Desplome de edificio dejó como saldo un drama social en familias de víctimas
Santa Cruz, Abi
El derrumbe del edificio Málaga en esta ciudad acaecido el pasado 24 de enero ha dejado como saldo un drama social en las familias de las víctimas, señaló el miércoles el representante Presidencial en el departamento de Santa Cruz, Roberto Fernández.
"Hay 20 niños huérfanos, dos viudas embarazadas, una a punto de dar a luz, y familias sin casas ni lugar donde vivir; hay un grave drama social detrás de toda esta desgracia", dijo Fernández.
Indicó que el Gobierno ha elaborado un estudio socioeconómico sobre este tema para conocer la realidad de cada una de las familias de las víctimas fatales y de aquellos que pudieron ser rescatadas con vida.
"El presidente Evo Morales ha instruido la realización de un estudio social al respecto para ver la forma cómo el Estado puede ayudarles a superar este problema", afirmó.
Subrayó que el estudio verificará si los propietarios de la empresa constructora cumplen con sus obligaciones de pagar las indemnizaciones a las familias de los afectados, si tienen la suficiente cobertura de salud y otras medidas.
"Se ha verificado que dos de esas familias necesitan con urgencia una vivienda para vivir con la que contarán ante la decisión del Mandatario para que el Estado las adquiera y entregue con la correspondiente documentación", anotó Fernández.
"Por instrucciones del Jefe de Estado, ninguna de las familias va a quedar abandonada", reiteró.
El Representante Presidencial reveló que se ha verificado que muchos de los hijos y familias no cuentan con documentos de identidad ni certificados de nacimiento, por lo que el Gobierno ha puesto a su servicio un abogado que regularice su situación legal.
Fernández afirmó que el Gobierno hará un seguimiento de la situación para que los propietarios de la empresa constructora cumplan con sus obligaciones de Ley con las familias de las víctimas.
Enfatizó que los hechos desnudan la realidad sobre la falta de control que existe para las edificaciones, lo que puede amenazar a miles de familias que viven en edificios y condominios, por lo que es necesario hacer una evaluación al respecto con el fin de preservar la seguridad de los bolivianos.
El derrumbe del edificio Málaga en esta ciudad acaecido el pasado 24 de enero ha dejado como saldo un drama social en las familias de las víctimas, señaló el miércoles el representante Presidencial en el departamento de Santa Cruz, Roberto Fernández.
"Hay 20 niños huérfanos, dos viudas embarazadas, una a punto de dar a luz, y familias sin casas ni lugar donde vivir; hay un grave drama social detrás de toda esta desgracia", dijo Fernández.
Indicó que el Gobierno ha elaborado un estudio socioeconómico sobre este tema para conocer la realidad de cada una de las familias de las víctimas fatales y de aquellos que pudieron ser rescatadas con vida.
"El presidente Evo Morales ha instruido la realización de un estudio social al respecto para ver la forma cómo el Estado puede ayudarles a superar este problema", afirmó.
Subrayó que el estudio verificará si los propietarios de la empresa constructora cumplen con sus obligaciones de pagar las indemnizaciones a las familias de los afectados, si tienen la suficiente cobertura de salud y otras medidas.
"Se ha verificado que dos de esas familias necesitan con urgencia una vivienda para vivir con la que contarán ante la decisión del Mandatario para que el Estado las adquiera y entregue con la correspondiente documentación", anotó Fernández.
"Por instrucciones del Jefe de Estado, ninguna de las familias va a quedar abandonada", reiteró.
El Representante Presidencial reveló que se ha verificado que muchos de los hijos y familias no cuentan con documentos de identidad ni certificados de nacimiento, por lo que el Gobierno ha puesto a su servicio un abogado que regularice su situación legal.
Fernández afirmó que el Gobierno hará un seguimiento de la situación para que los propietarios de la empresa constructora cumplan con sus obligaciones de Ley con las familias de las víctimas.
Enfatizó que los hechos desnudan la realidad sobre la falta de control que existe para las edificaciones, lo que puede amenazar a miles de familias que viven en edificios y condominios, por lo que es necesario hacer una evaluación al respecto con el fin de preservar la seguridad de los bolivianos.