Cuatro países confluyen en Santa Cruz por 10 obreros atrapados bajo miles de toneladas
Santa Cruz, Abi
Equipos de expertos de Argentina, Chile, México y Perú se sumarán el viernes a las penosas labores de rescate de una decena de operarios y técnicos atrapados hace 4 días en los sótanos de un edificio de 10 plantas colapsado, que segó la vida de 8 y dejó heridas en otros 9, en momentos en que el calor sofocante en la ciudad boliviana de Santa Cruz, la falta de oxígeno, agua y alimentos restan en una lucha dramática y a contrarreloj por hallarlos con vida.
Los gobiernos de Cristina Fernández, Sebastián Piñera, Felipe Calderón y Alan García enviaban lo más granado de sus cuerpos de socorristas para que potencien las tareas que 300 de sus colegas bolivianos realizan sin pausa en las últimas 72 horas para hallar con vida a Marcelo Niño de Guzmán, Armando Rivera, Carlos Pérez, Miguel Rojas, Leonado Plata, Antenor Daza, Johnny Eguez, Rubén Urzagasti y Jesús Casanova que, se supone, permanecen con vida bajo miles de toneladas de acero y concreto.
No ha evidencia sino esperanza de que esto suceda.
El edificio, un multifamiliar en construcción de 10 plantas, 47 apartamentos y locales comerciales, se desplomó inopinadamente el lunes pasado, supuestamente por una sobrecarga de 1.000 toneladas de peso excedentario a lo calculado.
Los equipos de rescate bolivianos, que entre lunes y jueves extrajeron 8 cadáveres, en su mayor parte operarios, habían insuflado ya oxígeno por medio de finos conductos perforados hasta el sótano de la construcción desplomada y también agua.
Los rescatistas internacionales provienen de países recurrentemente afectados por terremotos, tales como México, Chile y Perú, a los que se agregarán especialistas de Argentina.
De acuerdo con los trabajos realizados por medio millar de uniformados, mineros, funcionarios, obreros y voluntarios bolivianos, los sobrevivientes se encuentran a poco menos de 3,5 metros de la superficie, mediados por un número potente e indeterminado de bloques de hormigón armado.
Un equipo especializado enviado por la Corporación Minera de Bolivia permitió el jueves cortar hormigón y acero sin gravitar sobre los puntos de probable desplome, lo que allanó el camino hacia los sobrevivientes.
La también estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos emplazó un taladro hasta el lugar en un intento por ganar tiempo y alcanzar los sótanos que aún abrigan la vida de los 10 operarios, en momentos en que la sensación térmica se eleva sobre los 35 grados centígrados.
Horas después que el presidente boliviano Evo Morales pidiera ayuda a la comunidad internacional, México, devastado hace dos décadas por un potente terremoto, comprometió su concurso.
"La primera respuesta ha venido de México, un país que ha sido afectado por un terrible terremoto hace unos 20 años y que cuenta con sistemas de rescate de víctimas", confirmó el vicepresidente Alvaro García Linera, hacia el mediodía.
Más tarde, el Consulado General de Chile en La Paz afirmó la decisión del gobierno del presidente Sebastián Piñera de enviar a un equipo de 28 rescatistas, munidos de experiencia reciente en el megaterremoto que devastó hace poco menos de un año el centro y sur de ese país costero
"El Gobierno de Chile ha decidido colaborar con las labores de rescate en Santa Cruz, enviando en un avión especial a 28 rescatistas de bomberos, expertos en situaciones de rescate en edificios derrumbados", afirma un comunicado del Consulado General de Chile en La Paz enviado a la ABI.
Los bomberos chilenos pondrán, desde el mismo viernes, manos a la obra, apenas desaten los equipo de rescate, búsqueda y salvamento digitales, cámaras termales, equipos de escucha y trasmisión de imágenes, del tipo de las que emplearon para hallar, octubre pasado, a los 33 mineros atrapados en un yacimiento a 700 m de profundidad en la región de Copiapo, además de maquinarias de corte y perforación, precisó el informe.
Argentina también comprometió ayuda inmediata, confirmó su Embajada en La Paz.
"En respuesta inmediata al pedido del Gobierno de Bolivia, los Cascos Blancos de la hermana República de la Argentina, llegarán el día de mañana (viernes) a la ciudad de Santa Cruz, con el objeto de colaborar en el rescate de una decena de personas que podrían estar enterradas vivas en los sótanos del edificio Málaga", afirmó un comunicado de la legación diplomática.
Un cuerpo de especialistas era también desplazado desde la zona volcánica de Arequipa, en el sur de Perú, hacia Santa Cruz.
Mientras tanto, las cuadrillas de rescate bolivianas inyectaron oxígeno y agua en un intento ciego por extender las posibilidades de vida de los atrapados.
"Nos estamos dedicando a insuflar oxígeno y agua y al final de la tarde se ha hecho un corte de separación del tanque de agua que era lo que más peligro nos estaba causando para poder separarlo de este lugar y trabajar de un forma más segura. Hemos detectado bolsones de aire, detectados por los scaners y cuantificados también por los rastrillajes que han hecho los canes. En ese sentido es que ahí se han hecho la mayor cantidad de perforaciones y donde se está provechando de alimentar con oxígeno", afirmó un responsable boliviano de las faenas.
Incluso los peritos y perforistas filtraron cámaras de televisión cerca del lugar donde se presume se encuentran los sobrevivientes, debajo de un tanque de agua seccionado y más tarde izado por maquinaria pesada.
Una de las cámaras detectó, en una primera aproximación, un cadáver, luego alzado a la superficie.
"Solamente en una de las cámaras que hemos podido utilizar para descubrir uno de los cadáveres, pero estamos utilizando todavía las cámaras por cuanto el diámetro que hemos preparado no es el suficiente", reconoció el líder local de la operación de rescate.
Los gobiernos de Cristina Fernández, Sebastián Piñera, Felipe Calderón y Alan García enviaban lo más granado de sus cuerpos de socorristas para que potencien las tareas que 300 de sus colegas bolivianos realizan sin pausa en las últimas 72 horas para hallar con vida a Marcelo Niño de Guzmán, Armando Rivera, Carlos Pérez, Miguel Rojas, Leonado Plata, Antenor Daza, Johnny Eguez, Rubén Urzagasti y Jesús Casanova que, se supone, permanecen con vida bajo miles de toneladas de acero y concreto.
No ha evidencia sino esperanza de que esto suceda.
El edificio, un multifamiliar en construcción de 10 plantas, 47 apartamentos y locales comerciales, se desplomó inopinadamente el lunes pasado, supuestamente por una sobrecarga de 1.000 toneladas de peso excedentario a lo calculado.
Los equipos de rescate bolivianos, que entre lunes y jueves extrajeron 8 cadáveres, en su mayor parte operarios, habían insuflado ya oxígeno por medio de finos conductos perforados hasta el sótano de la construcción desplomada y también agua.
Los rescatistas internacionales provienen de países recurrentemente afectados por terremotos, tales como México, Chile y Perú, a los que se agregarán especialistas de Argentina.
De acuerdo con los trabajos realizados por medio millar de uniformados, mineros, funcionarios, obreros y voluntarios bolivianos, los sobrevivientes se encuentran a poco menos de 3,5 metros de la superficie, mediados por un número potente e indeterminado de bloques de hormigón armado.
Un equipo especializado enviado por la Corporación Minera de Bolivia permitió el jueves cortar hormigón y acero sin gravitar sobre los puntos de probable desplome, lo que allanó el camino hacia los sobrevivientes.
La también estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos emplazó un taladro hasta el lugar en un intento por ganar tiempo y alcanzar los sótanos que aún abrigan la vida de los 10 operarios, en momentos en que la sensación térmica se eleva sobre los 35 grados centígrados.
Horas después que el presidente boliviano Evo Morales pidiera ayuda a la comunidad internacional, México, devastado hace dos décadas por un potente terremoto, comprometió su concurso.
"La primera respuesta ha venido de México, un país que ha sido afectado por un terrible terremoto hace unos 20 años y que cuenta con sistemas de rescate de víctimas", confirmó el vicepresidente Alvaro García Linera, hacia el mediodía.
Más tarde, el Consulado General de Chile en La Paz afirmó la decisión del gobierno del presidente Sebastián Piñera de enviar a un equipo de 28 rescatistas, munidos de experiencia reciente en el megaterremoto que devastó hace poco menos de un año el centro y sur de ese país costero
"El Gobierno de Chile ha decidido colaborar con las labores de rescate en Santa Cruz, enviando en un avión especial a 28 rescatistas de bomberos, expertos en situaciones de rescate en edificios derrumbados", afirma un comunicado del Consulado General de Chile en La Paz enviado a la ABI.
Los bomberos chilenos pondrán, desde el mismo viernes, manos a la obra, apenas desaten los equipo de rescate, búsqueda y salvamento digitales, cámaras termales, equipos de escucha y trasmisión de imágenes, del tipo de las que emplearon para hallar, octubre pasado, a los 33 mineros atrapados en un yacimiento a 700 m de profundidad en la región de Copiapo, además de maquinarias de corte y perforación, precisó el informe.
Argentina también comprometió ayuda inmediata, confirmó su Embajada en La Paz.
"En respuesta inmediata al pedido del Gobierno de Bolivia, los Cascos Blancos de la hermana República de la Argentina, llegarán el día de mañana (viernes) a la ciudad de Santa Cruz, con el objeto de colaborar en el rescate de una decena de personas que podrían estar enterradas vivas en los sótanos del edificio Málaga", afirmó un comunicado de la legación diplomática.
Un cuerpo de especialistas era también desplazado desde la zona volcánica de Arequipa, en el sur de Perú, hacia Santa Cruz.
Mientras tanto, las cuadrillas de rescate bolivianas inyectaron oxígeno y agua en un intento ciego por extender las posibilidades de vida de los atrapados.
"Nos estamos dedicando a insuflar oxígeno y agua y al final de la tarde se ha hecho un corte de separación del tanque de agua que era lo que más peligro nos estaba causando para poder separarlo de este lugar y trabajar de un forma más segura. Hemos detectado bolsones de aire, detectados por los scaners y cuantificados también por los rastrillajes que han hecho los canes. En ese sentido es que ahí se han hecho la mayor cantidad de perforaciones y donde se está provechando de alimentar con oxígeno", afirmó un responsable boliviano de las faenas.
Incluso los peritos y perforistas filtraron cámaras de televisión cerca del lugar donde se presume se encuentran los sobrevivientes, debajo de un tanque de agua seccionado y más tarde izado por maquinaria pesada.
Una de las cámaras detectó, en una primera aproximación, un cadáver, luego alzado a la superficie.
"Solamente en una de las cámaras que hemos podido utilizar para descubrir uno de los cadáveres, pero estamos utilizando todavía las cámaras por cuanto el diámetro que hemos preparado no es el suficiente", reconoció el líder local de la operación de rescate.