Policía entra en tres favelas de Río para instalar bases permanentes
Río de Janeiro, Agencias
Unos 250 policías ocuparon hoy tres favelas de Río de Janeiro en una operación previa a la instalación en ellas de cuarteles permanentes de la institución, informaron fuentes oficiales.
Los agentes, que pertenecen al Batallón de Operaciones Especiales (Bope) de la Policía Militar de Río de Janeiro y a otros dos batallones de la institución, entraron en las favelas conocidas como Sao Joao, Morro Quieto y Da Matriz, donde pretenden permanecer "definitivamente", según un comunicado de la entidad.
El ingreso de los policías en las tres favelas tiene como objetivo preparar el terreno para la futura instalación de Unidades de Policía Pacificadora (UPP), un programa del gobierno regional para recuperar con la fuerza policial y servicios sociales las barriadas dominadas por el narcotráfico.
La primera UPP fue instalada en diciembre de 2008 en la favela Dona Marta, situada en el barrio carioca de Botafogo, y desde entonces esa iniciativa se ha extendido a otras 13 barriadas.
En las incursiones de hoy no se registraron tiroteos con delincuentes y los agentes usaron maquinaria pesada para retirar los obstáculos que el crimen organizado suele poner en las entradas de las favelas para impedir la entrada de la policía.
El Gobierno regional había divulgado la intención de ocupar la favela en la víspera, al igual que ha hecho en todas las incursiones precedentes de este tipo.
Según la Policía Militar, la operación en las tres favelas beneficiará directamente a unas 12.000 personas que viven en el sector.
A finales de noviembre pasado la Policía Militar, con la ayuda de blindados de la Marina y de soldados del Ejército, ocupó las favelas de Vila Cruzeiro y Complexo do Alemao, hasta entonces dos de los principales fortines del narcotráfico en Río de Janeiro.
A diferencia de la operación de hoy, esas acciones policiales se emprendieron en respuesta a una oleada de incendios de vehículos perpetrados por una banda de narcotraficantes, aunque a la postre las autoridades decidieron seguir el mismo modelo de "pacificación" con los cuarteles de las UPP.
Unos 250 policías ocuparon hoy tres favelas de Río de Janeiro en una operación previa a la instalación en ellas de cuarteles permanentes de la institución, informaron fuentes oficiales.
Los agentes, que pertenecen al Batallón de Operaciones Especiales (Bope) de la Policía Militar de Río de Janeiro y a otros dos batallones de la institución, entraron en las favelas conocidas como Sao Joao, Morro Quieto y Da Matriz, donde pretenden permanecer "definitivamente", según un comunicado de la entidad.
El ingreso de los policías en las tres favelas tiene como objetivo preparar el terreno para la futura instalación de Unidades de Policía Pacificadora (UPP), un programa del gobierno regional para recuperar con la fuerza policial y servicios sociales las barriadas dominadas por el narcotráfico.
La primera UPP fue instalada en diciembre de 2008 en la favela Dona Marta, situada en el barrio carioca de Botafogo, y desde entonces esa iniciativa se ha extendido a otras 13 barriadas.
En las incursiones de hoy no se registraron tiroteos con delincuentes y los agentes usaron maquinaria pesada para retirar los obstáculos que el crimen organizado suele poner en las entradas de las favelas para impedir la entrada de la policía.
El Gobierno regional había divulgado la intención de ocupar la favela en la víspera, al igual que ha hecho en todas las incursiones precedentes de este tipo.
Según la Policía Militar, la operación en las tres favelas beneficiará directamente a unas 12.000 personas que viven en el sector.
A finales de noviembre pasado la Policía Militar, con la ayuda de blindados de la Marina y de soldados del Ejército, ocupó las favelas de Vila Cruzeiro y Complexo do Alemao, hasta entonces dos de los principales fortines del narcotráfico en Río de Janeiro.
A diferencia de la operación de hoy, esas acciones policiales se emprendieron en respuesta a una oleada de incendios de vehículos perpetrados por una banda de narcotraficantes, aunque a la postre las autoridades decidieron seguir el mismo modelo de "pacificación" con los cuarteles de las UPP.