El temor inflacionista hace mella en Wall Street
Nueva York, Agencias
Los temores sobre un posible aumento de la inflación en la economía estadounidense como consecuencia del plan de estímulo lanzado la semana pasada por la Reserva Federal de ese país se apoderaron hoy de Wall Street y sus principales índices acabaron la sesión en terreno negativo.
Después de que la semana pasada el Dow Jones de Industriales recuperara niveles previos a la caída de Lehman Brothers, este martes el principal índice del parqué neoyorquino se resintió de la resaca y selló la jornada con un descenso del 0,53%.
También se tiñeron de rojo el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que acabaron la sesión con pérdidas del 0,81% y el 0,66%, respectivamente.
El anuncio por parte de la Fed (banco central) de inyectar 600.000 millones de liquidez en la economía para bajar los tipos a largo plazo y estimular el consumo causó la euforia en el mercado neoyorquino a finales de la semana pasada, pero ahora era esa misma noticia la que provocaba las caídas en Wall Street.
Los inversores analizaban el impacto de ese plan de compra de bonos del Tesoro y temían que como consecuencia aumentara la inflación en Estados Unidos, por lo que se decantaron por las ventas, que afectaron principalmente al sector financiero, que cedió el 1,38%.
Bank of America lideró los descensos de la jornada en el Dow Jones de Industriales al perder un 2,62%, mientras que JPMorgan Chase bajó el 1,51% y American Express retrocedió el 1,23%, en lo que, fuera de ese índice, Morgan Stanley cayó el 3,27%, Wells Fargo el 3,13% y Citigroup el 3,11%.
Todos los sectores de Wall Street cerraron en números rojos: el de las materias primas cayó un 1,41%, el de transportes lo hizo un 1,25%, el de servicios cedió un 0,83% y el energético bajó un 0,6%, mientras que el sector tecnológico registró el menor descenso, del 0,44%.
Entre los integrantes del Dow Jones, destacaron también las pérdidas que anotaron el grupo alimentario Kraft (-1,61%), la farmacéutica Merck (-1,6%), la química DuPont (-1,57%), el fabricante de aluminio Alcoa (-1,51%), el de maquinaria industrial Caterpillar (-1,46%) y el aeronáutico Boeing (-1,37%).
La petrolera Chevron acabó con un descenso del 1,46% el mismo día en que anunció que comprará la productora de gas natural Atlas Energy por un total de 4.300 millones de dólares, lo que llevó a las acciones de esa compañía ganar el 33,98% en el mercado Nasdaq.
Destacó también el avance del 3,22% que lograron las acciones del portal Yahoo en ese mismo mercado donde cotizan numerosas empresas tecnológicas, en una jornada en la que se acrecentaban los rumores sobre la intención de diferentes empresas de hacerse con la compañía de Internet.
El verdadero ganador de esta jornada de indecisión fue el oro, que logró marcar su segundo máximo histórico consecutivo al cerrar sus contratos de diciembre a 1.410,1 dólares la onza, gracias a la fuga de inversores a este metal precioso, que se ve como refugio ante el temor inflacionista y los descensos de Wall Street.
La plata también acabó con subidas la jornada en Nueva York, donde sus contratos también para diciembre acabaron a 28,9 dólares, lo que supone su precio más alto en treinta años.
También se fortalecía el dólar, que en esta jornada subió ante el euro, de manera que por una moneda europea se pagaban 1,3778 dólares, comparado con los 1,3923 que hacían falta la jornada anterior.
Esta apreciación del dólar volvía a demostrar la relación inversa entre el mercado de valores y la divisa estadounidense, que supone que mientras desciende la bolsa asciende el dólar y viceversa.
En ese ambiente, los inversores están pendientes estos días de la reunión del G20 que tendrá lugar en Seúl dentro de dos días.
En ella se prevé que los principales líderes de los países desarrollados y emergentes debatan sobre la llamada "guerra de divisas", que se ha visto más acalorada desde la pasada acción de la Reserva Federal y las críticas lanzadas por Europa hacia ese plan de estímulo.
Los temores sobre un posible aumento de la inflación en la economía estadounidense como consecuencia del plan de estímulo lanzado la semana pasada por la Reserva Federal de ese país se apoderaron hoy de Wall Street y sus principales índices acabaron la sesión en terreno negativo.
Después de que la semana pasada el Dow Jones de Industriales recuperara niveles previos a la caída de Lehman Brothers, este martes el principal índice del parqué neoyorquino se resintió de la resaca y selló la jornada con un descenso del 0,53%.
También se tiñeron de rojo el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que acabaron la sesión con pérdidas del 0,81% y el 0,66%, respectivamente.
El anuncio por parte de la Fed (banco central) de inyectar 600.000 millones de liquidez en la economía para bajar los tipos a largo plazo y estimular el consumo causó la euforia en el mercado neoyorquino a finales de la semana pasada, pero ahora era esa misma noticia la que provocaba las caídas en Wall Street.
Los inversores analizaban el impacto de ese plan de compra de bonos del Tesoro y temían que como consecuencia aumentara la inflación en Estados Unidos, por lo que se decantaron por las ventas, que afectaron principalmente al sector financiero, que cedió el 1,38%.
Bank of America lideró los descensos de la jornada en el Dow Jones de Industriales al perder un 2,62%, mientras que JPMorgan Chase bajó el 1,51% y American Express retrocedió el 1,23%, en lo que, fuera de ese índice, Morgan Stanley cayó el 3,27%, Wells Fargo el 3,13% y Citigroup el 3,11%.
Todos los sectores de Wall Street cerraron en números rojos: el de las materias primas cayó un 1,41%, el de transportes lo hizo un 1,25%, el de servicios cedió un 0,83% y el energético bajó un 0,6%, mientras que el sector tecnológico registró el menor descenso, del 0,44%.
Entre los integrantes del Dow Jones, destacaron también las pérdidas que anotaron el grupo alimentario Kraft (-1,61%), la farmacéutica Merck (-1,6%), la química DuPont (-1,57%), el fabricante de aluminio Alcoa (-1,51%), el de maquinaria industrial Caterpillar (-1,46%) y el aeronáutico Boeing (-1,37%).
La petrolera Chevron acabó con un descenso del 1,46% el mismo día en que anunció que comprará la productora de gas natural Atlas Energy por un total de 4.300 millones de dólares, lo que llevó a las acciones de esa compañía ganar el 33,98% en el mercado Nasdaq.
Destacó también el avance del 3,22% que lograron las acciones del portal Yahoo en ese mismo mercado donde cotizan numerosas empresas tecnológicas, en una jornada en la que se acrecentaban los rumores sobre la intención de diferentes empresas de hacerse con la compañía de Internet.
El verdadero ganador de esta jornada de indecisión fue el oro, que logró marcar su segundo máximo histórico consecutivo al cerrar sus contratos de diciembre a 1.410,1 dólares la onza, gracias a la fuga de inversores a este metal precioso, que se ve como refugio ante el temor inflacionista y los descensos de Wall Street.
La plata también acabó con subidas la jornada en Nueva York, donde sus contratos también para diciembre acabaron a 28,9 dólares, lo que supone su precio más alto en treinta años.
También se fortalecía el dólar, que en esta jornada subió ante el euro, de manera que por una moneda europea se pagaban 1,3778 dólares, comparado con los 1,3923 que hacían falta la jornada anterior.
Esta apreciación del dólar volvía a demostrar la relación inversa entre el mercado de valores y la divisa estadounidense, que supone que mientras desciende la bolsa asciende el dólar y viceversa.
En ese ambiente, los inversores están pendientes estos días de la reunión del G20 que tendrá lugar en Seúl dentro de dos días.
En ella se prevé que los principales líderes de los países desarrollados y emergentes debatan sobre la llamada "guerra de divisas", que se ha visto más acalorada desde la pasada acción de la Reserva Federal y las críticas lanzadas por Europa hacia ese plan de estímulo.