Un aficionado del Liverpool: "Me llamo Fernando Torres"
Liverpool, As
¿Y ahora qué? Se habrá preguntado el aficionado del Liverpool que, por Navidad, se regaló un cambio de nombre para pasar a llamarse Fernando Torres, nuevo jugador del Chelsea.
Su nombre original era Shaun McCormack, tiene 36 años, está casado y es padre de cuatro hijos. Hace unos meses se le ocurrió que podía ser divertido cambiarse de nombre por algún jugador del equipo de sus amores, el Liverpool, y aunque en un principio pensó en Steven Gerrard, prefirió "algo más extravagante". El día de su renombramiento, dijo en una red social: "Es un sueño hecho realidad, para mí, Torres es el mejor delantero del planeta".
Según el nuevo 'Fernando Torres', que vive en Scunthorpe (North Lincolnshire), su idea le pareció maravillosa a todo el mundo, incluido a su mujer Clara y a sus cuatro hijos. No le hizo tanta gracia a su suegra: "La única persona que no ha visto el lado divertido ha sido mi suegra, pero mereció la pena ver su cara cuando se lo dije", dijo Torres, antes Shaun.
Debió ser curiosa la cara de este 'Fernando Torres' cuando se enteró que Roman Abramovich había pagado 58 millones de euros para llevarse al verdadero Torres al Chelsea. Ahora, Shaun medita si recuperar su nombre original o apostar por otro arriesgado plagio.
¿Y ahora qué? Se habrá preguntado el aficionado del Liverpool que, por Navidad, se regaló un cambio de nombre para pasar a llamarse Fernando Torres, nuevo jugador del Chelsea.
Su nombre original era Shaun McCormack, tiene 36 años, está casado y es padre de cuatro hijos. Hace unos meses se le ocurrió que podía ser divertido cambiarse de nombre por algún jugador del equipo de sus amores, el Liverpool, y aunque en un principio pensó en Steven Gerrard, prefirió "algo más extravagante". El día de su renombramiento, dijo en una red social: "Es un sueño hecho realidad, para mí, Torres es el mejor delantero del planeta".
Según el nuevo 'Fernando Torres', que vive en Scunthorpe (North Lincolnshire), su idea le pareció maravillosa a todo el mundo, incluido a su mujer Clara y a sus cuatro hijos. No le hizo tanta gracia a su suegra: "La única persona que no ha visto el lado divertido ha sido mi suegra, pero mereció la pena ver su cara cuando se lo dije", dijo Torres, antes Shaun.
Debió ser curiosa la cara de este 'Fernando Torres' cuando se enteró que Roman Abramovich había pagado 58 millones de euros para llevarse al verdadero Torres al Chelsea. Ahora, Shaun medita si recuperar su nombre original o apostar por otro arriesgado plagio.