La Paz FC le arrancó un punto a Real Mamoré en un final con incidentes
Trinidad, Erbol
Un inesperado empate 2-2 arrancó La Paz FC sobre el final del encuentro frente a Real Mamoré provocando la bronca de la afición, algunos de los cuales ingresaron al terreno y otros arrojaron botellas contra el juez e intentaron agredir a los azulgranas.
Los jueces fueron protegidos por los policías que apelaron a los gases lacrimógenos para frenar a los iracundos aficionados que arrojaron piedras y botellas. mientras los integrantes de La Paz FC tuvieron que retirarse presurosos a su vestuario y pidieron protección para retornar a La Paz.
El que parecía ser un triunfo claro y contundente del equipo local se transformó en un final de bochorno, porque el público local pasó de la algría al desencanto y de la celebración a la bronca, porque el equipo dueño de casa se confió demasiado.
Julio César Cortez, con un remate bien colocado superó a Eder Jordán a los 7 y empezó la fiesta para el equipo local, que en cada llegada a la zona defensiva rival ponía en aprietos a Diómedes Peña y sus dirigidos.
La presión era tal, que los desaciertos se mutiplicaron en el equipo visitante de manera que a los 21 y luego de una dubitación, apareció en el área Julio César Maraude para marcar el segundo y dar la tranquilidad al local, que luego bajó los brazos y permitió que se ordenara el rival, que tuvo un par de oportunidades en las arrrancadas de Víctor Hugo Angola.
El descanso sirvió para entonar a la visita, mientras el local sólo parecía empeñado en que pasara el tiempo. A los 28 una pase de Gary Paz preciso y a la entrada de Angola le permitió a éste definir con remate colocado para marcar el descuento.
Con la ventaja de un gol de ventaja, el local trató de ordenar sus líneas y empezó a crecer el desconcierto mientras la tribuna local expresaba su disconformidad, hasta que cuando se jugaba un minuto de dscuento, Jarid Asprilla con una magnífica media vuelta marcó el empate.
Los cuatro minutos de adición fueron de infarto, porque Real Mamoré se fue decididamente al ataque y los visitantes perdían el tiempo, hasta que el juez Jorge Jordán decretó el final que provocó la bronca del público y el trabajo arduo de la Policía para proteger a los protagonistas.
Este empate le abre una gran chance a Wilstermann que con un triunfo podría sacar dos puntos de ventaja si este domingo logra vencer a Real Potosí.
Un inesperado empate 2-2 arrancó La Paz FC sobre el final del encuentro frente a Real Mamoré provocando la bronca de la afición, algunos de los cuales ingresaron al terreno y otros arrojaron botellas contra el juez e intentaron agredir a los azulgranas.
Los jueces fueron protegidos por los policías que apelaron a los gases lacrimógenos para frenar a los iracundos aficionados que arrojaron piedras y botellas. mientras los integrantes de La Paz FC tuvieron que retirarse presurosos a su vestuario y pidieron protección para retornar a La Paz.
El que parecía ser un triunfo claro y contundente del equipo local se transformó en un final de bochorno, porque el público local pasó de la algría al desencanto y de la celebración a la bronca, porque el equipo dueño de casa se confió demasiado.
Julio César Cortez, con un remate bien colocado superó a Eder Jordán a los 7 y empezó la fiesta para el equipo local, que en cada llegada a la zona defensiva rival ponía en aprietos a Diómedes Peña y sus dirigidos.
La presión era tal, que los desaciertos se mutiplicaron en el equipo visitante de manera que a los 21 y luego de una dubitación, apareció en el área Julio César Maraude para marcar el segundo y dar la tranquilidad al local, que luego bajó los brazos y permitió que se ordenara el rival, que tuvo un par de oportunidades en las arrrancadas de Víctor Hugo Angola.
El descanso sirvió para entonar a la visita, mientras el local sólo parecía empeñado en que pasara el tiempo. A los 28 una pase de Gary Paz preciso y a la entrada de Angola le permitió a éste definir con remate colocado para marcar el descuento.
Con la ventaja de un gol de ventaja, el local trató de ordenar sus líneas y empezó a crecer el desconcierto mientras la tribuna local expresaba su disconformidad, hasta que cuando se jugaba un minuto de dscuento, Jarid Asprilla con una magnífica media vuelta marcó el empate.
Los cuatro minutos de adición fueron de infarto, porque Real Mamoré se fue decididamente al ataque y los visitantes perdían el tiempo, hasta que el juez Jorge Jordán decretó el final que provocó la bronca del público y el trabajo arduo de la Policía para proteger a los protagonistas.
Este empate le abre una gran chance a Wilstermann que con un triunfo podría sacar dos puntos de ventaja si este domingo logra vencer a Real Potosí.