Débil paro de COB detrás de manifestación de universitarios en Bolivia
La Paz, Abi
Estudiantes de la universidad pública se lanzaron masivamente el lunes a las calles de La Paz y coincidieron con esmirriadas columnas de trabajadores que galvanizados por la matriz sindical Central Obrera Boliviana (COB) expresaron su rechazo al incremento de salarios de 10%, ordenado por el gobierno del presidente Evo Morales.
Susceptible ante la posibilidad que fueran vulnerados los principios de su autonomía administrativa, la Universidad estatal desplegó marchas por las calles de La Paz en el primero de los dos días de un paro general convocado por la COB que tuvo escaso acatamiento, pese a salir desde muy temprano del lunes desde el sector de Senkata, en la ciudad de El Alto.
La Universidad fiscal boliviana sintió que su autonomía corría riesgo por la existencia, desde 2007, de un proyecto del gobierno de Evo Morales para la creación de un seguro universal de salud que, según la Confederación de la Universidad Bolivia, apuntaría a insumir el Seguro Universitario.
Este extremo fue reiteradamente negado por el ministro de Comunicaciones, Iván Canelas que reflejó, por contrapartida, la decisión de la administración Morales de que todas las entidades que reciben recursos del Estado rindan cuentas de manera pública de su manejo, así sean autónomas, como lo establece la carta política boliviana.
La medida de fuerza, 48 horas de paro nacional, adherida por los sindicatos bolivianos, tomó fuerza sólo en la medida y vigor del reclamo universitario en defensa de la autonomía conquistada hace más de 70 años y que el Gobierno insistió en que se respetará plenamente.
La protesta, de la que se bajaron campesinos, fabriles y mineros, base de su organización, y que en cambio apuntalaron gremios de profesores, uno de los 4 sectores, junto a militares policías y salubristas, beneficiados por el alza salarial, fue evaluada por Morales hacia el mediodía durante una rueda de prensa dictada en el presidencial Palacio Quemado.
"En el fondo no hay paro de la COB. Tal vez algunas unidades educativas de manera muy aislada", admitió el gobernante que resaltó que "inclusive algunas federación departamentales del Magisterio dijeron públicamente que no iban a ir al paro".
Los sindicatos de chóferes, que las últimas semanas presionaron por un incremento de tarifas, tampoco participaron en el paro de la COB, cuyo líder, Pedro Montes, demanda, además, la reactivación del aparato productivo boliviano y la anulación del decreto 21060 que hace 26 años instaló a Bolivia la economía de mercado y abrió las puertas de las empresas públicas, incluso las estratégicas, al capital privado nacional e internacional.
La medida de fuerza de la COB paralizó parcialmente la ciudad de Trinidad, capital del departamento Beni (nordeste), mas no fue contundente en Santa Cruz (este), pulmón económico del país, donde los servicios de salud funcionaron con normalidad, tanto como el Parque Industrial, siempre según despachos de prensa.
Fruto de la marcha universitaria, los servicios de transporte público en La Paz, sede de gobierno, mermaron sensiblemente y en la ciudad vecina de El Alto las actividades rayaron en la normalidad, tanto así que las labores escolares se desarrollaron a plenitud, según reportes de la radio y televisión locales.
El tráfico vehicular se restableció en La Paz entrada la noche.
Esta sensación de normalidad se calcó en la ciudad central de Cochabamba, donde las protestas de universitarios no alcanzaron para alterar las actividades públicas y privadas en general.
Lo propio en otras ciudades capitales del resto del país.
"Hemos estado viendo la marcha y hemos comprobado que más del 50% de los asistentes son estudiantes universitarios y se notó la presencia de pocos sectores afiliados" a la COB, afirmó el ministro de Comunicación Iván Canelas.
El funcionario insistió en que, de todas formas el diálogo con la COB está abierto.
El ministro de Trabajo, Félix Rojas, insistió en que el Gobierno, que subió el salario básico a 815 bolivianos, el más alto en la historia económica del país, no está en condiciones de elevar el salario más allá del 10% dispuesto.
Por su lado Montes informó que el paro movilizado continuará el martes, como se aprobó la pasada semana, y ratificó que se evaluarán nuevas medidas de presión en el ampliado nacional del miércoles en rechazo al incremento salarial del 10% y 20% al salario mínimo.
"Tenemos información que el paro de 48 horas y movilizaciones a nivel nacional se cumple en todo el país y se completará este martes. La medida no se realiza en un cien por ciento pero la gran mayoría está acatando. El miércoles el ampliado nacional hará una evaluación y determinará los próximos pasos para exigir que atienda las demandas de la COB ", explicó.
Ratificó que la COB no levantará la medida hasta que el Gobierno no abrogue el decreto de incremento salarial y atienda otras demandas, como la reactivación del aparato productivo.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Federación Sindical de trabajadores Mineros de Bolivia, Guido Mitma, afirmó que el paro reflejó "el descontento de las organizaciones sindicales en contra de las políticas del Gobierno con un irrisorio incremento del 10%, que de ninguna manera compensa el alza del costo de vida".
La Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB) reconoció que el paro movilizado, decretado por la COB, en rechazo al incremento salarial, no fue contundente, sino parcial.
"Por la forma intempestiva como se decidido el paro de 48 horas estaba previsto que no iba a tener la contundencia que tuvo el paro anterior de 24 horas. Ha sido un paro parcial. En muchas federaciones del magisterio urbano han convocado a asambleas para determinar si se acata o no y muchas de manera mayoritaria han decidió no acatar, aunque sí han dispuesto salir en movilizaciones con sus centrales obreras departamentales o regionales", informó el principal dirigente de la CTEUB, Federico Pinaya.
Estudiantes de la universidad pública se lanzaron masivamente el lunes a las calles de La Paz y coincidieron con esmirriadas columnas de trabajadores que galvanizados por la matriz sindical Central Obrera Boliviana (COB) expresaron su rechazo al incremento de salarios de 10%, ordenado por el gobierno del presidente Evo Morales.
Susceptible ante la posibilidad que fueran vulnerados los principios de su autonomía administrativa, la Universidad estatal desplegó marchas por las calles de La Paz en el primero de los dos días de un paro general convocado por la COB que tuvo escaso acatamiento, pese a salir desde muy temprano del lunes desde el sector de Senkata, en la ciudad de El Alto.
La Universidad fiscal boliviana sintió que su autonomía corría riesgo por la existencia, desde 2007, de un proyecto del gobierno de Evo Morales para la creación de un seguro universal de salud que, según la Confederación de la Universidad Bolivia, apuntaría a insumir el Seguro Universitario.
Este extremo fue reiteradamente negado por el ministro de Comunicaciones, Iván Canelas que reflejó, por contrapartida, la decisión de la administración Morales de que todas las entidades que reciben recursos del Estado rindan cuentas de manera pública de su manejo, así sean autónomas, como lo establece la carta política boliviana.
La medida de fuerza, 48 horas de paro nacional, adherida por los sindicatos bolivianos, tomó fuerza sólo en la medida y vigor del reclamo universitario en defensa de la autonomía conquistada hace más de 70 años y que el Gobierno insistió en que se respetará plenamente.
La protesta, de la que se bajaron campesinos, fabriles y mineros, base de su organización, y que en cambio apuntalaron gremios de profesores, uno de los 4 sectores, junto a militares policías y salubristas, beneficiados por el alza salarial, fue evaluada por Morales hacia el mediodía durante una rueda de prensa dictada en el presidencial Palacio Quemado.
"En el fondo no hay paro de la COB. Tal vez algunas unidades educativas de manera muy aislada", admitió el gobernante que resaltó que "inclusive algunas federación departamentales del Magisterio dijeron públicamente que no iban a ir al paro".
Los sindicatos de chóferes, que las últimas semanas presionaron por un incremento de tarifas, tampoco participaron en el paro de la COB, cuyo líder, Pedro Montes, demanda, además, la reactivación del aparato productivo boliviano y la anulación del decreto 21060 que hace 26 años instaló a Bolivia la economía de mercado y abrió las puertas de las empresas públicas, incluso las estratégicas, al capital privado nacional e internacional.
La medida de fuerza de la COB paralizó parcialmente la ciudad de Trinidad, capital del departamento Beni (nordeste), mas no fue contundente en Santa Cruz (este), pulmón económico del país, donde los servicios de salud funcionaron con normalidad, tanto como el Parque Industrial, siempre según despachos de prensa.
Fruto de la marcha universitaria, los servicios de transporte público en La Paz, sede de gobierno, mermaron sensiblemente y en la ciudad vecina de El Alto las actividades rayaron en la normalidad, tanto así que las labores escolares se desarrollaron a plenitud, según reportes de la radio y televisión locales.
El tráfico vehicular se restableció en La Paz entrada la noche.
Esta sensación de normalidad se calcó en la ciudad central de Cochabamba, donde las protestas de universitarios no alcanzaron para alterar las actividades públicas y privadas en general.
Lo propio en otras ciudades capitales del resto del país.
"Hemos estado viendo la marcha y hemos comprobado que más del 50% de los asistentes son estudiantes universitarios y se notó la presencia de pocos sectores afiliados" a la COB, afirmó el ministro de Comunicación Iván Canelas.
El funcionario insistió en que, de todas formas el diálogo con la COB está abierto.
El ministro de Trabajo, Félix Rojas, insistió en que el Gobierno, que subió el salario básico a 815 bolivianos, el más alto en la historia económica del país, no está en condiciones de elevar el salario más allá del 10% dispuesto.
Por su lado Montes informó que el paro movilizado continuará el martes, como se aprobó la pasada semana, y ratificó que se evaluarán nuevas medidas de presión en el ampliado nacional del miércoles en rechazo al incremento salarial del 10% y 20% al salario mínimo.
"Tenemos información que el paro de 48 horas y movilizaciones a nivel nacional se cumple en todo el país y se completará este martes. La medida no se realiza en un cien por ciento pero la gran mayoría está acatando. El miércoles el ampliado nacional hará una evaluación y determinará los próximos pasos para exigir que atienda las demandas de la COB ", explicó.
Ratificó que la COB no levantará la medida hasta que el Gobierno no abrogue el decreto de incremento salarial y atienda otras demandas, como la reactivación del aparato productivo.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Federación Sindical de trabajadores Mineros de Bolivia, Guido Mitma, afirmó que el paro reflejó "el descontento de las organizaciones sindicales en contra de las políticas del Gobierno con un irrisorio incremento del 10%, que de ninguna manera compensa el alza del costo de vida".
La Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB) reconoció que el paro movilizado, decretado por la COB, en rechazo al incremento salarial, no fue contundente, sino parcial.
"Por la forma intempestiva como se decidido el paro de 48 horas estaba previsto que no iba a tener la contundencia que tuvo el paro anterior de 24 horas. Ha sido un paro parcial. En muchas federaciones del magisterio urbano han convocado a asambleas para determinar si se acata o no y muchas de manera mayoritaria han decidió no acatar, aunque sí han dispuesto salir en movilizaciones con sus centrales obreras departamentales o regionales", informó el principal dirigente de la CTEUB, Federico Pinaya.