Chávez acusa a sus aliados de apoyar a la guerrilla
Caracas, Agencias
El presidente Hugo Chávez acusó el domingo a algunos de sus aliados de propiciar la instalación de campamentos de la guerrilla colombiana en Venezuela, y rechazó la protesta que realizaron organizaciones de izquierda contra la deportación de un presunto representante de las FARC.
Por segundo día consecutivo Chávez defendió la detención y deportación a territorio colombiano de Joaquín Pérez Becerra, presunto representante en Europa de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, y marcó distancia de los grupos de izquierda radical, estrechos aliados a su gobierno, que protestaron por la medida contra el supuesto rebelde y los señaló de "pasarse de radicales".
"Algunos de ellos yo tuve que llamarlos porque andaban, porque algunos (quieren) pasarse de radicales", dijo el mandatario en cadena de radio y televisión, al objetar la protesta que realizó el jueves el izquierdista Movimiento Continental Bolivariano contra la deportación de Pérez Becerra.
"En una ocasión andaban reuniéndose con la guerrilla colombiana, y andaban haciendo unos planes para montar en Venezuela unas bases de la guerrilla colombiana a espaldas de todos nosotros. No se dan cuenta que es la excusa perfecta del imperialismo para agredir al pueblo de Venezuela", denunció Chávez al fustigar a sus aliados.
En los últimos años Chávez ha mantenido distancia de los grupos rebeldes colombianos luego de haber pedido entre el 2007 y el 2008 que se les reconociera como fuerzas insurgentes y no organizaciones terroristas, como sí las califican la Unión Europea y Estados Unidos.
En marzo del 2008 el mandatario participó de un minuto de silencio a la memoria de Raúl Reyes, uno de los máximos jefes de las FARC _miembros del llamado secretariado de esa organización_ muerto tras un bombardeo del gobierno colombiano en la frontera con Ecuador.
Chávez aseguró el domingo que actuó apegado a las normas internacionales en el caso de Pérez Becerra, de 55 años, quien fue detenido el 23 de abril en el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía y deportado dos días después hacia Colombia.
"¿Cómo salió de Suecia si él tenía código rojo de Interpol? ¿Por qué lo dejaron salir?", inquirió el mandatario al rechazar las críticas por la deportación del detenido, y dijo que "para mí le tendieron una trampa para clavarme a mí una puñalada".
"¿Por qué si él bajó de un avión en Alemania, en el aeropuerto pasó por los registros para abordar otro avión de Frankfurt a Maiquetía, nadie lo detuvo? ¿Por qué? Ah, para poner a Chávez la papa caliente en la mano", expresó el mandatario durante una concentración que realizó el oficialismo en la capital para celebrar el Día del Trabajador.
El gobierno de Suecia solicitó la semana pasada a Venezuela explicaciones sobre la detención de Pérez Becerra, quien salió de Colombia asilado a principios de la década de 1990 y desde el 2000 es ciudadano sueco porque renunció a su ciudadanía, según informaron autoridades suecas y colombianas.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo que Pérez Becerra era el enlace más importante de las FARC en Europa. A su llegada a Bogotá, el detenido negó pertenecer al grupo guerrillero y le dijo a la prensa que era "un comunicador social".
Pérez Becerra se identifica como director de la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol), una página de internet que suele difundir entrevistas y comunicados del grupo guerrillero colombiano.
Anncol criticó el domingo a Chávez, y le preguntó, a través de un comunicado que difundió la Agencia Bolivariana de Prensa, que si tras aprobar la deportación de Pérez Becerra "es capaz de mirar a los ojos a la esposa e hija y decirles que es revolucionario y anti-imperialista".
"¿Es qué esa acción es digna de dirigentes que pregonan a voz en cuello: 'Patria, socialismo o muerte venceremos'? No, mil veces no. Qué pena, pero ahí saltaron la talanquera (valla)", refiere el escrito de Anncol.
El presidente Hugo Chávez acusó el domingo a algunos de sus aliados de propiciar la instalación de campamentos de la guerrilla colombiana en Venezuela, y rechazó la protesta que realizaron organizaciones de izquierda contra la deportación de un presunto representante de las FARC.
Por segundo día consecutivo Chávez defendió la detención y deportación a territorio colombiano de Joaquín Pérez Becerra, presunto representante en Europa de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, y marcó distancia de los grupos de izquierda radical, estrechos aliados a su gobierno, que protestaron por la medida contra el supuesto rebelde y los señaló de "pasarse de radicales".
"Algunos de ellos yo tuve que llamarlos porque andaban, porque algunos (quieren) pasarse de radicales", dijo el mandatario en cadena de radio y televisión, al objetar la protesta que realizó el jueves el izquierdista Movimiento Continental Bolivariano contra la deportación de Pérez Becerra.
"En una ocasión andaban reuniéndose con la guerrilla colombiana, y andaban haciendo unos planes para montar en Venezuela unas bases de la guerrilla colombiana a espaldas de todos nosotros. No se dan cuenta que es la excusa perfecta del imperialismo para agredir al pueblo de Venezuela", denunció Chávez al fustigar a sus aliados.
En los últimos años Chávez ha mantenido distancia de los grupos rebeldes colombianos luego de haber pedido entre el 2007 y el 2008 que se les reconociera como fuerzas insurgentes y no organizaciones terroristas, como sí las califican la Unión Europea y Estados Unidos.
En marzo del 2008 el mandatario participó de un minuto de silencio a la memoria de Raúl Reyes, uno de los máximos jefes de las FARC _miembros del llamado secretariado de esa organización_ muerto tras un bombardeo del gobierno colombiano en la frontera con Ecuador.
Chávez aseguró el domingo que actuó apegado a las normas internacionales en el caso de Pérez Becerra, de 55 años, quien fue detenido el 23 de abril en el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía y deportado dos días después hacia Colombia.
"¿Cómo salió de Suecia si él tenía código rojo de Interpol? ¿Por qué lo dejaron salir?", inquirió el mandatario al rechazar las críticas por la deportación del detenido, y dijo que "para mí le tendieron una trampa para clavarme a mí una puñalada".
"¿Por qué si él bajó de un avión en Alemania, en el aeropuerto pasó por los registros para abordar otro avión de Frankfurt a Maiquetía, nadie lo detuvo? ¿Por qué? Ah, para poner a Chávez la papa caliente en la mano", expresó el mandatario durante una concentración que realizó el oficialismo en la capital para celebrar el Día del Trabajador.
El gobierno de Suecia solicitó la semana pasada a Venezuela explicaciones sobre la detención de Pérez Becerra, quien salió de Colombia asilado a principios de la década de 1990 y desde el 2000 es ciudadano sueco porque renunció a su ciudadanía, según informaron autoridades suecas y colombianas.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo que Pérez Becerra era el enlace más importante de las FARC en Europa. A su llegada a Bogotá, el detenido negó pertenecer al grupo guerrillero y le dijo a la prensa que era "un comunicador social".
Pérez Becerra se identifica como director de la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol), una página de internet que suele difundir entrevistas y comunicados del grupo guerrillero colombiano.
Anncol criticó el domingo a Chávez, y le preguntó, a través de un comunicado que difundió la Agencia Bolivariana de Prensa, que si tras aprobar la deportación de Pérez Becerra "es capaz de mirar a los ojos a la esposa e hija y decirles que es revolucionario y anti-imperialista".
"¿Es qué esa acción es digna de dirigentes que pregonan a voz en cuello: 'Patria, socialismo o muerte venceremos'? No, mil veces no. Qué pena, pero ahí saltaron la talanquera (valla)", refiere el escrito de Anncol.