No es ningún secreto que a los hombres, por norma, les gustan las mujeres con pechos grandes. Existe una explicación científica relacionada con la lactancia, con la fertilidad y con miles de años de evolución. Lo cierto es que gustan, como se puede ver en nuestra colección de aspirantes o como, lo sentimos chicas, comprobáis cada fin de semana que os ponéis bonitos escotes en los que se clavan nuestras furtivas miradas. El tamaño importa, por eso cientos de miles de mujeres se someten a operaciones de aumento de pecho.
El tamaño importa... pero no siempre. Existen un montón de famosas que levantan pasiones sin tener los pechos grandes. Actrices, cantantes o modelos de todo el mundo consiguen situarse entre las mujeres más sexys del mundo sin necesidad de lucir escotes como los de Monica Bellucci, Fergie, Scarlett Johansson o, más exagerado, Keeley Hazell y Lucy Pinder. Son famosas que llaman la atención del colectivo masculino aunque sus tallas de sujetador sean la A o la B, cuyo equivalente en nuestro tallaje sería siempre inferior a la 90. Mujeres como Olivia Wilde, Keira Knightley, Rihanna o Kristen Bell demuestran que no sólo nos fijamos en eso para enamorarnos de ellas.
