Azucareros aseguran que hay escasez y no desabastecimiento por contrabando y factores climáticos
La Paz, Abi
Los empresarios azucareros aseguraron el domingo que en Bolivia no hay desabastecimiento de azúcar sino escasez del producto por efectos del contrabando y factores climáticos que ocasionaron que la producción de ese artículo de primerísima necesidad se reduzca en al menos 35% con relación al pasado año.
El representante del ingenio Unagro, Miguel Montero, explicó en una entrevista con los medios estatales que la zafra del año pasado se cerró en septiembre, tres meses antes de lo habitual, porque "hubo 35 por ciento menos caña".
"Y si hay menos caña, hay menos molienda, y si hay menos molienda hay menos azúcar", argumentó.
Reveló que la producción habitual de todos los ingenios azucareros al año es de 12 millones de quintales por año, cifra que por la baja producción de caña en 2010 se redujo a 8,5 millones de quintales.
Cantidad que, a su juicio, es suficiente para cubrir la demanda del mercado interno que se sitúa cerca a 7,5 millones de quintales.
El empresario azucarero consideró que la escasez se produjo por dos razones: la primera porque las condiciones de vida y de acceso a los alimentos es mayor en la base de la pirámide y, por tanto, ha aumentado el consumo interno.
"La gente consume más. Antes se aprovisionado la gente en las fronteras bolivianas de los vecinos países, en el caso de chiquitos siempre nos hemos aprovisionado del Brasil, pero ahora resulta que, como es muchísimo más barato en Bolivia, toda la frontera boliviana y además la frontera brasileña y de otros países compra y eso también ha aumentado el consumo interno", justificó.
Montero aseguro que, además, por la vasta frontera que tiene Bolivia y los altos precios "que hay afuera", estimula a la gente "inescrupulosa" a "contrabandear", fenómeno que dijo no se puede controlar a pesar del interés que pone el Gobierno y las instituciones.
En esas condiciones, el empresario azucarero aseguró que el sector está preparado para que en la próxima zafra se duplique la producción del año pasado y que esa producción estará destina en su mayoría para cubrir la demanda del mercado interno.
"Gracias a Dios no hay desabastecimiento, hay escasez", matizó y aseguró que en los últimos 20 años no ha faltado azúcar.
"Este es el único año, lamentablemente no podemos controlar las lluvias, pero si podemos controlar nuestras técnicas de cultivo. Estamos trabajando y nos comprometemos a que no vuelva a suceder", subrayó.
En esa dirección, recordó que existe un convenio entre los azucareros y el Gobierno para importar hasta marzo próximo al menos 1 millón de quintales, cantidad que reconoció podría faltar para el consumo interno antes de la próxima zafra.
Dijo que se tiene previsto importar azúcar de Colombia y Brasil, casi al doble del precio de Bolivia, pero que por responsabilidad social los ingenios subvencionarán el 20% de los mil millones y el Estado el restante 80%, para que los bolivianos tengan el producto al precio actual.
"Lo hacemos por responsabilidad social, porque estamos comprometidos, no es culpa de la industria, ni del Gobierno, esperamos que nos vaya a suceder y que esto no vulva a suceder", comprometió.
Destacó el acuerdo con el Gobierno que, a su juicio, busca "mejorar el camino de la distribución" y en esa línea consideró a EMAPA como una empresa adecuada que ofrece a la población productos a "precios justo", aunque lamentó las colas que se forman en los últimos días.
Denunció a los comerciantes mayorista de romper un acuerdo previo para recibir cinco quintales por cupo y renovar esa cantidad cuando agoten el producto, pero dijo que "de la noche a la mañana" exigieron que se les entregue 50 sacos. "Eso no es posible, porque nos deja con las arcas vacías en corto plazo y la idea es que se pueda distribuir a todos y a la gente que más necesita con ventas directas en las tiendas de barrio" remarcó..
Los empresarios azucareros aseguraron el domingo que en Bolivia no hay desabastecimiento de azúcar sino escasez del producto por efectos del contrabando y factores climáticos que ocasionaron que la producción de ese artículo de primerísima necesidad se reduzca en al menos 35% con relación al pasado año.
El representante del ingenio Unagro, Miguel Montero, explicó en una entrevista con los medios estatales que la zafra del año pasado se cerró en septiembre, tres meses antes de lo habitual, porque "hubo 35 por ciento menos caña".
"Y si hay menos caña, hay menos molienda, y si hay menos molienda hay menos azúcar", argumentó.
Reveló que la producción habitual de todos los ingenios azucareros al año es de 12 millones de quintales por año, cifra que por la baja producción de caña en 2010 se redujo a 8,5 millones de quintales.
Cantidad que, a su juicio, es suficiente para cubrir la demanda del mercado interno que se sitúa cerca a 7,5 millones de quintales.
El empresario azucarero consideró que la escasez se produjo por dos razones: la primera porque las condiciones de vida y de acceso a los alimentos es mayor en la base de la pirámide y, por tanto, ha aumentado el consumo interno.
"La gente consume más. Antes se aprovisionado la gente en las fronteras bolivianas de los vecinos países, en el caso de chiquitos siempre nos hemos aprovisionado del Brasil, pero ahora resulta que, como es muchísimo más barato en Bolivia, toda la frontera boliviana y además la frontera brasileña y de otros países compra y eso también ha aumentado el consumo interno", justificó.
Montero aseguro que, además, por la vasta frontera que tiene Bolivia y los altos precios "que hay afuera", estimula a la gente "inescrupulosa" a "contrabandear", fenómeno que dijo no se puede controlar a pesar del interés que pone el Gobierno y las instituciones.
En esas condiciones, el empresario azucarero aseguró que el sector está preparado para que en la próxima zafra se duplique la producción del año pasado y que esa producción estará destina en su mayoría para cubrir la demanda del mercado interno.
"Gracias a Dios no hay desabastecimiento, hay escasez", matizó y aseguró que en los últimos 20 años no ha faltado azúcar.
"Este es el único año, lamentablemente no podemos controlar las lluvias, pero si podemos controlar nuestras técnicas de cultivo. Estamos trabajando y nos comprometemos a que no vuelva a suceder", subrayó.
En esa dirección, recordó que existe un convenio entre los azucareros y el Gobierno para importar hasta marzo próximo al menos 1 millón de quintales, cantidad que reconoció podría faltar para el consumo interno antes de la próxima zafra.
Dijo que se tiene previsto importar azúcar de Colombia y Brasil, casi al doble del precio de Bolivia, pero que por responsabilidad social los ingenios subvencionarán el 20% de los mil millones y el Estado el restante 80%, para que los bolivianos tengan el producto al precio actual.
"Lo hacemos por responsabilidad social, porque estamos comprometidos, no es culpa de la industria, ni del Gobierno, esperamos que nos vaya a suceder y que esto no vulva a suceder", comprometió.
Destacó el acuerdo con el Gobierno que, a su juicio, busca "mejorar el camino de la distribución" y en esa línea consideró a EMAPA como una empresa adecuada que ofrece a la población productos a "precios justo", aunque lamentó las colas que se forman en los últimos días.
Denunció a los comerciantes mayorista de romper un acuerdo previo para recibir cinco quintales por cupo y renovar esa cantidad cuando agoten el producto, pero dijo que "de la noche a la mañana" exigieron que se les entregue 50 sacos. "Eso no es posible, porque nos deja con las arcas vacías en corto plazo y la idea es que se pueda distribuir a todos y a la gente que más necesita con ventas directas en las tiendas de barrio" remarcó..