Casa Blanca: Bin Laden estaba desarmado al ser muerto a tiros
Washington, Agencias
Osama bin Laden estaba desarmado pero opuso resistencia cuando un comando especial de la Armada de Estados Unidos lo enfrentó durante un asalto a su complejo en Pakistán, informó el martes la Casa Blanca, en una jornada en la que surgieron más detalles sobre la operación que mató al terrorista más buscado en el mundo.
El secretario de prensa de la Presidencia, Jay Carney, reconoció que bin Laden no tenía un arma, a pesar de que funcionarios del gobierno habían dicho que el líder de al-Qaida se resistió durante la redada. Carney explicó que resistirse no requiere un arma de fuego.
La Casa Blanca añadió que contemplaba la posibilidad de divulgar las fotografías del cadáver de bin Laden, pero advirtió que estas imágenes son "espantosas" y podrían enardecer los ánimos en algunos grupos.
Funcionarios estadounidenses revelaron otros detalles el martes: Una de las esposas de bin Laden trató de confrontar al comando y recibió un tiro en una pierna. Las altas temperaturas causaron que un helicóptero que transportaba a las fuerzas estadounidenses hiciera un aterrizaje forzoso por un desperfecto. Y cuando los efectivos de las fuerzas especiales recorrían el complejo del cabecilla terrorista, esposaron a quienes encontraban y siguieron adelante en busca de su blanco, a quien llamaban en clave "Gerónimo", en alusión al jefe apache, quien eludió durante mucho tiempo su captura en Estados Unidos y México.
Una vez que bin Laden fue muerto a tiros, los efectivos dieron marcha atrás para sacar a los prisioneros del complejo, antes de destruir el helicóptero averiado.
La descripción más detallada del asalto surgió en un momento en que los funcionarios estadounidenses sopesaban si debían difundir el video y las fotos de bin Laden, muerto de un disparo cerca de su ojo izquierdo.
La senadora Diane Feinstein, quien encabeza la Comisión de Inteligencia y reveló algunos nuevos detalles de la operación, dijo que sabía de la existencia del presunto complejo de bin Laden desde diciembre pasado. Ello ofreció una rara evidencia de que Washington puede guardar un secreto tan relevante.
El presidente Barack Obama hizo planes para visitar el lugar donde estaba el Centro de Comercio Mundial en Nueva York, el jueves, con el fin de recordar a los muertos en los atentados del 11 de septiembre del 2001, atribuidos a la red al-Qaida de bin Laden.
El asesor de la Casa Blanca en combate al terrorismo, John Brennan, dijo que Estados Unidos revisaba algunos objetos incautados en el asalto al complejo de bin Laden en Abotabad, Pakistán. Entre esos objetos habría discos duros, discos de video, y un legajo de documentos, que ayudarían a la inteligencia estadounidense a conocer detalles operativos de al-Qaida y podrían llevar hacia el supuesto lugarteniente de bin Laden, Ayman al-Zawahri.
En cuanto a la divulgación de las fotos y el video, Brennan dijo durante varias entrevistas matutinas con la televisión que ello "necesita hacerse de una forma meditada", con un análisis cuidadoso, debido al tipo de reacción que podrían provocar las imágenes.
Habría fotos del cadáver de bin Laden y un video del momento en que fue arrojado al mar. Los funcionarios no quieren provocar la ira de los grupos islamistas al mostrar imágenes crudas del cuerpo de bin Laden.
Sin embargo, estaban también ansiosos por refutar algunas teorías que se mencionan en varios lugares, incluido Pakistán, las cuales señalan que bin Laden estaría vivo.
En un hecho que aumentaría las presiones para que sean divulgadas las fotos, el portavoz del Talibán afgano, Zabiulá, dijo que las versiones sobre la muerte de bin Laden eran "prematuras", y añadió que Estados Unidos no había presentado "evidencias convincentes", reportó el SITE Intelligence Group.
Obama, quien aprobó la operación extraordinariamente riesgosa y atestiguó su evolución desde la sala de atención de crisis en la Casa Blanca, con una tensión evidente en el rostro, recibió elogios de varios líderes mundiales e incluso de sus opositores políticos en Estados Unidos.
Sin embargo, Pakistán señaló que la operación "no estaba autorizada", y añadió que ésta no debe sentar un precedente de acciones futuras.
El director de la CIA, Leon Panetta, en entrevistas con Time y con PBS, dijo que la escena en la sala de atención de crisis era tensa en los últimos minutos de la operación.
"Una vez que esos equipos entraron al complejo, puedo decirles que hubo un periodo de entre 20 y 25 minutos, en el que realmente no sabíamos exactamente qué ocurría", dijo Panetta a la PBS.
Cuando el almirante William McRaven, jefe del Comando Especial de Fuerzas Conjuntas, reportó que el comando había identificado a "Gernónimo", todos los presentes en la sala pudieron "respirar, al fin".
Y cuando los helicópteros partieron del complejo, 15 minutos después, todos aplaudieron, añadió Panetta.
Bin Laden había vivido en el complejo fortificado durante seis años, según los funcionarios, ubicándolo lejos de la violenta frontera de Pakistán y Afganistán donde se suponía que estaba escondido.
Paciencia y persistencia —características atribuidas regularmente a al-Qaida— fueron decisivas en la cacería estadounidense de una década para atrapar a bin Laden, cuyo destino fue determinado en un ataque violento de 40 minutos y años de planeación.
Osama bin Laden estaba desarmado pero opuso resistencia cuando un comando especial de la Armada de Estados Unidos lo enfrentó durante un asalto a su complejo en Pakistán, informó el martes la Casa Blanca, en una jornada en la que surgieron más detalles sobre la operación que mató al terrorista más buscado en el mundo.
El secretario de prensa de la Presidencia, Jay Carney, reconoció que bin Laden no tenía un arma, a pesar de que funcionarios del gobierno habían dicho que el líder de al-Qaida se resistió durante la redada. Carney explicó que resistirse no requiere un arma de fuego.
La Casa Blanca añadió que contemplaba la posibilidad de divulgar las fotografías del cadáver de bin Laden, pero advirtió que estas imágenes son "espantosas" y podrían enardecer los ánimos en algunos grupos.
Funcionarios estadounidenses revelaron otros detalles el martes: Una de las esposas de bin Laden trató de confrontar al comando y recibió un tiro en una pierna. Las altas temperaturas causaron que un helicóptero que transportaba a las fuerzas estadounidenses hiciera un aterrizaje forzoso por un desperfecto. Y cuando los efectivos de las fuerzas especiales recorrían el complejo del cabecilla terrorista, esposaron a quienes encontraban y siguieron adelante en busca de su blanco, a quien llamaban en clave "Gerónimo", en alusión al jefe apache, quien eludió durante mucho tiempo su captura en Estados Unidos y México.
Una vez que bin Laden fue muerto a tiros, los efectivos dieron marcha atrás para sacar a los prisioneros del complejo, antes de destruir el helicóptero averiado.
La descripción más detallada del asalto surgió en un momento en que los funcionarios estadounidenses sopesaban si debían difundir el video y las fotos de bin Laden, muerto de un disparo cerca de su ojo izquierdo.
La senadora Diane Feinstein, quien encabeza la Comisión de Inteligencia y reveló algunos nuevos detalles de la operación, dijo que sabía de la existencia del presunto complejo de bin Laden desde diciembre pasado. Ello ofreció una rara evidencia de que Washington puede guardar un secreto tan relevante.
El presidente Barack Obama hizo planes para visitar el lugar donde estaba el Centro de Comercio Mundial en Nueva York, el jueves, con el fin de recordar a los muertos en los atentados del 11 de septiembre del 2001, atribuidos a la red al-Qaida de bin Laden.
El asesor de la Casa Blanca en combate al terrorismo, John Brennan, dijo que Estados Unidos revisaba algunos objetos incautados en el asalto al complejo de bin Laden en Abotabad, Pakistán. Entre esos objetos habría discos duros, discos de video, y un legajo de documentos, que ayudarían a la inteligencia estadounidense a conocer detalles operativos de al-Qaida y podrían llevar hacia el supuesto lugarteniente de bin Laden, Ayman al-Zawahri.
En cuanto a la divulgación de las fotos y el video, Brennan dijo durante varias entrevistas matutinas con la televisión que ello "necesita hacerse de una forma meditada", con un análisis cuidadoso, debido al tipo de reacción que podrían provocar las imágenes.
Habría fotos del cadáver de bin Laden y un video del momento en que fue arrojado al mar. Los funcionarios no quieren provocar la ira de los grupos islamistas al mostrar imágenes crudas del cuerpo de bin Laden.
Sin embargo, estaban también ansiosos por refutar algunas teorías que se mencionan en varios lugares, incluido Pakistán, las cuales señalan que bin Laden estaría vivo.
En un hecho que aumentaría las presiones para que sean divulgadas las fotos, el portavoz del Talibán afgano, Zabiulá, dijo que las versiones sobre la muerte de bin Laden eran "prematuras", y añadió que Estados Unidos no había presentado "evidencias convincentes", reportó el SITE Intelligence Group.
Obama, quien aprobó la operación extraordinariamente riesgosa y atestiguó su evolución desde la sala de atención de crisis en la Casa Blanca, con una tensión evidente en el rostro, recibió elogios de varios líderes mundiales e incluso de sus opositores políticos en Estados Unidos.
Sin embargo, Pakistán señaló que la operación "no estaba autorizada", y añadió que ésta no debe sentar un precedente de acciones futuras.
El director de la CIA, Leon Panetta, en entrevistas con Time y con PBS, dijo que la escena en la sala de atención de crisis era tensa en los últimos minutos de la operación.
"Una vez que esos equipos entraron al complejo, puedo decirles que hubo un periodo de entre 20 y 25 minutos, en el que realmente no sabíamos exactamente qué ocurría", dijo Panetta a la PBS.
Cuando el almirante William McRaven, jefe del Comando Especial de Fuerzas Conjuntas, reportó que el comando había identificado a "Gernónimo", todos los presentes en la sala pudieron "respirar, al fin".
Y cuando los helicópteros partieron del complejo, 15 minutos después, todos aplaudieron, añadió Panetta.
Bin Laden había vivido en el complejo fortificado durante seis años, según los funcionarios, ubicándolo lejos de la violenta frontera de Pakistán y Afganistán donde se suponía que estaba escondido.
Paciencia y persistencia —características atribuidas regularmente a al-Qaida— fueron decisivas en la cacería estadounidense de una década para atrapar a bin Laden, cuyo destino fue determinado en un ataque violento de 40 minutos y años de planeación.