Fútbol argentino: Godoy Cruz acentuó la crisis de Independiente
Mendoza, Agencias
Godoy Cruz le dio el el sábado una paliza a Independiente al golearlo por 4-1 y se metió de nuevo en la pelea por el título del torneo Apertura después de haber dejado puntos en el camino en las últimas jornadas.
Independiente se puso en ventaja rápidamente con un gol de Andrés Silvera. Pero a partir de entonces el Tomba fue claro dominador y lo dio vuelta con goles del colombiano Jairo Castillo, Rodrigo Salinas y Carlos Sánchez, en la primera mitad, y Jorge Curbelo, en la segunda parte.
Independiente nunca le encontró la vuelta al partido y terminó siendo vapuleado por el local. Para colmo de males, sobre el final se quedó con un hombre menos por la expulsión de Leonel Galeano.
Godoy Cruz se perfiló desde el inicio como amplio dominador, pero fue Independiente el que pegó primero. A los 8 minutos Eduardo Tuzzio sacó un centro desde la derecha y Silvera, libre, acribilló de cabeza a un indefenso Sebastián Torrico.
Pero la alegría le duro poco a los de Avellaneda, ya que el Tomba no sintió el golpe y transformó el resto de ese primer tiempo en un monólogo.
A los cuyanos les faltó profundidad hasta los 19 minutos cuando Castillo recibió un buen pase de Ariel Rojas, se acomodó en el área y de derecha venció a Adrián Gabbarini.
El local siguió monopolizando el balón, apoyado en las proyecciones por las bandas de Rojas y Carlos Sánchez. Fue justamente el uruguayo, a los 28 minutos, quien desbordó por derecha y sacó un centro bajo que Salinas empalmó de primera para marcar el segundo.
De ahí hasta el final de la etapa el local se floreó y a los 36 llegó al tercero. Castillo habilitó de taco a Sánchez y el volante se fue solo por el medio y con un zurdazo le puso cifras ajustadas al marcador de la primer parte.
La segunda etapa estuvo de más porque al minuto el local Godoy Cruz ganó un córner y el uruguayo Curbelo de cabeza alejó cualquier atisbo de reacción de Independiente.
El equipo de Omar Asad levantó el pie del acelerador y se dedicó a regular ante la alarmante impotencia del Rojo. El partido no volvió a brindar mayores emociones y todo el peso de las acciones recayeron sobre las cada vez más escasas intenciones ofensivas del local.
En el final Independiente perdió a Galeano, expulsado por juego brusco, y el local pudo aumentar Castillo de cabeza a los 40 minutos, pero Gabbarini logró rechazar con lo justo al córner. Y el final encontró a los mendocino festejando un triunfo espectacular, logrado sin uno de sus baluartes, el suspendido David Ramírez, mientras Independiente quedó navegando en un mar de dudas, una semana antes del clásico de Avellaneda.