Insulza: política de intervención fue descartada en la OEA y reemplazada por una de multilateralismo

Santa Cruz, Abi
El Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), el chileno José Miguel Insulza, afirmó que la política de intervención en ese organismo regional fue descartada y reemplazada con una de multilateralismo moderno y de cooperación internacional.

Insulza, que inauguró la IX Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas junto al presidente boliviano Evo Morales en la ciudad de Santa Cruz, dijo que en las dos últimas décadas la OEA ha aceptado principios y ha establecido normas relativas al respeto a la soberanía y al principio de la no intervención.

Además a la protección de los derechos humanos, a la defensa de la democracia, a la solución pacífica de controversias, a la igualdad jurídica de los estados, a la transparencia de la gestión pública, a la protección de los derechos de la mujer, a la no discriminación de minorías y personas incapacitadas y muchos otros, que fueron desarrollados en el continente antes que fueran reconocidos en otras regiones del planeta.

"Durante más de tres décadas y en el marco de la llamada guerra fría la OEA se separó de algunos de estos referentes esenciales, llegando incluso a aceptar, justificar o respaldar regímenes constituidos a partir del derrocamiento de gobiernos originados democráticamente", recordó.

En ese marco, dijo que los estados son conscientes de que esas políticas solo sirvieron para postergar por muchos años la recuperación de la democracia y las libertades que creían servir.

"Por ello la política de intervención se ha ido de la OEA y ha sido reemplazada por una política de multilateralismo moderno y de cooperación internacional", aseguró.

El Secretario General de la OEA dijo que, en ese marco, ese organismo multilateral vive desde hace más de dos décadas una nueva etapa, que tuvo un hito importante en junio de 1991 con la aprobación "de la resolución 1080 y una nueva y más poderosa manifestación al año siguiente, cuando en diciembre de 1992 se modificó la carta de la OEA".

"Cuando se declaró al régimen democrático como una obligación de los estados miembros y condición para su membrecía y permanencia en el sistema interamericano", matizó.

Insulza aseguró que la OEA seguirá buscando los medios para solucionar los problemas en el futuro, para evitar la ruptura de la democracia o conflictos entre los integrantes.

A su juicio, América Latina y el Caribe son una región de paz y deben mantenerse así y aseguró que en la OEA deben tener cabida siempre todos los países miembros, sobre la base de la disposición al diálogo y la disposición pacífica de las diferencias

"En el marco de sus propios objetivos políticos muchos gobiernos se han propuesto con disimiles resultados realizar transformaciones políticas profundas, sin embargo, lo que queremos destacar es que todos esos procesos se realizan en el contexto del respeto por la Constitución y la Ley y cuando los resultados son adversos a sus pretensiones los gobiernos las aceptan sin excepciones", remarcó.

En esa dirección, dijo que las Fuerzas Armadas contemporáneas están llamadas a ser un complemento directo de la actividad de los estados en el campo de las relaciones internacionales.

Testificó que la Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas ha cumplido una importante y necesaria función desde su primera reunión, hace 15 años en Virginia.

En ese camino, dijo que se dejó atrás una concepción que entendía a la seguridad como una asociada a la posibilidad de conflicto armado entre las naciones y destacó la nueva concepción denominada "de seguridad multidimensional", que se plantea desde el punto de vista de la cooperación ante situaciones muy diversas.

"Desde los desastres naturales a las pandemias, al crimen internacional o al terrorismo, pero también en cuanto a las amenazas comunes a la seguridad regional e internacional", puntualizó.

El Secretario General de la OEA dijo que esas consideraciones exigen compatibilizar los escenarios de hoy con una clara voluntad de subordinación de la fuerza militar al mando civil, evitando cualquier tentación de extender su actividad a tareas que no son compatibles con su naturaleza.

Recordó que en los próximos meses se iniciará un trabajo de adaptación de la Junta Interamericana, para integrarla mejor dentro de la OEA, y ponerla en condiciones de cumplir las tareas que le corresponden como órgano especializado.

En esa dirección pidió a la IX Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas "una orientación clara" de los ministros que participan en el foro para coadyuvar con ese plan.