Gobernador paraguayo declara "visitante ilustre" a Cossío
Asunción, Abi
El gobernador del Departamento Central de Paraguay, el liberal Carlos Amarilla, recibirá el lunes al suspendido gobernador de la provincia boliviana Tarija, Mario Cossío, que ha pedido refugio en el país, como "visitante ilustre", informó la edición electrónica dominical del diario ABC de Asunción.
"Mario Cossío fue depuesto de manera arbitraria de su cargo de gobernador de Tarija, solo por ser opositor al gobierno de Evo, sin mediar la justicia boliviana en esto. Es claramente una persecución política", explicó Amarilla al cotidiano.
Cossío enfrenta una serie de cargos por corrupción en su país y a mediados de diciembre, luego de ser suspendido por la Asamblea Legislativa de su región, en virtud a una imputación formulada por el Ministerio Público boliviano, salió furtivamente de Bolivia con rumbo a Paraguay, donde la local Comisión Nacional del Refugiado, dependiente de Naciones Unidas, le otorgó refugio transitorio por 90 días mientras estudia su petición de radicación.
El acto propiciado por Amarilla se desarrollará en el Salón de Eventos de la Unión Paraguaya de Veteranos de la Guerra del Chaco, de Fernando de la Mora, a las 9 de la mañana, precisó el periódico.
El gobernador paraguayo, opositor al gobierno del presidente Fernando Lugo, dijo haber sido testigo de la persecución a Cossío e insistió que su remoción fue "ilegal y arbitraria" ante la ausencia de sentencia judicial en su contra.
El Gobierno de Bolivia calificó el domingo de "agresivas" las "insinuaciones" de tres autoridades de Paraguay, entre ellas el vicepresidente Federico Franco y Amarilla, sobre la democracia boliviana y pidió a Asunción negar la concesión de asilo a Cossío.
"Algunas autoridades de la hermana República del Paraguay, específicamente el señor Vicepresidente de Paraguay y el gobernador de alguna de las regiones importantes (de ese país) y algún congresista han emitido un conjunto de declaraciones sobre Bolivia, sobre nuestro Estado, nuestras instituciones, que nosotros las calificamos de desacertadas, agresivas, incorrectas y erróneas", afirmó en La Paz el vicepresidente boliviano Alvaro García Linera.
En una conferencia de prensa, García Linera deploró los dichos de Franco y de Amarilla, que criticaron la presunta "persecución política" que el gobierno de Evo Morales desarrollaría contra Cossío, acusado en Bolivia por 20 cargos de corrupción mientras ejerció la Prefectura de Tarija, entre 2006 y 2009, y luego la Gobernación de esa sureña región boliviana en 2010.
Franco dijo que la vida de Cossío corría peligro en Bolivia.
El gobernador del Departamento Central de Paraguay, el liberal Carlos Amarilla, recibirá el lunes al suspendido gobernador de la provincia boliviana Tarija, Mario Cossío, que ha pedido refugio en el país, como "visitante ilustre", informó la edición electrónica dominical del diario ABC de Asunción.
"Mario Cossío fue depuesto de manera arbitraria de su cargo de gobernador de Tarija, solo por ser opositor al gobierno de Evo, sin mediar la justicia boliviana en esto. Es claramente una persecución política", explicó Amarilla al cotidiano.
Cossío enfrenta una serie de cargos por corrupción en su país y a mediados de diciembre, luego de ser suspendido por la Asamblea Legislativa de su región, en virtud a una imputación formulada por el Ministerio Público boliviano, salió furtivamente de Bolivia con rumbo a Paraguay, donde la local Comisión Nacional del Refugiado, dependiente de Naciones Unidas, le otorgó refugio transitorio por 90 días mientras estudia su petición de radicación.
El acto propiciado por Amarilla se desarrollará en el Salón de Eventos de la Unión Paraguaya de Veteranos de la Guerra del Chaco, de Fernando de la Mora, a las 9 de la mañana, precisó el periódico.
El gobernador paraguayo, opositor al gobierno del presidente Fernando Lugo, dijo haber sido testigo de la persecución a Cossío e insistió que su remoción fue "ilegal y arbitraria" ante la ausencia de sentencia judicial en su contra.
El Gobierno de Bolivia calificó el domingo de "agresivas" las "insinuaciones" de tres autoridades de Paraguay, entre ellas el vicepresidente Federico Franco y Amarilla, sobre la democracia boliviana y pidió a Asunción negar la concesión de asilo a Cossío.
"Algunas autoridades de la hermana República del Paraguay, específicamente el señor Vicepresidente de Paraguay y el gobernador de alguna de las regiones importantes (de ese país) y algún congresista han emitido un conjunto de declaraciones sobre Bolivia, sobre nuestro Estado, nuestras instituciones, que nosotros las calificamos de desacertadas, agresivas, incorrectas y erróneas", afirmó en La Paz el vicepresidente boliviano Alvaro García Linera.
En una conferencia de prensa, García Linera deploró los dichos de Franco y de Amarilla, que criticaron la presunta "persecución política" que el gobierno de Evo Morales desarrollaría contra Cossío, acusado en Bolivia por 20 cargos de corrupción mientras ejerció la Prefectura de Tarija, entre 2006 y 2009, y luego la Gobernación de esa sureña región boliviana en 2010.
Franco dijo que la vida de Cossío corría peligro en Bolivia.