Berlusconi comparece ante un tribunal por primera vez en ocho años
Roma, Agencias
El jefe del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, criticado por la adopción de leyes que le permiten eludir a la justicia, compareció este lunes por primera vez en ocho años ante un tribunal en Milán (norte del país), con motivo de una audiencia preliminar.
Berlusconi, que permaneció menos de dos horas con los jueces, fue aclamado al término de la audiencia por un centenar de simpatizantes que gritaban "Silvio, Silvio" y "hip hip hurra" frente a la sede del tribunal.
El jefe de Gobierno anunció que asistirá a la próxima audiencia, fijada para el 4 de abril.
"Todo salió bien, me preparo para el 4 de abril", dijo mientras se asomaba de la ventana de su automóvil.
El multimillonario político, protagonista en estos días de un escándalo sexual sin precedentes por las acusaciones de prostitución de menor y abuso de poder, no quiso pronunciarse sobre ese tema.
"Ese es otro proceso", tranzó.
La primera comparecencia de Berlusconi en ocho años ante los jueces forma parte de su nueva estrategia de defensa, decidida por su pelotón de abogados, entre ellos varios parlamentarios.
Berlusconi debe ser juzgado por fraude fiscal, abuso de confianza y falsa contabilidad por la adquisición de derechos televisivos a las grandes productoras estadounidenses por parte de Mediatrade, una sociedad de su imperio de telecomunicaciones.
El jefe de Gobierno no hizo declaraciones ante los jueces pero si saludó con un apretón de manos a uno de los fiscales, Fabio De Pasquale, a quien había atacado con dureza hasta hace pocos meses.
Los militantes de su partido, Pueblo de la Libertad, se congregaron desde hace varios días ante el tribunal para gritar consignas a su favor y denunciar a los jueces por usar la justicia con fines políticos.
"La política en las urnas, fuera de los tribunales" y "Silvio, resiste, resiste", clamaban.
"Lo atacan jueces politizados", aseguró a AFP Giovanni Esposito, de 46 años, comerciante y miembro del PDL.
Algunos militantes de la oposición, entre ellos Luca Ragone, de 28 años, del partido Italia de los Valores, fundado por el líder anticorrupción Antonio Di Pietro, enemigo histórico de Berlusconi, dudan de que el primer ministro vaya a asistir a todas las audiencias.
"Una cosa son las audiencias preliminares y otra el juicio", recalcó.
La última vez que Berlusconi se presentó ante los jueces fue en junio del 2003 por el proceso SME, la venta del grupo agroalimentario italiano al industrial Carlo De Benedetti, por el que fue absuelto cuatro años después.
Berlusconi se suele defender a través de la prensa y aseguró el domingo que desde que entró en política en 1994 no se ocupa de sus negocios.
"Me alejé de las empresas que fundé", contó al canal privado de televisión Canale Cinque, en una entrevista en la que atacó de nuevo a los jueces por "ser comunistas".
"En Italia el comunismo no ha cambiado, hay gente que emplea el código penal como instrumento de lucha ideológica", dijo.
Silvio Berlusconi ha sido condenado en el pasado a 6 años y 5 meses de cárcel por corrupción, falso balance y financiación ilícita de partidos políticos. Fue absuelto o el delito prescribió.
El jefe del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, criticado por la adopción de leyes que le permiten eludir a la justicia, compareció este lunes por primera vez en ocho años ante un tribunal en Milán (norte del país), con motivo de una audiencia preliminar.
Berlusconi, que permaneció menos de dos horas con los jueces, fue aclamado al término de la audiencia por un centenar de simpatizantes que gritaban "Silvio, Silvio" y "hip hip hurra" frente a la sede del tribunal.
El jefe de Gobierno anunció que asistirá a la próxima audiencia, fijada para el 4 de abril.
"Todo salió bien, me preparo para el 4 de abril", dijo mientras se asomaba de la ventana de su automóvil.
El multimillonario político, protagonista en estos días de un escándalo sexual sin precedentes por las acusaciones de prostitución de menor y abuso de poder, no quiso pronunciarse sobre ese tema.
"Ese es otro proceso", tranzó.
La primera comparecencia de Berlusconi en ocho años ante los jueces forma parte de su nueva estrategia de defensa, decidida por su pelotón de abogados, entre ellos varios parlamentarios.
Berlusconi debe ser juzgado por fraude fiscal, abuso de confianza y falsa contabilidad por la adquisición de derechos televisivos a las grandes productoras estadounidenses por parte de Mediatrade, una sociedad de su imperio de telecomunicaciones.
El jefe de Gobierno no hizo declaraciones ante los jueces pero si saludó con un apretón de manos a uno de los fiscales, Fabio De Pasquale, a quien había atacado con dureza hasta hace pocos meses.
Los militantes de su partido, Pueblo de la Libertad, se congregaron desde hace varios días ante el tribunal para gritar consignas a su favor y denunciar a los jueces por usar la justicia con fines políticos.
"La política en las urnas, fuera de los tribunales" y "Silvio, resiste, resiste", clamaban.
"Lo atacan jueces politizados", aseguró a AFP Giovanni Esposito, de 46 años, comerciante y miembro del PDL.
Algunos militantes de la oposición, entre ellos Luca Ragone, de 28 años, del partido Italia de los Valores, fundado por el líder anticorrupción Antonio Di Pietro, enemigo histórico de Berlusconi, dudan de que el primer ministro vaya a asistir a todas las audiencias.
"Una cosa son las audiencias preliminares y otra el juicio", recalcó.
La última vez que Berlusconi se presentó ante los jueces fue en junio del 2003 por el proceso SME, la venta del grupo agroalimentario italiano al industrial Carlo De Benedetti, por el que fue absuelto cuatro años después.
Berlusconi se suele defender a través de la prensa y aseguró el domingo que desde que entró en política en 1994 no se ocupa de sus negocios.
"Me alejé de las empresas que fundé", contó al canal privado de televisión Canale Cinque, en una entrevista en la que atacó de nuevo a los jueces por "ser comunistas".
"En Italia el comunismo no ha cambiado, hay gente que emplea el código penal como instrumento de lucha ideológica", dijo.
Silvio Berlusconi ha sido condenado en el pasado a 6 años y 5 meses de cárcel por corrupción, falso balance y financiación ilícita de partidos políticos. Fue absuelto o el delito prescribió.