Desertor da pistas que conducen a muerte de jefe medio FARC
Bogotá, Agencias
Un desertor de las FARC, quien cobrará una jugosa recompensa de hasta 1,8 millón de dólares, dio datos claves al ejército para atrapar a un comandante medio de esa guerrilla quien murió en un enfrentamiento, aseguraron el lunes las autoridades.
El rebelde muerto fue descrito por el ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, y los comandantes militares y de policía como una pieza fundamental en la seguridad de Alfonso Cano, máximo jefe de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Alfonso Cano también caerá", dijo Rivera en una conferencia de prensa conjunta con los mandos militares y de policía en la sede del ministerio. "Estamos cerrando el cerco", aseguró Rivera, subrayando, sin embargo, que no existía un ánimo "triunfalista" entre las fuerzas militares.
El comandante del ejército Alejandro Navas explicó que un desmovilizado de las FARC, cuya identidad no fue revelada por razones de seguridad, aportó datos que llevaron hasta Arquímides Muñoz, alias "Jerónimo Galeano", jefe del llamado "comando conjunto central", uno de los siete grandes bloques que conforman las FARC, ocupándose cada uno de distintas regiones del país.
El bloque liderado por Muñoz opera en la zona de los departamentos de Tolima, Huila, Valle del Cauca y Cauca, en el centro y suroeste del país, donde se supone que tradicionalmente se ha movido Alfonso Cano.
Muñoz, de 57 años, murió el domingo por la mañana en un combate con el ejército en una zona rural de Aipe, en el departamento de Huila, unos 200 kilómetros al suroeste de Bogotá, dijo el ministro Rivera. Agregó que tarde en la noche del domingo recibieron del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de la Fiscalía General la confirmación de la identidad del rebelde al revisar sus huellas digitales.
En los combates también murió una guerrillera y un soldado, indicó el ministro. En el sitio de los combates los militares encontraron un computador portátil, seis fusiles y cinco millones de pesos en efectivo (unos 2.600 dólares).
El general Navas dijo que por ser Muñoz un mando de segundo nivel --por debajo del llamado secretariado de siete miembros que encabeza Cano-- las recompensas que ofrecen las autoridades por esos rebeldes oscilan entre 2.500 millones de pesos a 3.500 millones de pesos (entre 1,3 y 1,8 millón de dólares).
Un comité técnico, dijo Navas, será el que decida cuánto de esa recompensa recibirá el desmovilizado de las FARC que dio datos sobre Muñoz. El oficial no indicó cuándo podría tomarse esa decisión, pero en casos pasados han transcurrido varios meses.
El ministro Rivera dijo que Muñoz, quien estaba al frente del comando central desde 2004, tenía pendientes al menos 12 órdenes de captura por homicidio y secuestro.
Un desertor de las FARC, quien cobrará una jugosa recompensa de hasta 1,8 millón de dólares, dio datos claves al ejército para atrapar a un comandante medio de esa guerrilla quien murió en un enfrentamiento, aseguraron el lunes las autoridades.
El rebelde muerto fue descrito por el ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, y los comandantes militares y de policía como una pieza fundamental en la seguridad de Alfonso Cano, máximo jefe de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Alfonso Cano también caerá", dijo Rivera en una conferencia de prensa conjunta con los mandos militares y de policía en la sede del ministerio. "Estamos cerrando el cerco", aseguró Rivera, subrayando, sin embargo, que no existía un ánimo "triunfalista" entre las fuerzas militares.
El comandante del ejército Alejandro Navas explicó que un desmovilizado de las FARC, cuya identidad no fue revelada por razones de seguridad, aportó datos que llevaron hasta Arquímides Muñoz, alias "Jerónimo Galeano", jefe del llamado "comando conjunto central", uno de los siete grandes bloques que conforman las FARC, ocupándose cada uno de distintas regiones del país.
El bloque liderado por Muñoz opera en la zona de los departamentos de Tolima, Huila, Valle del Cauca y Cauca, en el centro y suroeste del país, donde se supone que tradicionalmente se ha movido Alfonso Cano.
Muñoz, de 57 años, murió el domingo por la mañana en un combate con el ejército en una zona rural de Aipe, en el departamento de Huila, unos 200 kilómetros al suroeste de Bogotá, dijo el ministro Rivera. Agregó que tarde en la noche del domingo recibieron del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de la Fiscalía General la confirmación de la identidad del rebelde al revisar sus huellas digitales.
En los combates también murió una guerrillera y un soldado, indicó el ministro. En el sitio de los combates los militares encontraron un computador portátil, seis fusiles y cinco millones de pesos en efectivo (unos 2.600 dólares).
El general Navas dijo que por ser Muñoz un mando de segundo nivel --por debajo del llamado secretariado de siete miembros que encabeza Cano-- las recompensas que ofrecen las autoridades por esos rebeldes oscilan entre 2.500 millones de pesos a 3.500 millones de pesos (entre 1,3 y 1,8 millón de dólares).
Un comité técnico, dijo Navas, será el que decida cuánto de esa recompensa recibirá el desmovilizado de las FARC que dio datos sobre Muñoz. El oficial no indicó cuándo podría tomarse esa decisión, pero en casos pasados han transcurrido varios meses.
El ministro Rivera dijo que Muñoz, quien estaba al frente del comando central desde 2004, tenía pendientes al menos 12 órdenes de captura por homicidio y secuestro.