García Linera llama a proletarios y pobres asumir su papel en nueva historia de Bolivia

La Paz, Abi
El vicepresidente Alvaro García Linera sentenció el sábado que el desarrollo de Bolivia, fundado en la relación armónica entre la naturaleza y la industrialización, mantendrá su eje en los "trabajadores", el "núcleo duro" de la revolución democrática y cultural que la inspiró, durante una solemne sesión de la Asamblea Legislativa (ALP).

El nuevo modelo estatal estará o debe estar "a cargo y bajo la dirección de los que nunca le han dado la espalda a su patria y a la historia, los trabajadores, los humildes, los sencillos, los que forman el alma de nuestra patria Bolivia", afirmó durante un discurso pronunciado ante la ALP que sesionó en La Paz en conmemoración al primer año del Estado Plurinacional y primero de los 5 años del segundo mandato del presidente Evo Morales.

En una alocución previa al discurso presidencial y de poco menos 30 minutos, en que refirió, desde el punto de vista de la teoría y la doctrina, el tipo de contradicciones y tensiones que se registran en la Bolivia plurinacional timoneada por el indígena Morales, propugnó "reforzar", imprescindiblemente y con la mira puesta en la sostenibilidad del nuevo modelo estatal, el "núcleo duro de la revolución, los pobres".

Sociólogo y matemático y profesor de vocación, convocó a apuntalar el proceso de cambios estructurales que se registra en Bolivia desde 2006.

"La vanguardia indígena, trabajadores, campesinos, estudiantes, siempre tendrán que llevar la bandera de lo común", afirmó.

Interrumpido varias veces por salvas de aplausos, García Linera dijo que el Estado en Bolivia, que se ha vuelto a desplegar como actor principal en la economía local, privilegia el uso por encima del cambio y la ganancia.

El dignatario salió al paso de críticos y opositores que demandan la liberación de la economía y argumentó que, en el actual contexto, "el Estado no acumula" en Bolivia, razón esa de su vocación anticapitalista.

Opuesto a que se tache el nuevo modelo estatal como capitalista, estimó imperioso sentar el proceso de industrialización de hidrocarburos y minerales, principalmente litio, buque insignia y puntual del proceso de cambios que impulsa la administración Morales, pero regido a los mandatos de la naturaleza.

"Necesitamos industrializar pero también preservar la naturaleza (..) Trabajamos la naturaleza y utilizamos los bienes que generosamente nos da preservando su continuidad (..) Necesitamos preservar la estructura fundamental de nuestro entorno natural", afirmó al proclamar, a manera de síntesis, un "diálogo vivificante con la naturaleza para preservar el bienestar común de las siguientes generaciones y de la propia naturaleza".

García Linera dijo que pese a las características propias de la coyuntura, la unidad se Bolivia se ha consolidado, tras décadas de un sistema "de infamia que descuartizaba el Estado y saqueaba la riqueza del Estado", por parte de "castas políticas ineptas, corruptas y vendepatria".

Relievó que el nuevo estado de cosas en Bolivia se sustenta en "la unidad movilizada del pueblo".

El mandatario, titular nato de la ALP, describió la actual situación en Bolivia signada aún por contradicciones "fundamentales" y "antagónicas", entre "el pueblo y sus adversarios" y, tensiones, solubles bajo fórmulas democráticas, entre los intereses generales y privados, en el seno mismo de una comunidad y un Estado.

Entre las primeras citó las que libran el "pueblo boliviano con el imperio o alianza de terratenientes y sectores de la burguesía aferrados a un colonialismo depredador", ya derrotada en 2009.

Entre las segundas presentó los acuerdos "campo-ciudad con empresariado patriota boliviano", tensiones que se resolvieron mediante acuerdos sociales para derrotar a adversarios fundamentales".

Entradas populares