Cruz Azul amigo del sufrimiento, empató de manera agónica con Pumas

México, Agencias
En un partido con múltiples emociones, donde Cruz Azul comenzó con ventaja, Pumas de la UNAM le dio la vuelta en el segundo lapso y los celestes regresaron, la afición que acudió hoy al estadio Azul fue la que ganó con el 3-3.

El argentino Emanuel Villa marcó el primer tanto de la Máquina a los 25 minutos, mientras que Horacio Cervantes consiguió el segundo al 36 y el chileno Hugo Patricio Droguett el tercero al 83.

Juan Carlos Cacho, quien fue el verdugo con aquella pena máxima de la liguilla anterior, metió en la pelea a los felinos al descontar al 60 y un golazo al 80, mientras el paraguayo Dario Verón colaboró con su anotación al 73.

Ante un lleno en el estadio Azul, el cuadro cementero llegó a cuatro puntos en el Grupo Tres, mientras que los auriazules totalizaron cinco para colocarse momentáneamente en el liderato del mismo sector.

Con el gran conocimiento que tiene de las estrategias de su maestro Enrique Meza, Guillermo Vázquez volvió a mandar a Pumas a apretar desde la salida al cuadro celeste y con ello dificultarle su juego basado en el control del esférico.

En los primeros 20 minutos el cuadro de casa prácticamente no pudo rebasar el mediocampo con jugada armada ante la presión y anticipación del visitante, que pese a todo no lograba tampoco inquietar al portero Jesús Corona.

Tuvo que ser mediante táctica fija, en un tiro de esquina, donde Cruz Azul se puso en ventaja en el marcador para nivelar un poco el partido.

Horacio Cervantes peinó un balón a primer poste, el arquero Alejandro Palacios recortó bien pero lo dejó suelto, llegó el chileno Waldo Ponce a rematar y entre Palacios y Efraín Velarde taparon sobre la línea, pero Tito Villa contrarremató para abrir la cuenta.

En un contragolpe donde tuvo cierta dosis de fortuna llegó el 2-0 para la Máquina, pues un tiro de Horacio Cervantes fue desviado por Pikolín Palacios para cambiarle la trayectoria y dejar sin opción de intervenir a su hermano Alejandro.

El chileno Hugo Droguett pudo liquidar a escasos segundos de irse al descanso con un zurdazo dentro del área que se fue a mano izquierda del cancerbero visitante.

Pumas adelantó líneas en los primeros minutos del complemento en busca de acortar distancias y abrió el juego para los contragolpes del local, pero no logró capitalizar sus oportunidades.

Memo Vázquez arriesgó y metió al joven Carlos Orrantia en lugar del veterano Juan Francisco Palencia para ganar en velocidad y empezó a desquiciar a los tres centrales que utilizó Enrique Meza: Néstor Araujo, Waldo Ponce y Horacio Cervantes.

Al minuto 59 se empezó a nivelar el partido con una escapada del argentino Martín Bravo por la izquierda, quien fue trabado en el área por Araujo, pero el árbitro perdonó la clara pena máxima. En la siguiente acción por el mismo lado Bravo se llevó otra vez la marca y puso el servicio para Juan Carlos Cacho, quien recortó distancias.

Los universitarios igualaron los cartones al minuto 73 en un tiro de esquina donde el paraguayo Darío Verón ganó la marca sobre Horacio Cervantes y remató de cabeza, momento en los que los aficionados universitarios, que vinieron en gran número al estadio Azul, festejaron en grande.

Pero faltaban aún muchas emociones en el encuentro. Al 80, con un golazo al ángulo derecho tras un disparo muy lejano, Cacho adelantó a los felinos, quienes parecían otra vez hacerle la travesura a los celestes, tal como sucedió en la vuelta de los cuartos de final.

Pero Cruz Azul no perdió concentración y fue pronto al frente en busca de recuperar lo que parecía tener en la bolsa y al 83 encontró el 3-3 gracias a una pared entre Chaco Giménez y Hugo Droguett, quien dentro del área cruzó por debajo a la derecha de Palacios para que los seguidores celestes celebraran la anotación y la igualada.

Ambos equipos se fueron en busca de un gol que les diera la victoria, el cual no llegó, en un partido donde no querían ceder lo mínimo a su contrincante y ante lo cerrado del juego los aficionados permanecieron en sus lugares hasta el silbatazo final.

El trabajo del árbitro Román Rafael Medina, quien reapareció tras recibir aquel cabezazo del argentino Rubens Sambueza, de Estudiantes Tecos, fue protestado por la afición de ambos equipos; tuvo una decisión equivocada que sí influyó al perdonarle a los celestes una pena máxima al minuto 59 por falta de Araujo sobre Bravo.

Mostró preventivas al chileno Waldo Ponce, Gonzalo Pineda y Horacio Cervantes por los locales, y pintó de amarillo a los auriazules Efraín Velarde y Juan Carlos Cacho.