Al menos 9 muertos en Siria desde el viernes pese a consignas de no disparar
Damasco, Agencias
Al menos nueve personas murieron el viernes y el sábado en Siria por disparos de las fuerzas de seguridad a pesar de las consignas del régimen de no abrir fuego contra los manifestantes y del llamado al "diálogo nacional" de la víspera, a dos meses de iniciadas las protestas.
Al menos cuatro personas murieron el sábado y varias resultaron heridas en Tall Kalaj, cerca de Homs (centro), por disparos de las fuerzas del orden, indicaron fuentes médicas y un testigo.
"Las fuerzas del orden que rodean desde la mañana Tall Kalaj disparan con armas automáticas. Al menos tres personas murieron y varias resultaron heridas", indicó el testigo.
Uno de los heridos murió en el hospital público de Qobbayyate (norte), luego de ser herido en el pecho, indicó una fuente médica a la AFP. Otro herido estaba grave en ese mismo hospital.
Miles de personas habían manifestado el viernes en esta localidad cercana a Homs, tercera ciudad de Siria a 160 km al norte de Damasco.
Consecuencia de la represión, varios centenares de sirios huyeron el sábado de Tall Kalaj para el pueblo vecino de Wadi Jaled, en el norte del Líbano, según un corresponsal de la AFP y responsables locales.
"Más de 500 personas cruzaron la frontera desde las 07H00 (04H00 GMT), en su mayoría mujeres y niños", declaró el consejero municipal Mahmud Jazaal quien precisó que se podían escuchar disparos intermitentes provenientes de Siria.
Según un corresponsal de la AFP algunos refugiados tenían heridas de bala y al menos cinco fueron trasladados hacia hospitales libaneses.
El viernes, cinco personas murieron en Siria por disparos de las fuerzas de seguridad desplegadas masivamente, según un activista de defensa de los derechos humanos.
Tres murieron en Homs y dos en Damasco. En el barrio Qabun, a la salida de la mezquita Abu Bakr, en la capital siria, los fieles fueron golpeados con bastones y luego hubo disparos, precisó.
Por otra parte las detenciones de militantes continúan, según el presidente del Observatorio sirio de Derechos Humanos, Rami Abdel Rahman, con sede en Londres.
El militante Wael Hamada, marido de la conocida abogada de derechos humanos Razane Zituna, fue detenido el miércoles en Damasco en su lugar de trabajo, según Abdel Rahman.
El ministro de Información, Adnan Mahmud, anunció el viernes la apertura de un diálogo nacional para sacar al país de la crisis, así como el retiro gradual del ejército de los focos de protesta de Banias (noroeste) y Deraa.
Un militante indicó que en Banias "los tanques se retiraron del centro de la ciudad pero los soldados y las fuerzas de seguridad están aún presentes".
Según organizaciones no gubernamentales, la represión en Siria dejó unos 700 muertos y miles de arrestos desde que comenzaron las protestas a mediados de marzo, suscitando críticas a nivel internacional.
Al menos nueve personas murieron el viernes y el sábado en Siria por disparos de las fuerzas de seguridad a pesar de las consignas del régimen de no abrir fuego contra los manifestantes y del llamado al "diálogo nacional" de la víspera, a dos meses de iniciadas las protestas.
Al menos cuatro personas murieron el sábado y varias resultaron heridas en Tall Kalaj, cerca de Homs (centro), por disparos de las fuerzas del orden, indicaron fuentes médicas y un testigo.
"Las fuerzas del orden que rodean desde la mañana Tall Kalaj disparan con armas automáticas. Al menos tres personas murieron y varias resultaron heridas", indicó el testigo.
Uno de los heridos murió en el hospital público de Qobbayyate (norte), luego de ser herido en el pecho, indicó una fuente médica a la AFP. Otro herido estaba grave en ese mismo hospital.
Miles de personas habían manifestado el viernes en esta localidad cercana a Homs, tercera ciudad de Siria a 160 km al norte de Damasco.
Consecuencia de la represión, varios centenares de sirios huyeron el sábado de Tall Kalaj para el pueblo vecino de Wadi Jaled, en el norte del Líbano, según un corresponsal de la AFP y responsables locales.
"Más de 500 personas cruzaron la frontera desde las 07H00 (04H00 GMT), en su mayoría mujeres y niños", declaró el consejero municipal Mahmud Jazaal quien precisó que se podían escuchar disparos intermitentes provenientes de Siria.
Según un corresponsal de la AFP algunos refugiados tenían heridas de bala y al menos cinco fueron trasladados hacia hospitales libaneses.
El viernes, cinco personas murieron en Siria por disparos de las fuerzas de seguridad desplegadas masivamente, según un activista de defensa de los derechos humanos.
Tres murieron en Homs y dos en Damasco. En el barrio Qabun, a la salida de la mezquita Abu Bakr, en la capital siria, los fieles fueron golpeados con bastones y luego hubo disparos, precisó.
Por otra parte las detenciones de militantes continúan, según el presidente del Observatorio sirio de Derechos Humanos, Rami Abdel Rahman, con sede en Londres.
El militante Wael Hamada, marido de la conocida abogada de derechos humanos Razane Zituna, fue detenido el miércoles en Damasco en su lugar de trabajo, según Abdel Rahman.
El ministro de Información, Adnan Mahmud, anunció el viernes la apertura de un diálogo nacional para sacar al país de la crisis, así como el retiro gradual del ejército de los focos de protesta de Banias (noroeste) y Deraa.
Un militante indicó que en Banias "los tanques se retiraron del centro de la ciudad pero los soldados y las fuerzas de seguridad están aún presentes".
Según organizaciones no gubernamentales, la represión en Siria dejó unos 700 muertos y miles de arrestos desde que comenzaron las protestas a mediados de marzo, suscitando críticas a nivel internacional.