Un juez de Dallas no tiene nada que decir sobre la venta del Liverpool
Londres, As
El Alto Tribunal de Londres volvió a invalidar hoy el último intento de los propietarios del Liverpool, los estadounidenses Tom Hicks y George Gillet, para bloquear la venta del club al consorcio New England Sporting Ventures (NESV).
La sentencia dictada esta tarde por el juez británico Christopher Floyd anula las decisiones tomadas por el Tribunal de Texas, que paralizó anoche el proceso de venta de la entidad inglesa al considerar que los actuales dueños tienen potestad para remodelar el consejo y, por tanto, intervenir en la elección del comprador.
Después de que ayer, el mismo Tribunal de Londres diera la razón al Royal Bank of Scotland (RBS), principal acreedor del Liverpool, y a la junta directiva para seguir adelante con la venta a la candidatura de NESV, los propietarios acudieron a una corte de la ciudad de Dallas (en el estado de Texas) para frenar esa operación.
La intención de Hicks y Gillet que, al igual que el posible comprador del club -NESV- tienen grandes intereses en Estados Unidos a través de otros negocios deportivos, era expulsar a dos miembros del consejo para sustituirlos por dos personas de su conveniencia que les permitieran controlar la votación.
No obstante, la decisión de la justicia británica ayer obligó a los dueños a restablecer la composición del consejo, que decidió reunirse por la noche para reanudar el proceso de venta y concluirlo antes de que mañana, viernes, concluya el plazo del RBS para que el club devuelva el préstamo que en 2007 hizo a Hicks y Gillet.
"Unos cinco minutos antes de que el consejo comenzara la reunión a las 20.30 (19.30 GMT de ayer), fuimos informados de que (los propietarios) habían obtenido ayuda de un juzgado de Texas", explicó el representante del RBS, Richard Snowden, al finalizar la vista en la que se pronunció hoy el juez del Alto Tribunal de Londres.
Éste aseguró que "los procedimientos en Texas son sencillamente inapropiados. Esta disputa afecta a un club de fútbol inglés y a tres compañías inglesas -que controlan el Liverpool- y la única conexión con Texas es que Hicks y Gillet podrían residir allí", indicó indignado por las dificultades del proceso.
Tras esa intervención de la justicia estadounidense, el caso volvió hoy a los juzgados de Londres y al pronunciarse en contra de los propietarios, la junta directiva -compuesta por cinco miembros- tiene ya el camino abierto para proceder a la venta de la entidad de Anfield a New England Sports Ventures (NESV), a su vez dueños del equipo de béisbol Boston Red Sox.
La oferta de ese conglomerado empresarial es de 300 millones de libras (340 millones de euros) y todo indicada que será ésa la candidatura elegida por la junta directiva, pues contaba ya con su aceptación la semana pasada, pese a existir otras ofertas mayores.
El Alto Tribunal de Londres volvió a invalidar hoy el último intento de los propietarios del Liverpool, los estadounidenses Tom Hicks y George Gillet, para bloquear la venta del club al consorcio New England Sporting Ventures (NESV).
La sentencia dictada esta tarde por el juez británico Christopher Floyd anula las decisiones tomadas por el Tribunal de Texas, que paralizó anoche el proceso de venta de la entidad inglesa al considerar que los actuales dueños tienen potestad para remodelar el consejo y, por tanto, intervenir en la elección del comprador.
Después de que ayer, el mismo Tribunal de Londres diera la razón al Royal Bank of Scotland (RBS), principal acreedor del Liverpool, y a la junta directiva para seguir adelante con la venta a la candidatura de NESV, los propietarios acudieron a una corte de la ciudad de Dallas (en el estado de Texas) para frenar esa operación.
La intención de Hicks y Gillet que, al igual que el posible comprador del club -NESV- tienen grandes intereses en Estados Unidos a través de otros negocios deportivos, era expulsar a dos miembros del consejo para sustituirlos por dos personas de su conveniencia que les permitieran controlar la votación.
No obstante, la decisión de la justicia británica ayer obligó a los dueños a restablecer la composición del consejo, que decidió reunirse por la noche para reanudar el proceso de venta y concluirlo antes de que mañana, viernes, concluya el plazo del RBS para que el club devuelva el préstamo que en 2007 hizo a Hicks y Gillet.
"Unos cinco minutos antes de que el consejo comenzara la reunión a las 20.30 (19.30 GMT de ayer), fuimos informados de que (los propietarios) habían obtenido ayuda de un juzgado de Texas", explicó el representante del RBS, Richard Snowden, al finalizar la vista en la que se pronunció hoy el juez del Alto Tribunal de Londres.
Éste aseguró que "los procedimientos en Texas son sencillamente inapropiados. Esta disputa afecta a un club de fútbol inglés y a tres compañías inglesas -que controlan el Liverpool- y la única conexión con Texas es que Hicks y Gillet podrían residir allí", indicó indignado por las dificultades del proceso.
Tras esa intervención de la justicia estadounidense, el caso volvió hoy a los juzgados de Londres y al pronunciarse en contra de los propietarios, la junta directiva -compuesta por cinco miembros- tiene ya el camino abierto para proceder a la venta de la entidad de Anfield a New England Sports Ventures (NESV), a su vez dueños del equipo de béisbol Boston Red Sox.
La oferta de ese conglomerado empresarial es de 300 millones de libras (340 millones de euros) y todo indicada que será ésa la candidatura elegida por la junta directiva, pues contaba ya con su aceptación la semana pasada, pese a existir otras ofertas mayores.