El régimen sirio, impotente ante la protesta que se extiende a todo el país

Damasco, Agencias
El gobierno sirio liberó a más de 250 presos políticos el viernes por la noche tras una jornada de manifestaciones en todo el país, que las medidas anunciadas por el régimen del presidente Bachar al Assad y la sangrienta represión de las fuerzas de seguridad no logran frenar.

A pesar de las concesiones del gobierno y de la represión, un nuevo llamamiento a una "revuelta popular" en todas las provincias siria comenzó a circular este sábado en la red social Facebook.

Sin embargo, al mediodía, no se apreció ningún manifestante, un día después de que cientos de personas desfilaran por las principales ciudades del país.

En esta atmósfera de revuelta, "las autoridades liberaron a 260 detenidos, en gran mayoría islamistas, pero también 14 kurdos, en un gesto que se inscribe dentro de las promesas que se habían anunciado recientemente para mejorar las libertades públicas en Siria", declaró a la AFP Abdel Karem Rihaui, presidente de la Liga Siria de Defensa de los Derechos Humanos en Damasco. Rihaui pidió a los responsables del país a "completar esta medida liberando a los otros detenidos políticos todavía tras las rejas".

El defensor de los derechos humanos precisó que la mayoría de los prisioneros liberados purgaron un tercio de su pena.

Por su parte, el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos basado en Londres (OSDH), Rami Abdelrahman, explicó por teléfono que "las autoridades sirias soltaron el viernes por la noche a más de 200 personas de la cárcel de Sednaya, en gran mayoría islamistas, después de que haber firmado una petición de liberación".

Abdelrahman dijo que la información se la había transmitido Sirin Juri, una abogada siria defensora de los derechos humanos.

El 5 de julio de 2008, una revuelta en esa prisión, que cuenta con alrededor de 10.000 detenidos, causó 17 muertos entre los prisioneros y 5 miembros de la policía militar.

El régimen reprimió, a veces de manera sangrienta, a los islamistas que protestaban contra su poder y arrestó a numerosos militantes kurdos que reclamaban derechos para esta población que vive en Sednaya, a 30 kilómetros al norte de Damasco.

El responsable del Observatorio, en cambio, lamentó que muchas personas detenidas en las recientes manifestantes contra el régimen de Al Assad sigan retenidas por los servicios de seguridad, como la joven estudiante y bloguera, Ahmad Khadifi, recluida desde el 23 de marzo, y Mohammad Houriyé, detenido el 15 de marzo.

Las autoridades sirias anunciaron el jueves las liberaciones. Damasco, además, indicó que se plantea anular el estado de emergencia instaurado en 1963.

Siria también prometió medidas contra la corrupción, al día siguiente de las manifestaciones reprimidas en el sur, que dejaron 100 muertos, según los militantes y 55, de acuerdo con Amnistía Internacional.

Según un responsable sirio, las protestas causaron 13 muertos, entre los que se encuentran dos bomberos y un funcionario, mientras que las organizaciones de derechos humanos afirman que 25 manifestantes perdieron la vida.

El responsable sirio precisó que 10 personas murieron entre los congregados en Sanamein, en el sur, en un enfrentamiento con el ejército, mientras que un guardia de un centro militar murió en manos de manifestantes contra el régimen en Homs, a 160 kilómetros al norte de Damasco.

El periódico gubernamental Teshrin explicó este sábado que, en Sanamein, un "grupo armado atacó el cuartel general del ejército popular y varios agresores murieron", sin precisar cifras.

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