Arabia Saudí: No serán toleradas las manifestaciones
Las manifestaciones no serán toleradas en Arabia Saudí y sus fuerzas de seguridad actuarán contra cualquiera que participe en ellas, anunció el sábado el Ministerio del Interior.
Un día antes del anuncio aproximadamente 100 miembros de la minoría chií realizaron una protesta en la región oriental del reino.
La advertencia fue otro intento por parte de Arabia Saudí de adelantarse a los acontecimientos y la agitación callejera que ha barrido el mundo árabe en los últimos meses. la semana pasada, el gobierno anunció un plan económico sin precedentes por valor de unos 36.000 millones de dólares que dará a los saudíes hipotecas sin interés alguno, compensaciones por desempleo y condonaciones de sus deudas.
El Ministerio del Interior dijo que las autoridades del reino han prohibido todas las manifestaciones porque son contrarias a la ley islámica y los valores de la sociedad, y agregó que algunas personas han intentado eludir la ley "para alcanzar objetivos ilegítimos".
Las fuerzas de seguridad fueron autorizadas a actuar contra cualquiera que viole la prohibición, dijo la nota.
La manifestación tuvo lugar tras las plegarias del viernes en la población oriental de Hofuf, donde los chiíes exigieron la liberación de los detenidos, incluyendo Tawfiq al-Amer, un clérigo chií arrestado la semana pasada tras pedir una monarquía constitucional.
El 24 de febrero, un grupo de intelectuales pidieron al rey Abdalá, de 86 años, que adopte ampliar reformas políticas y sociales. Agregaron que el reino debería aprender de las revueltas en Túnez, Egipto y Libia y escuchar a los jóvenes.
Aunque Arabia Saudí, país que goza de una gran riqueza petrolera, se ha librado mayormente de la agitación que ha sacudido el Medio Oriente, ha aparecido un sólido movimiento de protesta en la vecina Bahrein, que al igual que otras naciones de la región se afana por controlar los pedidos de contar con un gobierno representativo y la disminución de la pobreza y el desempleo.
Un día antes del anuncio aproximadamente 100 miembros de la minoría chií realizaron una protesta en la región oriental del reino.
La advertencia fue otro intento por parte de Arabia Saudí de adelantarse a los acontecimientos y la agitación callejera que ha barrido el mundo árabe en los últimos meses. la semana pasada, el gobierno anunció un plan económico sin precedentes por valor de unos 36.000 millones de dólares que dará a los saudíes hipotecas sin interés alguno, compensaciones por desempleo y condonaciones de sus deudas.
El Ministerio del Interior dijo que las autoridades del reino han prohibido todas las manifestaciones porque son contrarias a la ley islámica y los valores de la sociedad, y agregó que algunas personas han intentado eludir la ley "para alcanzar objetivos ilegítimos".
Las fuerzas de seguridad fueron autorizadas a actuar contra cualquiera que viole la prohibición, dijo la nota.
La manifestación tuvo lugar tras las plegarias del viernes en la población oriental de Hofuf, donde los chiíes exigieron la liberación de los detenidos, incluyendo Tawfiq al-Amer, un clérigo chií arrestado la semana pasada tras pedir una monarquía constitucional.
El 24 de febrero, un grupo de intelectuales pidieron al rey Abdalá, de 86 años, que adopte ampliar reformas políticas y sociales. Agregaron que el reino debería aprender de las revueltas en Túnez, Egipto y Libia y escuchar a los jóvenes.
Aunque Arabia Saudí, país que goza de una gran riqueza petrolera, se ha librado mayormente de la agitación que ha sacudido el Medio Oriente, ha aparecido un sólido movimiento de protesta en la vecina Bahrein, que al igual que otras naciones de la región se afana por controlar los pedidos de contar con un gobierno representativo y la disminución de la pobreza y el desempleo.