Inter derrotó a Nápoli en el debut de Leonardo
Roma, espn
Fue un buen debut para el brasileño Leonardo, flamante entrenador del Inter campeón defensor: su equipo, con un doblete de Thiago Motta y un gol de Esteban Cambiasso, le ganó a Nápoli, que había empatado transitoriamente con Michele Pazienza.
Fue el último partido de la fecha 18 del Calcio y el resultado favoreció a Milan, que extendió su ventaja en la punta. En efecto, Nápoli quedó tercero con 33 puntos, a 6 del líder, mientras que Inter, con dos partidos para recuperar, tiene 26 unidades y comparte con Udinese la séptima plaza.
El triunfo de Inter fue correcto: luego de un primer tiempo sumamente equilibrado, y que sin embargo acabó con los nerazzurri en ventaja, en el segundo, luego del tercer tanto, el de la tranquilidad, congeló muy bien el juego y no le concedió absolutamente nada a su rival, especialista en remontadas.
Leonardo paró al equipo según un clásico 4-3-1-2, con Stankovic (faltaron Sneijder y Julio César, lesionados, y Eto'o, quien cumplió su tercera y última fecha de suspensión) en posición de enganche, detrás de una pareja formada por Milito y Pandev.
Sin embargo, la verdadera novedad fue la actitud de los volantes, siempre listos para, a turno, mandarse con todo al área. No fue ninguna casualidad que los tres goles llevaran la firma de volantes y además también Stankovic y Zanetti estuvieron cerca del gol personal.
Nápoli, hasta que pudo mantener un ritmo alto, jugó de igual a igual y hasta, luego del empate de Pazienza, lució algo mejor que el rival y pareció poderse llevar por lo menos un punto. Pero, luego del 3 a 1, el equipo sintió el impacto y, si bien en el final empujó con orgullo, lo hizo con pocas ideas y recuerriendo demasiado al centro a la olla, inútil ante una defensa potente y bien organizada.
Los goles: Inter golpeó de entrada con una linda jugada de Motta, quien pidió y recibió la pared de Stankovic y facturó con una volea de zurda muy bonita, que se clavó a lado del palo. Sin embargo, luego de la ventaja Inter perdió el equilibrio en la cancha y Nápoli empató con justicia, con un cabezazo de Pazienza en jugada de tiro de esquina.
Sobre el final del tiempo, en el marco de un partido abierto de ida y vuelta con ocasiones de ambos rivales, Maicón protagonizó una linda jugada por derecha y metió el centro para la entrada en atropellada de Cambiasso, quien con un certero cabezazo envió a su equipo al descanso en ventaja.
Inter tuvo la suerte de volver a golpear al comienzo del complemento, un hermoso cabezazo de Motta en jugada de tiro de esquina que se clavó en el ángulo superior derecho, inatajable. Con ese tanto, los nerazzurri obtuvieron la tranquilidad y, con la complicidad del evidente bajón atlético de Nápoli, llevaron sin sobresaltos el triunfo en puerto.
Un párrafo especial para Javier Zanetti: más allá de no haber anotado, se mereció con creces la mención de figura de la cancha por su despliegue y su enorme corazón. Otro detalle: en ocasión de los goles, todos fueron a abrazarlo a Leonardo. Evidentemente, Rafa Benítez ya pertenece a los malos recuerdos.