El jefe de la policía ecuatoriana se disculpa por la sublevación
Quito, El País
El comandante general de la Policía de Ecuador, Patricio Franco, ofreció hoy las disculpas públicas de la institución por la sublevación de un grupo de agentes del pasado 30 de septiembre. Además, el nuevo responsable de las fuerzas policiales anunció que se acometerá una reorganización total de la institución y ha calificado lo ocurrido como "lamentable".
Franco presentó "las sentidas disculpas al pueblo ecuatoriano y al presidente constitucional de la República (Rafael Correa), por los lamentables hechos acontecidos el 30 de septiembre, protagonizados por un grupo de policías". Según este dirigente, "lo ocurrido es el resultado de varios componentes y actores sobre los cuales deberán pronunciarse las autoridades correspondentes, cuya decisión respetaremos", en referencia a los procesos abiertos contra decenas de agentes que participaron en la revuelta. Trece detenidos esperan juicio por la asonada. Otros 20 implicados deberán presentarse semanalmente ante un tribunal.
"La institución policial realizará las acciones internas que correspondan de acuerdo a los niveles de responsabilidad" de los involucrados en la revuelta, añadió Franco.
Aquel día, Correa se refugió en un hospital tras ser agredido en un cuartel. Los policías insurrectos pusieron en jaque al Gobierno de Quito al mantener retenido al presidente por más de nueve horas en un hospital de la institución. Se produjo un tiroteo entre los agentes y un comando de militares leales al presidente que finalmente consiguieron rescatarle .
Correa anunció "una profunda depuración de la Policía Nacional" y afirmó que "no habrá perdón ni olvido" para lo que definió como "un intento de golpe de Estado". El jefe de la policía, Freddy Martínez, dimitió entonces por su incapacidad para evitar la protesta.
"Un claro ejemplo de conspiración", según Correa
"No se trató de una legítima reclamación salarial, sino de un claro ejemplo de conspiración", dijo Correa en una rueda de prensa tras ser liberado, en referencia a las alegaciones de los policías sublevados, que protestaban contra un proyecto de ley que reduce sus beneficios salariales. Según Correa, cuando intentó explicarles que les elevó los sueldos "como nunca antes", las tropas le respondieron "no, eso lo hizo Lucio (Gutiérrez), sabiendo bien entonces quiénes estaban en esa conspiración", dijo. "En esto hubo gente de Lucio Gutiérrez ", dijo el mandatario, en referencia a quien fue presidente ecuatoriano de enero de 2003 a abril de 2005.
El Gobierno anunció que buscaría a los responsables. Por su parte, el líder de la oposición y ex presidente se defendió poniendo en duda el secuestro de Correa .
El comandante general de la Policía de Ecuador, Patricio Franco, ofreció hoy las disculpas públicas de la institución por la sublevación de un grupo de agentes del pasado 30 de septiembre. Además, el nuevo responsable de las fuerzas policiales anunció que se acometerá una reorganización total de la institución y ha calificado lo ocurrido como "lamentable".
Franco presentó "las sentidas disculpas al pueblo ecuatoriano y al presidente constitucional de la República (Rafael Correa), por los lamentables hechos acontecidos el 30 de septiembre, protagonizados por un grupo de policías". Según este dirigente, "lo ocurrido es el resultado de varios componentes y actores sobre los cuales deberán pronunciarse las autoridades correspondentes, cuya decisión respetaremos", en referencia a los procesos abiertos contra decenas de agentes que participaron en la revuelta. Trece detenidos esperan juicio por la asonada. Otros 20 implicados deberán presentarse semanalmente ante un tribunal.
"La institución policial realizará las acciones internas que correspondan de acuerdo a los niveles de responsabilidad" de los involucrados en la revuelta, añadió Franco.
Aquel día, Correa se refugió en un hospital tras ser agredido en un cuartel. Los policías insurrectos pusieron en jaque al Gobierno de Quito al mantener retenido al presidente por más de nueve horas en un hospital de la institución. Se produjo un tiroteo entre los agentes y un comando de militares leales al presidente que finalmente consiguieron rescatarle .
Correa anunció "una profunda depuración de la Policía Nacional" y afirmó que "no habrá perdón ni olvido" para lo que definió como "un intento de golpe de Estado". El jefe de la policía, Freddy Martínez, dimitió entonces por su incapacidad para evitar la protesta.
"Un claro ejemplo de conspiración", según Correa
"No se trató de una legítima reclamación salarial, sino de un claro ejemplo de conspiración", dijo Correa en una rueda de prensa tras ser liberado, en referencia a las alegaciones de los policías sublevados, que protestaban contra un proyecto de ley que reduce sus beneficios salariales. Según Correa, cuando intentó explicarles que les elevó los sueldos "como nunca antes", las tropas le respondieron "no, eso lo hizo Lucio (Gutiérrez), sabiendo bien entonces quiénes estaban en esa conspiración", dijo. "En esto hubo gente de Lucio Gutiérrez ", dijo el mandatario, en referencia a quien fue presidente ecuatoriano de enero de 2003 a abril de 2005.
El Gobierno anunció que buscaría a los responsables. Por su parte, el líder de la oposición y ex presidente se defendió poniendo en duda el secuestro de Correa .