Activistas de DDHH que elaboraron Ley Antirracismo piden aprobación plena
La Paz, Abi
Representantes de la Red Contra el Racismo, que está conformada por más de 100 organizaciones y personas particulares, que participaron en la elaboración del proyecto de Ley Contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación, pidieron el martes al presidente Evo Morales que se apruebe en la Asamblea Legislativa sin modificaciones, porque aseguraron que no vulnera la libertad de prensa, como consideran empresarios de medios y periodistas.
Los representantes de esa organización y de otras defensoras de los Derechos Humanos, se reunieron con el Jefe de Estado en Palacio de Gobierno y fundamentaron su contenido.
Revelaron que ese proyecto de ley fue trabajado en más de dos años, después de los hechos racistas que se registraron en 2008: en el chaco con denuncias de esclavitud, en mayo en Sucre con la vejación a campesinos y en septiembre en la denominada masacre de Porvenir, y aseguraron no fue ingresado al legislativo por el Gobierno.
Amanda Dávila, representante de la Red Contra el Racismo, explicó a los periodistas que pidieron una audiencia para "defender el proyecto de ley" y el artículo 16 "que fue incorporado por la sociedad civil".
"Le hemos explicado al Presidente que el tema de medios se ha incorporado por la sociedad civil, el artículo 16, porque queremos que los medios de comunicación también formen parte de todo este esfuerzo para trabajar con el tema del racismo", puntualizó.
Aseguró que ese artículo, cuestionado por los periodistas y dueños de medios de comunicación, "de ninguna manera coarta la libertad de prensa," porque consideró que no puede haber "libertad de prensa o derecho a la opinión, cuando se trata de delinquir o cuando es un delito".
"Esta es una ley que establece el racismo como un delito, y si uno comete un delito tiene que someterse a la ley, acaso los periodistas están al margen de cualquier ley. No están al margen de ninguna ley", argumentó.
En esa dirección aclaró que, en tano no se cometa un delito, no hay ninguna sanción e insistió en que la Ley Antirracismo está proyectada para sancionar un delito, el racismo, por tanto, "si una persona comete un delito entonces sufre las consecuencias del delito".
Dávila informó que en el encuentro el Jefe de Estado, que se reunió horas antes con representantes de los periodistas, recomendó que se elabore un buen reglamento para que "no haya arbitrariedades y el proyecto sea utilizado en contra de una persona solamente con un fin político"-
"Entonces hemos venido ante el Presidente para que este proyecto de ley sea aprobado tal como se ha trabajado con la Comisión de Derechos Humanos y que el artículo 16 sea respetado. Pero sí el Presidente nos ha dicho que el artículo 16 tiene que ser trabajado en su reglamento con participación de las organizaciones de la prensa y estamos de acuerdo, para evitar cualquier susceptibilidad, que hay muchas", puntualizó.
A su juicio, el reglamento será finalmente el que establezca una sanción porque dijo que "evidentemente no se puede confundir la declaración de una fuente informativa, que puede ser racista, y agregó que en ese caso no es culpa del periodista, ni del medio de comunicación.
"Eso tiene que precisar la reglamentación", matizó al reconocer que no se puede castigar a un medio porque simplemente una fuente informativa se expresa con términos racistas.
"Pero si un medio de comunicación hace apología del racismo, y el racismo es un delito, entonces tiene que ser sancionado", argumentó.
Representantes de la Red Contra el Racismo, que está conformada por más de 100 organizaciones y personas particulares, que participaron en la elaboración del proyecto de Ley Contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación, pidieron el martes al presidente Evo Morales que se apruebe en la Asamblea Legislativa sin modificaciones, porque aseguraron que no vulnera la libertad de prensa, como consideran empresarios de medios y periodistas.
Los representantes de esa organización y de otras defensoras de los Derechos Humanos, se reunieron con el Jefe de Estado en Palacio de Gobierno y fundamentaron su contenido.
Revelaron que ese proyecto de ley fue trabajado en más de dos años, después de los hechos racistas que se registraron en 2008: en el chaco con denuncias de esclavitud, en mayo en Sucre con la vejación a campesinos y en septiembre en la denominada masacre de Porvenir, y aseguraron no fue ingresado al legislativo por el Gobierno.
Amanda Dávila, representante de la Red Contra el Racismo, explicó a los periodistas que pidieron una audiencia para "defender el proyecto de ley" y el artículo 16 "que fue incorporado por la sociedad civil".
"Le hemos explicado al Presidente que el tema de medios se ha incorporado por la sociedad civil, el artículo 16, porque queremos que los medios de comunicación también formen parte de todo este esfuerzo para trabajar con el tema del racismo", puntualizó.
Aseguró que ese artículo, cuestionado por los periodistas y dueños de medios de comunicación, "de ninguna manera coarta la libertad de prensa," porque consideró que no puede haber "libertad de prensa o derecho a la opinión, cuando se trata de delinquir o cuando es un delito".
"Esta es una ley que establece el racismo como un delito, y si uno comete un delito tiene que someterse a la ley, acaso los periodistas están al margen de cualquier ley. No están al margen de ninguna ley", argumentó.
En esa dirección aclaró que, en tano no se cometa un delito, no hay ninguna sanción e insistió en que la Ley Antirracismo está proyectada para sancionar un delito, el racismo, por tanto, "si una persona comete un delito entonces sufre las consecuencias del delito".
Dávila informó que en el encuentro el Jefe de Estado, que se reunió horas antes con representantes de los periodistas, recomendó que se elabore un buen reglamento para que "no haya arbitrariedades y el proyecto sea utilizado en contra de una persona solamente con un fin político"-
"Entonces hemos venido ante el Presidente para que este proyecto de ley sea aprobado tal como se ha trabajado con la Comisión de Derechos Humanos y que el artículo 16 sea respetado. Pero sí el Presidente nos ha dicho que el artículo 16 tiene que ser trabajado en su reglamento con participación de las organizaciones de la prensa y estamos de acuerdo, para evitar cualquier susceptibilidad, que hay muchas", puntualizó.
A su juicio, el reglamento será finalmente el que establezca una sanción porque dijo que "evidentemente no se puede confundir la declaración de una fuente informativa, que puede ser racista, y agregó que en ese caso no es culpa del periodista, ni del medio de comunicación.
"Eso tiene que precisar la reglamentación", matizó al reconocer que no se puede castigar a un medio porque simplemente una fuente informativa se expresa con términos racistas.
"Pero si un medio de comunicación hace apología del racismo, y el racismo es un delito, entonces tiene que ser sancionado", argumentó.