Policía incauta 4.000 celulares falsificados en Iquique que iban a ser enviados a Bolivia y Perú
Iquique, Abi
Agentes de la Brigada Investigadora de Delitos en Recintos Portuarios Iquique (BRIDERPO) incautaron el martes más de 4.000 celulares falsificados, cuyo valor supera los 370 millones de pesos, es decir 17,7 millones de dólares.
Según un informe del sitio digital del periódico El Mercurio, en el procedimiento se incautaron teléfonos celulares de reconocidas marcas como Sony Ericcson, Nokia, Apple (Iphone), Samsung y Blackberry, además se requisaron más de 1.300 memorias falsificadas con las marcas Kingston y Sony.
Estos productos trasgredían la normativa vigente de Propiedad Industrial, por tratarse de celulares falsificados que no contaban con las autorización de los representantes de las respectivas marcas en el país.
Los productos eran internados al territorio nacional sin los sellos de autenticidad, para luego ser ensamblados y vendidos en el extranjero.
Agrega que el procedimiento se llevó a cabo en el interior del recinto amurallado en la Zona Franca de Iquique, lugar hasta donde los investigadores procedieron a la incautación de las mercaderías.
El propietario de la mercadería era un ciudadano de nacionalidad China, quien internaba los productos al país, con la finalidad de comercializarlos en Chile, Perú y Bolivia.
Agentes de la Brigada Investigadora de Delitos en Recintos Portuarios Iquique (BRIDERPO) incautaron el martes más de 4.000 celulares falsificados, cuyo valor supera los 370 millones de pesos, es decir 17,7 millones de dólares.
Según un informe del sitio digital del periódico El Mercurio, en el procedimiento se incautaron teléfonos celulares de reconocidas marcas como Sony Ericcson, Nokia, Apple (Iphone), Samsung y Blackberry, además se requisaron más de 1.300 memorias falsificadas con las marcas Kingston y Sony.
Estos productos trasgredían la normativa vigente de Propiedad Industrial, por tratarse de celulares falsificados que no contaban con las autorización de los representantes de las respectivas marcas en el país.
Los productos eran internados al territorio nacional sin los sellos de autenticidad, para luego ser ensamblados y vendidos en el extranjero.
Agrega que el procedimiento se llevó a cabo en el interior del recinto amurallado en la Zona Franca de Iquique, lugar hasta donde los investigadores procedieron a la incautación de las mercaderías.
El propietario de la mercadería era un ciudadano de nacionalidad China, quien internaba los productos al país, con la finalidad de comercializarlos en Chile, Perú y Bolivia.