Fuerzas de Gadafi atacan posiciones rebeldes en Libia
Bengasi, Agencias
Aviones de guerra libios atacaron el martes a las fuerzas rebeldes en el este del país, reforzando la ofensiva del Gobierno para recuperar terreno perdido en la insurrección contra el líder Muamar Gadafi.
Corresponsales de Reuters informaron de al menos cuatro ataques aéreos cerca de posiciones rebeldes en y alrededor de la ciudad petrolera de Ras Lanuf, en la costa mediterránea. Uno de los ataques alcanzó una casa de civiles.
En el oeste del país, artillería del Gobierno y tanques alcanzaron Zauiyah, la ciudad en manos rebeldes más cercana a la capital, Trípoli, destruyendo varias casas y dejando atrapados a los residentes.
Previamente, los rebeldes dijeron que habían rechazado una oferta del líder libio para negociar su salida del poder. Sin embargo, el Gobierno niega tales conversaciones y parece estar desplegando un robusto esfuerzo militar para contener el levantamiento.
En el frente internacional, Reino Unido y Francia encabezaron una campaña en Naciones Unidas para que se establezca una zona de exclusión aérea sobre Libia.
El Gobierno de Estados Unidos está afrontando la presión de algunos legisladores que demandan una intervención directa, diciendo que primero debe evaluar las implicaciones de una acción militar sobre el desértico estado petrolero.
Los ataques aéreos del martes llegaron a los rebeldes entre la ciudades costeras de Ras Lanuf y Bin Jauad, a unos 550 kilómetros al este de Trípoli y emplazamiento de terminales petroleros.
Uno de los ataques derribó una casa en un área residencial de Ras. Muchas casas, incluyendo una de las afectadas por los ataques, parecían estar siendo evacuadas y no había información inmediata sobre víctimas.
Otros ataques apuntaron a posiciones rebeldes en las afueras del terminal petrolero de Ras Lanuf.
Las fuerzas de Gadafi también realizaron ataques con tanques y artillería el martes para recapturar Zauiyah, a unos 50 kilómetros al oeste de Trípoli, cerca de una importante refinería, según un residente y una estación de televisión árabe.
El residente dijo que las fuerzas del Gobierno estaban intentando destruir la ciudad.
"Muchos edificios están completamente destruidos, incluyendo hospitales, líneas de electricidad y generadores", dijo. "La gente no puede huir".
Un portavoz del Gobierno, Musa Ibrahim, dijo que las fuerzas de Gadafi tenían el control de la ciudad, añadiendo, sin embargo, que un pequeño grupo de combatientes todavía oponía resistencia.
AYUDA HUMANITARIA
La coordinadora de asistencia de la ONU, Valerie Amos, dijo que más de un millón de personas que han huido o se encuentran en el país necesitan ayuda humanitaria.
"Las organizaciones humanitarias necesitan acceso urgente ahora", afirmó. "La gente está herida y muriéndose y necesita ayuda inmediatamente", agregó.
La ONU pidió apoyo financiero por 160 millones de dólares (114 millones de euros) para financiar una operación que ofrezca refugio, alimento y medicinas durante los próximos tres meses.
El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, dijo el lunes que Londres está trabajando de cerca con sus socios sobre los elementos de una resolución para establecer una zona de exclusión aérea.
Una fuente diplomática francesa confirmó que París está trabajando con sus socios en la ONU sobre una resolución al respecto.
Los estados del golfo Pérsico pidieron una zona de exclusión aérea y una reunión de urgencia de la Liga Árabe.
El secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, de visita en Afganistán, advirtió de que cualquier acción en Libia "deberá ser el resultado de una aprobación internacional".
La Casa Blanca dijo que todas las opciones están sobre la mesa, incluyendo la de armar a los rebeldes.
Rusia, miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y por tanto con poder de veto, declaró que se opone a una intervención militar extranjera.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, recalcó la necesidad de que haya una autorización de las Naciones Unidas.
"No me puedo imaginar que la comunidad internacional y Naciones Unidas se queden quietas si Gadafi y su régimen siguen atacando a su propio pueblo", aseguró.
El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, declaró que una intervención militar en Libia debería ser "el último recurso" y siempre con la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU, el Parlamento español y, con especial atención, el Consejo de la UE.
"La posición común europea adquiere un valor singular. Estamos hablando del Magreb, estamos hablando del Mediterráneo", dijo Zapatero en una rueda de prensa conjunta con su homólogo chileno, Sebastián Piñera.
"Ha habido ya tantos pronunciamientos de la comunidad internacional hacia lo que está haciendo el régimen de Gadafi que debería ser suficiente para que tomara nota de que el destino a ninguna parte es un destino que debe concluir cuanto antes", agregó.
La OTAN ya ha comenzado una vigilancia aérea permanente del cielo libio con aviones de reconocimiento Awacs, según el embajador estadounidense ante la Alianza Atlántica.
En la ciudad de Misrata, controlada por los rebeldes, los heridos están siendo atendidos en el suelo de los hospitales debido a la escasez de instalaciones médicas, dijo un vecino.
Misrata es la mayor ciudad en el oeste que no está en manos de Gadafi y su resistencia contra una milicia comandada por uno de sus hijos la ha convertido en un símbolo del desafío al líder libio.
Los precios del crudo Brent subieron a más de 118 dólares el barril el lunes antes de volver a retroceder hacia 115 dólares, y el petróleo estadounidense llegó a su máximo nivel desde septiembre del 2008.
Corresponsales de Reuters informaron de al menos cuatro ataques aéreos cerca de posiciones rebeldes en y alrededor de la ciudad petrolera de Ras Lanuf, en la costa mediterránea. Uno de los ataques alcanzó una casa de civiles.
En el oeste del país, artillería del Gobierno y tanques alcanzaron Zauiyah, la ciudad en manos rebeldes más cercana a la capital, Trípoli, destruyendo varias casas y dejando atrapados a los residentes.
Previamente, los rebeldes dijeron que habían rechazado una oferta del líder libio para negociar su salida del poder. Sin embargo, el Gobierno niega tales conversaciones y parece estar desplegando un robusto esfuerzo militar para contener el levantamiento.
En el frente internacional, Reino Unido y Francia encabezaron una campaña en Naciones Unidas para que se establezca una zona de exclusión aérea sobre Libia.
El Gobierno de Estados Unidos está afrontando la presión de algunos legisladores que demandan una intervención directa, diciendo que primero debe evaluar las implicaciones de una acción militar sobre el desértico estado petrolero.
Los ataques aéreos del martes llegaron a los rebeldes entre la ciudades costeras de Ras Lanuf y Bin Jauad, a unos 550 kilómetros al este de Trípoli y emplazamiento de terminales petroleros.
Uno de los ataques derribó una casa en un área residencial de Ras. Muchas casas, incluyendo una de las afectadas por los ataques, parecían estar siendo evacuadas y no había información inmediata sobre víctimas.
Otros ataques apuntaron a posiciones rebeldes en las afueras del terminal petrolero de Ras Lanuf.
Las fuerzas de Gadafi también realizaron ataques con tanques y artillería el martes para recapturar Zauiyah, a unos 50 kilómetros al oeste de Trípoli, cerca de una importante refinería, según un residente y una estación de televisión árabe.
El residente dijo que las fuerzas del Gobierno estaban intentando destruir la ciudad.
"Muchos edificios están completamente destruidos, incluyendo hospitales, líneas de electricidad y generadores", dijo. "La gente no puede huir".
Un portavoz del Gobierno, Musa Ibrahim, dijo que las fuerzas de Gadafi tenían el control de la ciudad, añadiendo, sin embargo, que un pequeño grupo de combatientes todavía oponía resistencia.
AYUDA HUMANITARIA
La coordinadora de asistencia de la ONU, Valerie Amos, dijo que más de un millón de personas que han huido o se encuentran en el país necesitan ayuda humanitaria.
"Las organizaciones humanitarias necesitan acceso urgente ahora", afirmó. "La gente está herida y muriéndose y necesita ayuda inmediatamente", agregó.
La ONU pidió apoyo financiero por 160 millones de dólares (114 millones de euros) para financiar una operación que ofrezca refugio, alimento y medicinas durante los próximos tres meses.
El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, dijo el lunes que Londres está trabajando de cerca con sus socios sobre los elementos de una resolución para establecer una zona de exclusión aérea.
Una fuente diplomática francesa confirmó que París está trabajando con sus socios en la ONU sobre una resolución al respecto.
Los estados del golfo Pérsico pidieron una zona de exclusión aérea y una reunión de urgencia de la Liga Árabe.
El secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, de visita en Afganistán, advirtió de que cualquier acción en Libia "deberá ser el resultado de una aprobación internacional".
La Casa Blanca dijo que todas las opciones están sobre la mesa, incluyendo la de armar a los rebeldes.
Rusia, miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y por tanto con poder de veto, declaró que se opone a una intervención militar extranjera.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, recalcó la necesidad de que haya una autorización de las Naciones Unidas.
"No me puedo imaginar que la comunidad internacional y Naciones Unidas se queden quietas si Gadafi y su régimen siguen atacando a su propio pueblo", aseguró.
El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, declaró que una intervención militar en Libia debería ser "el último recurso" y siempre con la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU, el Parlamento español y, con especial atención, el Consejo de la UE.
"La posición común europea adquiere un valor singular. Estamos hablando del Magreb, estamos hablando del Mediterráneo", dijo Zapatero en una rueda de prensa conjunta con su homólogo chileno, Sebastián Piñera.
"Ha habido ya tantos pronunciamientos de la comunidad internacional hacia lo que está haciendo el régimen de Gadafi que debería ser suficiente para que tomara nota de que el destino a ninguna parte es un destino que debe concluir cuanto antes", agregó.
La OTAN ya ha comenzado una vigilancia aérea permanente del cielo libio con aviones de reconocimiento Awacs, según el embajador estadounidense ante la Alianza Atlántica.
En la ciudad de Misrata, controlada por los rebeldes, los heridos están siendo atendidos en el suelo de los hospitales debido a la escasez de instalaciones médicas, dijo un vecino.
Misrata es la mayor ciudad en el oeste que no está en manos de Gadafi y su resistencia contra una milicia comandada por uno de sus hijos la ha convertido en un símbolo del desafío al líder libio.
Los precios del crudo Brent subieron a más de 118 dólares el barril el lunes antes de volver a retroceder hacia 115 dólares, y el petróleo estadounidense llegó a su máximo nivel desde septiembre del 2008.