Angela Merkel.
El primer ministro holandés Mark Rutte prometió respaldar a los políticos griegos que muestren unidad. "Una nación sin divisiones, dedicada y plenamente comprometida, no va a ser abandonada", dijo.
Muchos dijeron que la oposición griega no tenía otra opción.
El primer ministro sueco Fredrik Reinfeldt dijo que "es muy importante que ningún político griego le diga al pueblo griego que existe un atajo".
El pedido a un líder opositor nacional, algo raro en la política de la UE, subraya la emergencia que viven Grecia y los 17 países que emplean en euro.
Los gobiernos de las naciones que emplean el euro aplazaron previamente en la semana su decisión sobre nueva ayuda a Grecia hasta el 3 de julio, cuando sabrán si el parlamento en Atenas respalda los drásticos recortes presupuestarios, ventas de bienes gubernamentales y reformas económicas.
Si no recibe el próximo abono de 12.000 millones de euros (17.000 millones de dólares) de rescate, Grecia entrará en moratoria a mediados de julio.
La oposición griega ha amenazado con bloquear las medidas. Samaras ha apagado las esperanzas de lograr un consenso multipartidista sobre los recortes presupuestarios, aumentos de impuestos y reformas económicas diseñados para ahorrar 28.000 millones de euros del presupuesto griego en los próximos años.
Las actuales medidas "del gobierno socialista prescriben más impuestos en una economía en recesión sin precedentes", dijo. "Necesitamos medidas corregidas para asegurar que la economía crezca y poder pagar nuestra deuda".
La situación presagia una atmósfera en la cumbre de la UE iniciada el martes en Bruselas.
"Estamos ahora, de hecho, viviendo en días y semanas críticos" en la crisis financiera griega, dijo el comisionado de asuntos monetarios de la UE, Olli Rehn.
Alemania consideró que la UE está en un punto de inflexión.
"Por primera vez tengo la sensación de que pudiéramos correr el riesgo de no avanzar más, sino retroceder", dijo el ministro de Estado alemán Werner Hoyer.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, exhortará a los líderes del bloque a ayudar a Grecia a tener acceso a miles de millones de euros en fondos de desarrollo para crear empleos y hacer sus empresas más competitivas.