La OTAN admite que necesita más aviones para atacar a las fuerzas de Gadafi
Berlín, Agencias
Dinamarca se sumó hoy a los llamamientos efectuados en los últimos días por Francia y Reino Unido y pidió a los socios de la OTAN una mayor contribución al esfuerzo militar en Libia, en concreto, más aviones con capacidad para atacar objetivos terrestres.
La ministra de Exteriores danesa, Lene Espersen, recordó a su llegada a la reunión de la Alianza Atlántica que se celebra en Berlín que su país "está haciendo una enorme contribución" y confió en que el resto de países muestren su "solidaridad".
"Es relevante discutir el reparto del esfuerzo para poner presión en los países que aún no han comenzado a contribuir" en los bombardeos contra las fuerzas de Muamar al Gadafi, señaló Espersen.
Dinamarca, junto a Francia, Reino Unido, Noruega, Bélgica y Canadá son los que llevan el grueso de las acciones ofensivas, mientras que las fuerzas del resto de los países de la OTAN se limitan a tareas de vigilancia y control.
Hoy, España ya dejó claro que no se plantea incrementar sus medios militares en la misión ni participar en acciones aéreas de ataque contra fuerzas de Gadafi, según indicó su ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez.
En los últimos días, Francia y Reino Unido han presionado a sus socios para que refuercen los ataques, tras la retirada de los mismos de los aviones estadounidenses, que han pasado a un segundo plano en Libia después de haber iniciado junto a británicos y galos la operación internacional.
Varios miembros de la Alianza han salido ya al paso de las críticas y han insistido en que el trabajo de la OTAN está siendo bueno.
Hoy lo hizo el ministro de Exteriores noruego, Jonas Gahr Store, quien a su llegada a la reunión de Berlín destacó la "activa campaña" desarrollada por los aliados y los resultados obtenidos.
"Lo que necesitamos ahora es progreso político", indicó el ministro a los periodistas.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, declaró a su llegada que la reunión ayer del Grupo de Contacto para Libia en Doha (Catar) ha sentado unas buenas "bases" y explicó que la Alianza discutirá hoy "cómo continuar la campaña militar para terminar con éxito".
Dinamarca se sumó hoy a los llamamientos efectuados en los últimos días por Francia y Reino Unido y pidió a los socios de la OTAN una mayor contribución al esfuerzo militar en Libia, en concreto, más aviones con capacidad para atacar objetivos terrestres.
La ministra de Exteriores danesa, Lene Espersen, recordó a su llegada a la reunión de la Alianza Atlántica que se celebra en Berlín que su país "está haciendo una enorme contribución" y confió en que el resto de países muestren su "solidaridad".
"Es relevante discutir el reparto del esfuerzo para poner presión en los países que aún no han comenzado a contribuir" en los bombardeos contra las fuerzas de Muamar al Gadafi, señaló Espersen.
Dinamarca, junto a Francia, Reino Unido, Noruega, Bélgica y Canadá son los que llevan el grueso de las acciones ofensivas, mientras que las fuerzas del resto de los países de la OTAN se limitan a tareas de vigilancia y control.
Hoy, España ya dejó claro que no se plantea incrementar sus medios militares en la misión ni participar en acciones aéreas de ataque contra fuerzas de Gadafi, según indicó su ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez.
En los últimos días, Francia y Reino Unido han presionado a sus socios para que refuercen los ataques, tras la retirada de los mismos de los aviones estadounidenses, que han pasado a un segundo plano en Libia después de haber iniciado junto a británicos y galos la operación internacional.
Varios miembros de la Alianza han salido ya al paso de las críticas y han insistido en que el trabajo de la OTAN está siendo bueno.
Hoy lo hizo el ministro de Exteriores noruego, Jonas Gahr Store, quien a su llegada a la reunión de Berlín destacó la "activa campaña" desarrollada por los aliados y los resultados obtenidos.
"Lo que necesitamos ahora es progreso político", indicó el ministro a los periodistas.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, declaró a su llegada que la reunión ayer del Grupo de Contacto para Libia en Doha (Catar) ha sentado unas buenas "bases" y explicó que la Alianza discutirá hoy "cómo continuar la campaña militar para terminar con éxito".