La segunda huelga general del año en Grecia acaba en disturbios
Unas 20.000 personas salen a la calle para protestar contra las medidas de ajuste.- Los altercados causan al menos un herido grave.- Aeropuertos, puertos, hospitales y colegios se han afectados por el paro
Atenas, El País
Las manifestaciones convocadas hoy con motivo de la segunda jornada de huelga general convocada en Grecia en lo que va de año han acabado con graves enfrentamientos entre los participantes y la Policía. El motivo del paro era protestar contra las nuevas medidas de ajuste anunciadas hace unas semanas por el Gobierno y el ambicioso plan de privatizaciones con el que el Gobierno quiere recaudar hasta 50.000 millones de euros, lo que despierta el temor de los trabajadores a futuros despidos. La repetición de los disturbios ha hecho recordar a los griegos la tragedia de 2010. Hace exactamente un año, una protesta convocada por los mismos motivos se saldó con la muerte de tres empleados de una sucursal bancaria que fue atacada con una bomba incendiaria.
"Que la crisis la pague la plutocracia y no el pueblo" o "pueblo, no bajes la cabeza y no te dejes vencer", eran algunos de los lemas más coreados en las protestas
"Quieren eliminar las conquistas sociales de varios siglos", denuncia Vangelis Papadoyannis
La Policía de Atenas ha empleado gases lacrimógenos para dispersar a un grupo de manifestantes violentos, que atacó con piedras a los agentes. Un portavoz de la Policía ha informado de que las unidades antidisturbios fueron agredidas por un grupo de encapuchados cuando terminaba la manifestación. A causa de ello, un agente sufrió heridas leves y al menos tres personas han sido detenidas en relación con estos disturbios.
Según varios testigos presenciales, los agentes golpearon al menos a cinco personas que fueron trasladadas en ambulancia a hospitales cercanos. Según informa AFP, uno de los participantes, un joven de 30 años definido como un "simpatizante de izquierdas" ha tenido que ser intervenido y permanece ingresado con pronóstico grave por golpes en la cabeza.
Las autoridades calculan que en las distintas manifestaciones celebradas hoy en Atenas han participado unas 20.000 personas. "Que la crisis la pague la plutocracia y no el pueblo" o "pueblo, no bajes la cabeza y no te dejes vencer", eran algunas de las consignas coreadas por los manifestantes, que portaban pancartas con mensajes contra la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyos representantes están estos días en el país.
Uno de los presentes en las manifestaciones, Vangelis Papadoyannis, de 46 años y empleado en una empresa de nuevas tecnologías, ha resumido el sentir de los participantes al afirmar: "Ellos quieren eliminar las conquistas sociales de varios siglos". "No permitiremos que nos roben nuestro trabajo, el pan de nuestros hogares y que reduzcan el personal en las empresas", declaraba otro trabajador, en este caso de la empresa pública de ferrocarriles, una de las que se enfrentará a recortes de plantilla. "Si fuera en beneficio del Estado, estaría dispuesto a hacer concesiones pero están vendiendo sólo para pagar a nuestros acreedores", ha lamentado Tassoulas Carabina, de 48 años y empleado de la empresa de electricidad DEI-PPC.
Más de 100 vuelos cancelados
El paro general, el segundo en este año, ha sido convocado por la Confederación de Trabajadores de Grecia y el Sindicato de Funcionarios Civiles para protestar contra el nuevo plan de austeridad con el que el Gobierno quiere recaudar 76.000 millones de euros hasta 2015. La huelga, la enésima desde que el país anunciara hace más de un año los primeros ajustes, ha obligado a cancelar más de cien vuelos y a modificar decenas debido a que los controladores han estado cuatro horas parados.
Las tiendas en el centro de la capital ha echado las persianas al paso de la manifestación ante el temor a los disturbios. De hecho, los comercios de otros barrios y del resto de ciudades sí han abierto con normalidad. Además, pese al llamamiento a la huelga de la unión de empleados bancarios, los bancos privados funcionan, aunque con menos personal que habitualmente.
Colegios cerrados y hospitales en mínimos
Los barcos y cruceros no han podido zarpar hacia las islas y hacia Italia, debido a que en la huelga participan los trabajadores de los puertos. Los del ferrocarril también se han sumado. La mayor parte de las líneas del transporte público funciona en Atenas para permitir la llegada de manifestantes al centro. Los colegios están cerrados y los hospitales públicos atienden solo casos de emergencias ya que las operaciones y citas han sido pospuestas. Los servicios municipales, incluidas las guarderías infantiles, y los ministerios y organismos públicos también están cerrados.
La huelga tiene lugar en un ambiente de extrema tensión por los crecientes comentarios de que Grecia tendrá que recurrir a un nuevo paquete de ayuda externa o incluso reestructurar su deuda ante la imposibilidad de asumir el pago de sus obligaciones. De hecho, estos días está en el país una representación de la UE, el BCE y el FMI para aclarar si Grecia está en condiciones de cumplir con sus objetivos de reducción del déficit con los actuales planes de ahorro y, en caso de que no sea así, concretar las nuevas medidas de ajuste que necesitaría llevar a cabo.
Atenas, El País
Las manifestaciones convocadas hoy con motivo de la segunda jornada de huelga general convocada en Grecia en lo que va de año han acabado con graves enfrentamientos entre los participantes y la Policía. El motivo del paro era protestar contra las nuevas medidas de ajuste anunciadas hace unas semanas por el Gobierno y el ambicioso plan de privatizaciones con el que el Gobierno quiere recaudar hasta 50.000 millones de euros, lo que despierta el temor de los trabajadores a futuros despidos. La repetición de los disturbios ha hecho recordar a los griegos la tragedia de 2010. Hace exactamente un año, una protesta convocada por los mismos motivos se saldó con la muerte de tres empleados de una sucursal bancaria que fue atacada con una bomba incendiaria.
"Que la crisis la pague la plutocracia y no el pueblo" o "pueblo, no bajes la cabeza y no te dejes vencer", eran algunos de los lemas más coreados en las protestas
"Quieren eliminar las conquistas sociales de varios siglos", denuncia Vangelis Papadoyannis
La Policía de Atenas ha empleado gases lacrimógenos para dispersar a un grupo de manifestantes violentos, que atacó con piedras a los agentes. Un portavoz de la Policía ha informado de que las unidades antidisturbios fueron agredidas por un grupo de encapuchados cuando terminaba la manifestación. A causa de ello, un agente sufrió heridas leves y al menos tres personas han sido detenidas en relación con estos disturbios.
Según varios testigos presenciales, los agentes golpearon al menos a cinco personas que fueron trasladadas en ambulancia a hospitales cercanos. Según informa AFP, uno de los participantes, un joven de 30 años definido como un "simpatizante de izquierdas" ha tenido que ser intervenido y permanece ingresado con pronóstico grave por golpes en la cabeza.
Las autoridades calculan que en las distintas manifestaciones celebradas hoy en Atenas han participado unas 20.000 personas. "Que la crisis la pague la plutocracia y no el pueblo" o "pueblo, no bajes la cabeza y no te dejes vencer", eran algunas de las consignas coreadas por los manifestantes, que portaban pancartas con mensajes contra la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyos representantes están estos días en el país.
Uno de los presentes en las manifestaciones, Vangelis Papadoyannis, de 46 años y empleado en una empresa de nuevas tecnologías, ha resumido el sentir de los participantes al afirmar: "Ellos quieren eliminar las conquistas sociales de varios siglos". "No permitiremos que nos roben nuestro trabajo, el pan de nuestros hogares y que reduzcan el personal en las empresas", declaraba otro trabajador, en este caso de la empresa pública de ferrocarriles, una de las que se enfrentará a recortes de plantilla. "Si fuera en beneficio del Estado, estaría dispuesto a hacer concesiones pero están vendiendo sólo para pagar a nuestros acreedores", ha lamentado Tassoulas Carabina, de 48 años y empleado de la empresa de electricidad DEI-PPC.
Más de 100 vuelos cancelados
El paro general, el segundo en este año, ha sido convocado por la Confederación de Trabajadores de Grecia y el Sindicato de Funcionarios Civiles para protestar contra el nuevo plan de austeridad con el que el Gobierno quiere recaudar 76.000 millones de euros hasta 2015. La huelga, la enésima desde que el país anunciara hace más de un año los primeros ajustes, ha obligado a cancelar más de cien vuelos y a modificar decenas debido a que los controladores han estado cuatro horas parados.
Las tiendas en el centro de la capital ha echado las persianas al paso de la manifestación ante el temor a los disturbios. De hecho, los comercios de otros barrios y del resto de ciudades sí han abierto con normalidad. Además, pese al llamamiento a la huelga de la unión de empleados bancarios, los bancos privados funcionan, aunque con menos personal que habitualmente.
Colegios cerrados y hospitales en mínimos
Los barcos y cruceros no han podido zarpar hacia las islas y hacia Italia, debido a que en la huelga participan los trabajadores de los puertos. Los del ferrocarril también se han sumado. La mayor parte de las líneas del transporte público funciona en Atenas para permitir la llegada de manifestantes al centro. Los colegios están cerrados y los hospitales públicos atienden solo casos de emergencias ya que las operaciones y citas han sido pospuestas. Los servicios municipales, incluidas las guarderías infantiles, y los ministerios y organismos públicos también están cerrados.
La huelga tiene lugar en un ambiente de extrema tensión por los crecientes comentarios de que Grecia tendrá que recurrir a un nuevo paquete de ayuda externa o incluso reestructurar su deuda ante la imposibilidad de asumir el pago de sus obligaciones. De hecho, estos días está en el país una representación de la UE, el BCE y el FMI para aclarar si Grecia está en condiciones de cumplir con sus objetivos de reducción del déficit con los actuales planes de ahorro y, en caso de que no sea así, concretar las nuevas medidas de ajuste que necesitaría llevar a cabo.