Zapatero, primer líder europeo que visita Túnez tras la revuelta
Duba, El País
Tras su viaje por Catar y los Emiratos Árabes Unidos, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho una parada técnica en Madrid para salir hoy de nuevo de viaje. Si a última hora no se cancela, cuando su avión aterrice sobre las once de la mañana el presidente será el primer líder europeo que visita Túnez tras la huida del presidente Ben Ali como consecuencia de las manifestaciones del pueblo tunecino.
Zapatero tendrá ocasión de demostrar su apoyo al proceso de democratización del país norteafricano -país que encendió la mecha de la ola de cambio que vive el mundo islámico- en medio de la inestabilidad que vive el Gobierno de transición tunecino, que llevó al primer ministro, Mohamed Ghanuchi, a dimitir el pasado domingo. Zapatero puso ayer como modelo para los países árabes la transición española a la democracia. "Mi interés es escuchar y ayudar. Debemos estar ahí y España va a estar", afirmó durante su estancia en Dubai. De hecho el presidente está dispuesto a ofrecer expertos para la elaboración de una nueva Constitución u otro tipo de técnicos para las reformas políticas y económicas que se emprendan, han informado fuentes del Ejecutivo español a Europa Press.
La agenda de su viaje incluye entrevistas con las autoridades locales, los representantes de la oposición y los sectores reformistas, y a los responsables de las tres comisiones de reforma puestas en marcha para conocer la hoja de ruta marcada por las autoridades interinas. Pero por ahora, tal y como dijo ayer la ministra de Exteriores en el Senado, en la visita no está previsto ningún anuncio de contribución económica.
El presidente estará acompañado en este viaje por Trinidad Jiménez y por diversos expertos del ministerio de Exteriores para analizar la situación en el país, entre ellos la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez. La ministra de Exteriores, tras su paso esta semana por Ginebra -donde el Consejo de Derechos Humanos de la ONU analizó la situación en Libia- viajará dentro de dos semanas a Egipto con el mismo objetivo de apoyar la transición desde que Mubarak fuese derrocado.
Más inversiones del Golfo
Zapatero concluyó ayer su gira por el golfo Pérsico en Emiratos Árabes Unidos con una cascada de anuncios de contratos e inversiones para empresas españolas. El príncipe heredero del emirato de Abu Dabi, el jeque Mohamed bin Zayed al Nahyan, confirmó el lunes por la noche al presidente español que su país participará con 150 millones en la capitalización de una caja de ahorros, cuya identidad no se reveló. De esa cantidad, 100 millones ya estaban comprometidos y otros 50 se suscribirán a corto plazo.
Además, portavoces de La Moncloa hicieron pública la adjudicación a empresas españolas de contratos por valor de 1.400 millones de euros. Aunque estos contratos, de los que se han beneficiado empresas como Indra o Amper, se han materializado en los dos últimos meses, fuentes oficiales vincularon su adjudicación a los preparativos del viaje de Zapatero.
Se confirma así el carácter económico de la visita del jefe del Ejecutivo a dos de las monarquías petroleras del golfo Pérsico, Catar -que ha prometido invertir 3.000 millones en España- y Emiratos. Este segundo país ha sido en el último trienio el primer inversor extranjero en España, gracias a la compra de la petrolera Cepsa, por la que acaba de desembolsar 4.800 millones de dólares, que se suman a los 3.900 millones que invirtió en 2009.
Los dos Gobiernos difundieron un comunicado conjunto en el que anuncian la creación de un comité para impulsar las inversiones. Además, aunque el régimen emiratí está muy lejos de ser democrático, el comunicado señala que ambos países "siguen muy de cerca los acontecimientos" en el norte de África y en Oriente Próximo y "consideran que el proceso hacia la democracia, el desarrollo económico y la justicia social merecen respeto y apoyo, sin menoscabo del principio de no injerencia"; alusión esta última al temor de las monarquías petroleras a que alguien les diga cómo tienen que organizarse.
Zapatero visitó en Dubai la feria de alimentación del golfo Pérsico, en la que participan 123 empresas españolas, si bien en ninguno de los estand se servía alcohol y solo en uno de ellos se exponían derivados del cerdo.
Tras su viaje por Catar y los Emiratos Árabes Unidos, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho una parada técnica en Madrid para salir hoy de nuevo de viaje. Si a última hora no se cancela, cuando su avión aterrice sobre las once de la mañana el presidente será el primer líder europeo que visita Túnez tras la huida del presidente Ben Ali como consecuencia de las manifestaciones del pueblo tunecino.
Zapatero tendrá ocasión de demostrar su apoyo al proceso de democratización del país norteafricano -país que encendió la mecha de la ola de cambio que vive el mundo islámico- en medio de la inestabilidad que vive el Gobierno de transición tunecino, que llevó al primer ministro, Mohamed Ghanuchi, a dimitir el pasado domingo. Zapatero puso ayer como modelo para los países árabes la transición española a la democracia. "Mi interés es escuchar y ayudar. Debemos estar ahí y España va a estar", afirmó durante su estancia en Dubai. De hecho el presidente está dispuesto a ofrecer expertos para la elaboración de una nueva Constitución u otro tipo de técnicos para las reformas políticas y económicas que se emprendan, han informado fuentes del Ejecutivo español a Europa Press.
La agenda de su viaje incluye entrevistas con las autoridades locales, los representantes de la oposición y los sectores reformistas, y a los responsables de las tres comisiones de reforma puestas en marcha para conocer la hoja de ruta marcada por las autoridades interinas. Pero por ahora, tal y como dijo ayer la ministra de Exteriores en el Senado, en la visita no está previsto ningún anuncio de contribución económica.
El presidente estará acompañado en este viaje por Trinidad Jiménez y por diversos expertos del ministerio de Exteriores para analizar la situación en el país, entre ellos la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez. La ministra de Exteriores, tras su paso esta semana por Ginebra -donde el Consejo de Derechos Humanos de la ONU analizó la situación en Libia- viajará dentro de dos semanas a Egipto con el mismo objetivo de apoyar la transición desde que Mubarak fuese derrocado.
Más inversiones del Golfo
Zapatero concluyó ayer su gira por el golfo Pérsico en Emiratos Árabes Unidos con una cascada de anuncios de contratos e inversiones para empresas españolas. El príncipe heredero del emirato de Abu Dabi, el jeque Mohamed bin Zayed al Nahyan, confirmó el lunes por la noche al presidente español que su país participará con 150 millones en la capitalización de una caja de ahorros, cuya identidad no se reveló. De esa cantidad, 100 millones ya estaban comprometidos y otros 50 se suscribirán a corto plazo.
Además, portavoces de La Moncloa hicieron pública la adjudicación a empresas españolas de contratos por valor de 1.400 millones de euros. Aunque estos contratos, de los que se han beneficiado empresas como Indra o Amper, se han materializado en los dos últimos meses, fuentes oficiales vincularon su adjudicación a los preparativos del viaje de Zapatero.
Se confirma así el carácter económico de la visita del jefe del Ejecutivo a dos de las monarquías petroleras del golfo Pérsico, Catar -que ha prometido invertir 3.000 millones en España- y Emiratos. Este segundo país ha sido en el último trienio el primer inversor extranjero en España, gracias a la compra de la petrolera Cepsa, por la que acaba de desembolsar 4.800 millones de dólares, que se suman a los 3.900 millones que invirtió en 2009.
Los dos Gobiernos difundieron un comunicado conjunto en el que anuncian la creación de un comité para impulsar las inversiones. Además, aunque el régimen emiratí está muy lejos de ser democrático, el comunicado señala que ambos países "siguen muy de cerca los acontecimientos" en el norte de África y en Oriente Próximo y "consideran que el proceso hacia la democracia, el desarrollo económico y la justicia social merecen respeto y apoyo, sin menoscabo del principio de no injerencia"; alusión esta última al temor de las monarquías petroleras a que alguien les diga cómo tienen que organizarse.
Zapatero visitó en Dubai la feria de alimentación del golfo Pérsico, en la que participan 123 empresas españolas, si bien en ninguno de los estand se servía alcohol y solo en uno de ellos se exponían derivados del cerdo.