Hallan muestras de radiación de Japón en la lluvia de varios estados de EEUU
Washington, Agencias
La lluvia que cae en estados del noreste de EEUU como Massachusetts, Pensilvania o Virginia transporta pequeñas cantidades de radiación procedentes de la siniestrada central nuclear de Fukushima (Japón), informaron hoy medios locales.
Los departamentos de salud de esos estados han emitido sendas alertas en las que advierten a sus ciudadanos de que no beban el agua de la lluvia, aunque insisten en que el agua corriente no está contaminada y en que los niveles de radiactividad son mínimos y no entrañan ningún peligro para la salud pública.
La Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por sus siglas en inglés) confirmó en un comunicado que está analizando muestras de Pensilvania y Masachusets y que comienza a prepararse por si aparecieran en otros estados.
"Pese a que las elevaciones a corto plazo como estas no suponen preocupaciones para la salud, y se espera que los niveles hallados en la lluvia tengan una duración relativamente corta, la EPA ha tomado medidas para aumentar la supervisión de las precipitaciones y el agua corriente a nivel nacional", indicó la agencia.
California, Hawai, Washington, Colorado y Oregón eran, hasta ahora, los únicos estados que habían detectado partículas radiactivas procedentes del accidente nuclear provocado por el terremoto del 11 de marzo en Japón.
No obstante, las autoridades de Estados Unidos continúan descartando que la costa oeste del país, a 8.000 kilómetros de la planta de Fukushima, sufra niveles de radiación que supongan un riesgo para la salud.
Según la EPA, los estadounidenses están expuestos diariamente a niveles de radiación procedentes del sol o las piedras más de 100.000 veces superiores a los que han llegado desde Fukushima, y también reciben una exposición mucho más alta cuando toman un vuelo internacional.
Mientras, la compañía eléctrica Tepco (Tokio Electric Company) anunció hoy que ha encontrado pequeñas cantidades de plutonio en los terrenos de la central nuclear de Fukushima, donde hasta ahora sólo se habían detectado isótopos de yodo y cesio.
La lluvia que cae en estados del noreste de EEUU como Massachusetts, Pensilvania o Virginia transporta pequeñas cantidades de radiación procedentes de la siniestrada central nuclear de Fukushima (Japón), informaron hoy medios locales.
Los departamentos de salud de esos estados han emitido sendas alertas en las que advierten a sus ciudadanos de que no beban el agua de la lluvia, aunque insisten en que el agua corriente no está contaminada y en que los niveles de radiactividad son mínimos y no entrañan ningún peligro para la salud pública.
La Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por sus siglas en inglés) confirmó en un comunicado que está analizando muestras de Pensilvania y Masachusets y que comienza a prepararse por si aparecieran en otros estados.
"Pese a que las elevaciones a corto plazo como estas no suponen preocupaciones para la salud, y se espera que los niveles hallados en la lluvia tengan una duración relativamente corta, la EPA ha tomado medidas para aumentar la supervisión de las precipitaciones y el agua corriente a nivel nacional", indicó la agencia.
California, Hawai, Washington, Colorado y Oregón eran, hasta ahora, los únicos estados que habían detectado partículas radiactivas procedentes del accidente nuclear provocado por el terremoto del 11 de marzo en Japón.
No obstante, las autoridades de Estados Unidos continúan descartando que la costa oeste del país, a 8.000 kilómetros de la planta de Fukushima, sufra niveles de radiación que supongan un riesgo para la salud.
Según la EPA, los estadounidenses están expuestos diariamente a niveles de radiación procedentes del sol o las piedras más de 100.000 veces superiores a los que han llegado desde Fukushima, y también reciben una exposición mucho más alta cuando toman un vuelo internacional.
Mientras, la compañía eléctrica Tepco (Tokio Electric Company) anunció hoy que ha encontrado pequeñas cantidades de plutonio en los terrenos de la central nuclear de Fukushima, donde hasta ahora sólo se habían detectado isótopos de yodo y cesio.