Hallan muerto al hermano de la pareja de la activista asesinada en México
México, Agencias
El cuerpo de Manuel Monge fue hallado este sábado, horas después de que fuera secuestrado por un grupo de individuos que prendieron fuego a la maderería propiedad de su hermano en Ciudad Juárez.
La víctima, que murió por asfixia, tenía el rostro cubierto con una bolsa de plástico y estaba atada de pies y manos con cinta adhesiva.
Marisela Escobedo fue asesinada el jueves de un disparo por tres desconocidos frente a la sede del gobierno de Chihuahua, en la localidad del mismo nombre, en donde pedía justicia por la muerte de su hija.
En los últimos tiempos, había encabezado diversas marchas y protestas en Ciudad Juárez -que acumula más de 500 muertes y desapariciones de mujeres desde 1993- para exigir al gobernador justicia para su hija, cuyo presunto asesino fue detenido en abril pero liberado poco después. Sergio Barraza, el presunto homicida, tiene vínculos con el crimen organizado, que le protege y cobija, según las investigaciones oficiales.
Protestas en México
El asesinato de Escobedo desencadenó una ola de protestas sociales. Su entierro incluso tuvo que ser adelantado y custodiado fuertemente por las fuerzas de seguridad, ante el temor a posibles actos de violencia.
Integrantes de diversas organizaciones de la sociedad civil en Ciudad Juárez hicieron un llamamiento para participar el próximo miércoles en una marcha de repudio a la muerte de la activista.
Judith Galarza, miembro de la Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos (FEDEFAM), dijo a Efe que la marcha concluirá frente a las instalaciones de la Fiscalía estatal.
Chihuahua es el Estado con más asesinatos del país, con más de 3.100 este año, a cuenta de la fuerte actividad del crimen organizado. La mayoría de los crímenes permanecen impunes.
El cuerpo de Manuel Monge fue hallado este sábado, horas después de que fuera secuestrado por un grupo de individuos que prendieron fuego a la maderería propiedad de su hermano en Ciudad Juárez.
La víctima, que murió por asfixia, tenía el rostro cubierto con una bolsa de plástico y estaba atada de pies y manos con cinta adhesiva.
Marisela Escobedo fue asesinada el jueves de un disparo por tres desconocidos frente a la sede del gobierno de Chihuahua, en la localidad del mismo nombre, en donde pedía justicia por la muerte de su hija.
En los últimos tiempos, había encabezado diversas marchas y protestas en Ciudad Juárez -que acumula más de 500 muertes y desapariciones de mujeres desde 1993- para exigir al gobernador justicia para su hija, cuyo presunto asesino fue detenido en abril pero liberado poco después. Sergio Barraza, el presunto homicida, tiene vínculos con el crimen organizado, que le protege y cobija, según las investigaciones oficiales.
Protestas en México
El asesinato de Escobedo desencadenó una ola de protestas sociales. Su entierro incluso tuvo que ser adelantado y custodiado fuertemente por las fuerzas de seguridad, ante el temor a posibles actos de violencia.
Integrantes de diversas organizaciones de la sociedad civil en Ciudad Juárez hicieron un llamamiento para participar el próximo miércoles en una marcha de repudio a la muerte de la activista.
Judith Galarza, miembro de la Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos (FEDEFAM), dijo a Efe que la marcha concluirá frente a las instalaciones de la Fiscalía estatal.
Chihuahua es el Estado con más asesinatos del país, con más de 3.100 este año, a cuenta de la fuerte actividad del crimen organizado. La mayoría de los crímenes permanecen impunes.