8.000 policías y 30 millones de euros para proteger a Isabel II en Irlanda
Madrid, Agencias
Un despliegue de seguridad espectacular para una visita histórica. Más de 8.000 policías y alrededor de 2.000 soldados protegen a la reina Isabel II de Inglaterra en Dublín. El primer viaje a Irlanda de un monarca británico en un siglo y el primero desde que el país alcanzó la independencia tendrá un coste de 30 millones de euros para los contribuyentes.
Las alarmas se han disparado después de que esta mañana la Policía irlandesa desactivara una bomba en Maynooth, a unos 25 kilómetros de la capital irlandesa. Actualmente, el Ejército está analizando un segundo artefacto explosivo en Dublín.
Un portavoz de la Policía declaró que los agentes habían recibido hacia las 5.30 hora local (7.30 en España) una llamada telefónica sobre la presencia de un artefacto sospechoso en una estación de tranvía del norte de Dublín y que el Ejército había enviado a un equipo de artificieros a la zona.
El Ejército irlandés detonó poco antes de forma controlada una bomba de fabricación casera que había aparecido en el compartimento de equipajes de un autobús en la ciudad de Maynooth. Los militares se han desplegado en los alrededores de la ciudad, en el condado de Kildare, a petición de la Policía. Los restos del explosivo han sido entregados a la Policía para su análisis.
Un despliegue de seguridad espectacular para una visita histórica. Más de 8.000 policías y alrededor de 2.000 soldados protegen a la reina Isabel II de Inglaterra en Dublín. El primer viaje a Irlanda de un monarca británico en un siglo y el primero desde que el país alcanzó la independencia tendrá un coste de 30 millones de euros para los contribuyentes.
Las alarmas se han disparado después de que esta mañana la Policía irlandesa desactivara una bomba en Maynooth, a unos 25 kilómetros de la capital irlandesa. Actualmente, el Ejército está analizando un segundo artefacto explosivo en Dublín.
Un portavoz de la Policía declaró que los agentes habían recibido hacia las 5.30 hora local (7.30 en España) una llamada telefónica sobre la presencia de un artefacto sospechoso en una estación de tranvía del norte de Dublín y que el Ejército había enviado a un equipo de artificieros a la zona.
El Ejército irlandés detonó poco antes de forma controlada una bomba de fabricación casera que había aparecido en el compartimento de equipajes de un autobús en la ciudad de Maynooth. Los militares se han desplegado en los alrededores de la ciudad, en el condado de Kildare, a petición de la Policía. Los restos del explosivo han sido entregados a la Policía para su análisis.