Un senador fue mediador entre Berlusconi y la 'Cosa Nostra'
Dell' Ultri permitió a los jefes mafiosos a contactar con el actual primer ministro italiano antes que este entrara en el ámbito de la política
Madrid, Agencias
El senador siciliano Marcello Dell' Ultri, mano derecha de Silvio Berlusconi en Publitalia y cofundador del partido Forza Italia, fue el "principal vínculo de unión" entre el primer ministro y la mafia siciliana la Cosa Nostra, según la sentencia contra a este político italiano que ha sido depositada este viernes en el Tribunal de apelación de Palermo. Los contactos se habrían producido antes de que il Cavaliere entrara en el ámbito de la política en la década de los noventa.
Dell' Ultri -senador por el partido de Berlusconi, El Pueblo de la Libertad- fue condenado el pasado 29 de junio por un juzgado de Palermo a siete años y un día de reclusión por un crimen de asociación mafiosa. Ayer los jueces encargados del caso presentaron el informe que justifica esta condena. Las 641 páginas depositadas se refieren a delitos cometidos hasta el año 1992, dos años antes del primer mandato de Berlusconi, ya que el senador ha sido absuelto de los crímenes que se le imputaban posteriores a esta fecha.
En particular, escriben los jueces, el imputado permitió a los jefes mafiosos contactar y dirigirse a Berlusconi, que en aquella época ya era un empresario en claro ascenso hacia el poder. Los jueces consideran además que el fallecido mafioso Vittorio Mangano fue contratado, con la mediación de Dell'Utri, para trabajar para Silvio Berlusconi con el fin de garantizar su seguridad y la de su familia -por la que pagó grandes sumas de dinero-, y no como mozo de cuadras, como se había dicho. Además, según los jueces, Dell' Ultri "habría contribuido conscientemente a la consolidación y el reforzamiento de la asociación mafiosa".
Unas acusaciones que pudieron ser contrastadas al testimonio de uno de los colaboradores de la Justicia, Francesco Di Carlo, que reconstruyó las relaciones de Dell'Utri con la Cosa Nostra, y al que la justicia asegura que le da toda la credibilidad.
Sin embargo, los jueces establecieron que no existen pruebas suficientes de que entre Dell'Utri y la Cosa Nostra se estipulara un pacto político-maioso, como sostenía la acusación, que alegó que el senador adquirió compromisos con la asociación mafiosa a cambio de su apoyo electoral en los comicios de 1994.
Dell' Ultri, por su parte, dice sentirse "tranquilo" ante estas explicaciones aportadas por los jueces. "No me pueden condenar por nada", ha añadido, según recoge el diario La Repubblica.
En primera instancia el proceso se prolongó durante más de siete años y en él fueron llamados a declarar cerca de 270 testigos, entre ellos el propio Berlusconi, aunque se acogió al derecho de no responder.
Madrid, Agencias
El senador siciliano Marcello Dell' Ultri, mano derecha de Silvio Berlusconi en Publitalia y cofundador del partido Forza Italia, fue el "principal vínculo de unión" entre el primer ministro y la mafia siciliana la Cosa Nostra, según la sentencia contra a este político italiano que ha sido depositada este viernes en el Tribunal de apelación de Palermo. Los contactos se habrían producido antes de que il Cavaliere entrara en el ámbito de la política en la década de los noventa.
Dell' Ultri -senador por el partido de Berlusconi, El Pueblo de la Libertad- fue condenado el pasado 29 de junio por un juzgado de Palermo a siete años y un día de reclusión por un crimen de asociación mafiosa. Ayer los jueces encargados del caso presentaron el informe que justifica esta condena. Las 641 páginas depositadas se refieren a delitos cometidos hasta el año 1992, dos años antes del primer mandato de Berlusconi, ya que el senador ha sido absuelto de los crímenes que se le imputaban posteriores a esta fecha.
En particular, escriben los jueces, el imputado permitió a los jefes mafiosos contactar y dirigirse a Berlusconi, que en aquella época ya era un empresario en claro ascenso hacia el poder. Los jueces consideran además que el fallecido mafioso Vittorio Mangano fue contratado, con la mediación de Dell'Utri, para trabajar para Silvio Berlusconi con el fin de garantizar su seguridad y la de su familia -por la que pagó grandes sumas de dinero-, y no como mozo de cuadras, como se había dicho. Además, según los jueces, Dell' Ultri "habría contribuido conscientemente a la consolidación y el reforzamiento de la asociación mafiosa".
Unas acusaciones que pudieron ser contrastadas al testimonio de uno de los colaboradores de la Justicia, Francesco Di Carlo, que reconstruyó las relaciones de Dell'Utri con la Cosa Nostra, y al que la justicia asegura que le da toda la credibilidad.
Sin embargo, los jueces establecieron que no existen pruebas suficientes de que entre Dell'Utri y la Cosa Nostra se estipulara un pacto político-maioso, como sostenía la acusación, que alegó que el senador adquirió compromisos con la asociación mafiosa a cambio de su apoyo electoral en los comicios de 1994.
Dell' Ultri, por su parte, dice sentirse "tranquilo" ante estas explicaciones aportadas por los jueces. "No me pueden condenar por nada", ha añadido, según recoge el diario La Repubblica.
En primera instancia el proceso se prolongó durante más de siete años y en él fueron llamados a declarar cerca de 270 testigos, entre ellos el propio Berlusconi, aunque se acogió al derecho de no responder.