Un manifestante muerto y despliegue masivo de la fuerza pública en Siria
Damasco, Agencias
Un manifestante murió este viernes por disparos de la fuerza pública en Homs, en el centro de Siria, mientras soldados y miembros de los servicios de seguridad estaban masivamente desplegados en los focos del movimiento de protesta contra el régimen de Bashar al Asad.
"Ha habido un muerto en Homs cuando las fuerzas de seguridad abrieron fuego para dispersar una de las manifestaciones", afirmó un militante que requirió el anonimato. La víctima, un hombre de 40 años, recibió un balazo "en la cabeza".
Según el escritor y opositor Luai Husein, el presidente Asad habría sin embargo dado a la fuerza pública instrucciones de no disparar contra los manifestantes.
Una consejera del presidente, "Bouthaina Chaabán, me dijo en una conversación telefónica que se dieron órdenes presidenciales estrictas de no abrir fuego contra los manifestantes", indicó Husein en su página de Facebook.
La represión del movimiento de protesta contra el Gobierno, iniciado a mediados de marzo, causó ya unos 700 muertos y miles de detenciones, según las ONG. El Alto Comisionado de la ONU para los derechos humanos se declaró "extremadamente preocupado" por estas informaciones.
Pese a la represión, la página 'The Syrian Revolution 2011', creada por jóvenes opositores, lanzó un llamamiento a manifestarse este viernes. Otras manifestaciones, que congregaron a millares de personas, se produjeron al mismo tiempo en Deraa (sur), Qamishli, Derbassyie y Amuda (noreste), así como en Saqba, cerca de Damasco.
"Las fuerzas de seguridad disparan al aire con armas automáticas en Deraa para dispersar a miles de manifestantes", indicó a la AFP un militante de esta localidad, donde se inició a mediados de marzo el movimiento de protesta.
El miércoles, la fuerza pública mató a 19 civiles en las ciudades de Deraa y Homs, según una ONG.
Este viernes por la mañana, otro militante de la ciudad costera de Banias (noroeste), sitiada desde el sábado por el Ejército, indicó que "más de 2.000 soldados están desplegados en la plaza en la que se manifiestan los habitantes y en las calles adyacentes".
El Observatorio sirio de los derechos humanos dio cuenta de la entrada del Ejército en varios otros pueblos cercanos a Banias.
Según el ministro sirio de Información, Adnan Mahmud, el Ejército ya comenzó a retirarse de la ciudad de Banias.
Paralelamente, según uno de los militantes, las detenciones continúan en todo el país, concretamente en Deir Ezzor (este), Latakia (oeste), Qamishli y Deraa.
Numerosos países occidentales y ONG de defensa de los derechos humanos condenaron los disparos contra los manifestantes, en tanto el régimen culpa de la violencia a "grupos terroristas".
Chaaban, citada el miércoles por el diario Al Watan, cercano al poder, afirmó que había empezado un "diálogo nacional" con la oposición.
Indicó que, con mandato del presidente Asad, entabló conversaciones la semana pasada con varias figuras de la oposición, entre ellas Luai Husein, el también escritor Michel Kilo y el economista Aref Dalila, con quienes abordó la cuestión del pluralismo político y de las leyes sobre las elecciones y los medios de información.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, advirtió el viernes contra una intervención extranjera en Siria, exhortando a la oposición de ese país a no repetir el "guión libio, con actores extranjeros injiriendo en la situación".
Por su lado, el ministerio británico de Relaciones Exteriores anunció que convocó este viernes al embajador de Siria y lo amenazó con "más sanciones" si el régimen no pone fin a la represión de las protestas, en el marco de una acción coordinada de la Unión Europea.
Un manifestante murió este viernes por disparos de la fuerza pública en Homs, en el centro de Siria, mientras soldados y miembros de los servicios de seguridad estaban masivamente desplegados en los focos del movimiento de protesta contra el régimen de Bashar al Asad.
"Ha habido un muerto en Homs cuando las fuerzas de seguridad abrieron fuego para dispersar una de las manifestaciones", afirmó un militante que requirió el anonimato. La víctima, un hombre de 40 años, recibió un balazo "en la cabeza".
Según el escritor y opositor Luai Husein, el presidente Asad habría sin embargo dado a la fuerza pública instrucciones de no disparar contra los manifestantes.
Una consejera del presidente, "Bouthaina Chaabán, me dijo en una conversación telefónica que se dieron órdenes presidenciales estrictas de no abrir fuego contra los manifestantes", indicó Husein en su página de Facebook.
La represión del movimiento de protesta contra el Gobierno, iniciado a mediados de marzo, causó ya unos 700 muertos y miles de detenciones, según las ONG. El Alto Comisionado de la ONU para los derechos humanos se declaró "extremadamente preocupado" por estas informaciones.
Pese a la represión, la página 'The Syrian Revolution 2011', creada por jóvenes opositores, lanzó un llamamiento a manifestarse este viernes. Otras manifestaciones, que congregaron a millares de personas, se produjeron al mismo tiempo en Deraa (sur), Qamishli, Derbassyie y Amuda (noreste), así como en Saqba, cerca de Damasco.
"Las fuerzas de seguridad disparan al aire con armas automáticas en Deraa para dispersar a miles de manifestantes", indicó a la AFP un militante de esta localidad, donde se inició a mediados de marzo el movimiento de protesta.
El miércoles, la fuerza pública mató a 19 civiles en las ciudades de Deraa y Homs, según una ONG.
Este viernes por la mañana, otro militante de la ciudad costera de Banias (noroeste), sitiada desde el sábado por el Ejército, indicó que "más de 2.000 soldados están desplegados en la plaza en la que se manifiestan los habitantes y en las calles adyacentes".
El Observatorio sirio de los derechos humanos dio cuenta de la entrada del Ejército en varios otros pueblos cercanos a Banias.
Según el ministro sirio de Información, Adnan Mahmud, el Ejército ya comenzó a retirarse de la ciudad de Banias.
Paralelamente, según uno de los militantes, las detenciones continúan en todo el país, concretamente en Deir Ezzor (este), Latakia (oeste), Qamishli y Deraa.
Numerosos países occidentales y ONG de defensa de los derechos humanos condenaron los disparos contra los manifestantes, en tanto el régimen culpa de la violencia a "grupos terroristas".
Chaaban, citada el miércoles por el diario Al Watan, cercano al poder, afirmó que había empezado un "diálogo nacional" con la oposición.
Indicó que, con mandato del presidente Asad, entabló conversaciones la semana pasada con varias figuras de la oposición, entre ellas Luai Husein, el también escritor Michel Kilo y el economista Aref Dalila, con quienes abordó la cuestión del pluralismo político y de las leyes sobre las elecciones y los medios de información.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, advirtió el viernes contra una intervención extranjera en Siria, exhortando a la oposición de ese país a no repetir el "guión libio, con actores extranjeros injiriendo en la situación".
Por su lado, el ministerio británico de Relaciones Exteriores anunció que convocó este viernes al embajador de Siria y lo amenazó con "más sanciones" si el régimen no pone fin a la represión de las protestas, en el marco de una acción coordinada de la Unión Europea.