El Milan ya tiene su billete para los octavos de final


Milan, Agencias

El sueco Zlatan Ibrahimovic y el brasileño Ronaldinho sentenciaron con un gol cada uno el partido de Liga de Campeones ante el Auxerre (0-2) y clasificaron para los octavos de final al Milan, que se vio favorecido por la victoria del Real Madrid sobre el Ajax.

A pesar de que los italianos no ofrecieron su mejor versión -que les ha llevado a liderar la liga italiana-, una genialidad del sueco en la segunda parte y un tanto del brasileño en el descuento acabaron con las esperanzas de un voluntarioso Auxerre.

Con los resultados de la jornada, los de Massimiliano Allegri consiguen su billete para la siguiente ronda como segundos de grupo, tras el Real Madrid, que hoy le echó una mano al Milan al vencer en Amsterdam al Ajax (0-4).

Allegri sentó en el banquillo precisamente al ex barcelonista Ronaldinho y apostó por la dupla en ataque que formaron otros dos viejos conocidos de la liga española, Ibrahimovic y el brasileño Robinho.

Sin embargo, y a medida que avanzaba el partido, en el centro del campo milanés se notaba demasiado la ausencia del lesionado Pirlo, ya que ni Flamini, ni Seedorf, ni Gattuso, ni Ambrosini conseguían conectar con la parte ofensiva del equipo.

Los italianos tardaron veinte minutos en tener su primera ocasión clara, después de una buena asistencia de Ibrahimovic con la cabeza para el holandés Seedorf, cuyo disparo rozó el larguero de la meta defendida por Sorin.

Por su parte, el Auxerre esperaba ordenado al rival y trataba de salir rápido a la contra, sobre todo con la velocidad de Contout y de Sammaritano, pero sus escasas ocasiones de peligro no encontraban un rematador.

A falta de juego y de ocasiones, tan sólo un error podía balancear el marcador, y este llegó tras una pifia del central Coulibaly, que dejó el balón muerto dentro del área cuando trataba de despejarlo.

Para mala suerte de los italianos, la pelota no cayó ni a "Ibra" ni a Robinho, sino a Gatusso, que falto de instinto asesino chutó arriba cuando lo tenía todo para inaugurar el casillero, por lo que se llegó al descanso con un justo empate a cero goles.

El guión del partido no cambió en el inicio del segundo periodo. El Milán tenía la posesión pero no acababa de acercarse al área de Sorin, si bien Robinho lo intentó tras una buena jugada del lateral Abate, que por primera vez llegó hasta la línea de fondo para centrar.

Tuvo que aparecer el sueco Ibrahimovic para salvar el hasta entonces mediocre partido del Milan, cuando recogió un balón suelto y lanzó un cañonazo inapelable ante el que nada pudo hacer Sorin (m.64).

El ex azulgrana marcó de esta manera su cuarto gol en la Liga de Campeones (3 ante el Auxerre), demostró que está en plena forma y que se ha convertido en el referente de este Milan.

El Auxerre trató de estirarse en el tramo final del encuentro, pero los de Jean Fernández no tienen profundidad en ataque, debido a las bajas de sus dos mejores delanteros, el polaco Jelen y el francés Le Tallec.

Ronaldinho ocupó el puesto del goleador Ibrahimovic a falta de cinco minutos del final, y le sobró tiempo para establecer el definitivo 0-2 con un gol con la izquierda de clase, colocando el balón lejos de donde puede llegar cualquier guardameta.

Mientras el Milán se clasificó para octavos, los franceses se jugarán en la última jornada sus opciones de entrar en la Liga Europa ante el Real Madrid, aunque necesitarán un resultado positivo en el Bernabéu y un pinchazo del Ajax ante los italianos.

Auxerre: Sorin; Hengbart (Chafni, m.58), Coulibaly, Grichting, Dudka; Oliech, Pedretti, Ndinga, Birsa, Sammaritano (Quercia, m.66) y Contout (Traoré, m.82).

Milan: Abbiati; Abate, Nesta, Thiago Silva, Zambrotta; Gattuso (Strasse,m.90), Ambrosini, Flamini, Seedorf (Boateng, m.75); Ibrahimovic (Ronaldinho, m.85) y Robinho.

Goles: 0-1, m.64: Zlatan Ibrahimovic. 0-2: Ronaldinho, m.91

Árbitro: Árbitro: Damir Skomina (ESL). Amonestó al visitante Ambrosini (m.44).

Incidencias: Encuentro del grupo G correspondiente a la quinta jornada de la fase de grupos disputado en el estadio Abbé-Deschamps, en Auxerre, ante unos 20.000 espectadores.

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